Argentina disfruta de una victoria ante M¨¦xico en la antesala del River - Boca

En un alto al fuego entre las finales de la Copa Libertadores entre River y Boca, el dios de todos los partidos, la selecci¨®n argentina le gan¨® 2-0 a M¨¦xico este viernes por la noche en uno de esos amistosos terrenales, jugados m¨¢s por compromisos comerciales que por inter¨¦s deportivo. La atm¨®sfera est¨¢ tan impregnada del supercl¨¢sico que definir¨¢ al campe¨®n de Am¨¦rica que una de las figuras argentinas fue Leandro Paredes, el exfutbolista de Boca, hoy en el Zenit de Rusia, del que se dijo que forz¨® una suspensi¨®n en la liga rusa para no perderse la final (y que, casualidad o no, el domingo pasado estuvo en La Bombonera).

En un partido que dejar¨¢ tan pocas secuelas que tambi¨¦n se podr¨ªa decir que Argentina empat¨® 2-0 o que M¨¦xico empat¨® 0-2, los goles fueron convertidos por Ramiro Funes Mori a los 44 minutos del primer tiempo, con un cabezazo que venci¨® a la figura mexicana, Guillermo Ochoa, imperial hasta el momento, como si festejara a lo grande su cent¨¦simo partido en el arco del Tri, y por Isaac Brizuela en contra, a los 38 del complemento. Si las tribunas del estadio Mario Kempes, en C¨®rdoba, estuvieron con un buen marco, en un 70% de asistencia, fue porque la organizaci¨®n decidi¨® el lunes bajar el precio a la mitad: las m¨¢s baratas, que costaban 700 pesos argentinos (20 d¨®lares), pasaron a 350. Y tampoco alcanz¨® para llenarse, pero al menos maquill¨® el desinter¨¦s inicial.

Para M¨¦xico fue una doble ratificaci¨®n de una geograf¨ªa dif¨ªcil: fue su cuarto partido como visitante contra la albiceleste, todos amistosos, y contin¨²a sin ganar en Argentina (las anteriores hab¨ªan sido 0-1 en 1962, 1-1 en 1984 y 0-0 en 1991, todos en Buenos Aires). A la vez fue su regreso a C¨®rdoba, la segunda ciudad m¨¢s poblada del pa¨ªs, a 700 kil¨®metros al noreste de Buenos Aires, donde sufri¨® su mayor derrota en la historia de los Mundiales: en el mismo estadio, ahora remodelado y rebautizado como Mario Alberto Kempes, perdi¨® 0-6 contra Alemania Federal en 1978.

No s¨®lo fue un partido amistoso, sino tambi¨¦n amigable, entre dos selecciones j¨®venes que no contaron con sus figuras habituales (Hirving Lozano, Javier Hern¨¢ndez, Andr¨¦s Guardado ni Carlos Vela por el lado de M¨¦xico; ni Sergio Ag¨¹ero, Nicol¨¢s Otamendi, ?ngel Di Mar¨ªa y ni hablar Lionel Messi en Argentina) y que utilizaron el partido como excusa para buscar piezas de renovaci¨®n despu¨¦s del Mundial de Rusia. Y aunque todav¨ªa no sean incuestionables en los mejores equipos de Europa, Argentina mostr¨® que algunos de sus j¨®venes pueden ser una variante para el futuro: en su debut, Juan Foyth se luci¨® en la defensa (fue elegido por la organizaci¨®n como la figura), Paredes y Giovani Lo Celso construyeron una buena sociedad en el mediocampo y Lautaro Mart¨ªnez, mientras busca encontrar su lugar en el Inter, debi¨® haber convertido si no fuera porque choc¨® contra un gran Ochoa.

M¨¦xico, es cierto, estuvo a punto de abrir el marcador cuando el partido estaba 0-0, pero Agust¨ªn Marches¨ªn respondi¨® con arrojo ante Marco Fabi¨¢n. Tambi¨¦n Ra¨²l Jim¨¦nez pudo convertir el 1-0 en los primeros minutos. Pero una vez que la albiceleste tom¨® el control, el arco argentino le qued¨® a M¨¦xico tan lejano como si el partido se jugara en el Azteca. En el segundo tiempo, el Tri ya no prob¨® al arquero del Am¨¦rica. El ¨²nico momento de tensi¨®n fue cuando el t¨¦cnico interino de M¨¦xico, Ricardo Ferretti, se enoj¨® porque no le dejaron hacer un s¨¦ptimo cambio a su equipo cuando se lesion¨® N¨¦stor Araujo y ya hab¨ªa realizado las seis modificaciones reglamentarias. En ese momento lleg¨® el 2-0 final de Argentina.

Fue, tambi¨¦n, un partido entre dos selecciones con t¨¦cnicos provisorios despu¨¦s de las salidas de Juan Carlos Osorio y Jorge Sampaoli, aunque sea dif¨ªcil encontrar otros puntos en com¨²n entre Ferretti y Lionel Scaloni. Mientras El Tuca, que sigue siendo el entrenador de Tigres, ya suma m¨¢s de 1.000 partidos en su trayectoria, el argentino todav¨ªa no dirigi¨® ning¨²n partido por competencia oficial. En verdad, Scaloni ocupa el puesto con la ubicuidad como buen aliado: su primera participaci¨®n en un cuerpo t¨¦cnico fue junto a Sampaoli en el Sevilla, en la temporada 2016-2017, para cumplir el rol de nexo entre los jugadores y el entrenador. Luego acompa?¨® a Sampaoli a la selecci¨®n pero, tras la renuncia del entrenador, Scaloni sigui¨® en la AFA y acept¨® reemplazarlo tras Rusia 2018, por ahora de manera transitoria. Pero si en M¨¦xico parece inminente la llegada de Gerardo Martino, la buena estrella de Scaloni podr¨ªa continuar: ante los sucesivos rechazos de Diego Simeone, Mauricio Pochettino y Marcelo Gallardo, la AFA dej¨® trascender que tambi¨¦n dirigir¨ªa la Copa Am¨¦rica de Brasil 2019.

La doble jornada amistosa entre Argentina y M¨¦xico cerrar¨¢ este martes en Mendoza, 1.000 kil¨®metros al oeste de Buenos Aires, seguramente con otros apellidos, el recambio del recambio. Es el nuevo escenario al que deber¨¢n acostumbrarse las selecciones americanas para las fechas FIFA desde el comienzo de la Copa de Naciones de la UEFA, en septiembre pasado. Y adem¨¢s, en Argentina todo huele a River-Boca.