Chad Le Clos: ¡°La nataci¨®n es muy dura, merecemos ganar mucho m¨¢s¡±
Distinguido como nadador del a?o por la FINA, el sudafricano, oro ol¨ªmpico en Londres, es parte de una revuelta de figuras de la nataci¨®n contra la federaci¨®n internacional
La incipiente rebeli¨®n de parte de las primeras figuras de la nataci¨®n mundial contra la federaci¨®n internacional (FINA) eligi¨® un escenario futbol¨ªstico, Stamford Bridge, para sus primeros encuentros, el martes y el mi¨¦rcoles. En un hotel del estadio del Chelsea, se juntaron a puerta cerrada una treintena de nadadores cuajados de medallas ol¨ªmpicas y mundiales. Entre ellos, Katinka Hossz¨², Michael Andrew y Tom Shields, que el 7 de diciembre presentaron en California una demanda colectiva contra la FINA.
La revuelta la atiza el bloqueo de la federaci¨®n de las intenciones de la International Swimming League (ISL), una liga privada por equipos promovida por el millonario ucranio Konstantin Grigorishin, que promete repartir con los nadadores el 50% de sus ingresos, frente al tradicional 10% de la FINA. Esta semana estaba previsto un evento de prueba en Tur¨ªn, que se cancel¨® despu¨¦s de que la federaci¨®n amenazara a los nadadores dejarlos sin Mundiales y sin Juegos si participaban. Entre los rebeldes, cuya demanda financia Grigorishin, tambi¨¦n est¨¢ Chad Le Clos (Durban, Sud¨¢frica, 1992), nadador del a?o 2018 de la FINA, miembro del club de nataci¨®n del ucranio y memorable oro ol¨ªmpico de 200 mariposa en Londres 2012, donde fren¨® en la ¨²ltima brazada el largo dominio de Michael Phelps en la prueba.
Pregunta. ?Qu¨¦ le convenci¨® para unirse a esta batalla?
Respuesta. Los ¨²ltimos dos a?os he hablado mucho con Konstantin. Cuando me un¨ª a su club [Energy Standard], me habl¨® de c¨®mo cre¨ªa que deb¨ªa ser la nataci¨®n. Entonces te das cuenta de que te est¨¢n tratando injustamente. La nataci¨®n no est¨¢ en el siglo XXI. Aunque la gente debe entender que no estamos intentando destruir la FINA. Todav¨ªa necesitamos los Mundiales y los Juegos Ol¨ªmpicos. Solo estamos haciendo un nuevo formato. Creo que podemos hacerlo bien, para ganar un dinero decente y conseguir la proyecci¨®n que merecemos. Yo soy muy afortunado, porque derrot¨¦ a Michael Phelps, pero hablo en nombre de los otros nadadores que est¨¢n llamando ahora a la puerta, no solo por m¨ª. Hay tipos que son finalistas ol¨ªmpicos y que nadan en la Copa del Mundo para poder cubrir los gastos. Y eso est¨¢ mal.
P. ?Su esfuerzo no est¨¢ recompensado?
R. Eso es seguro. Los nadadores son los deportistas que m¨¢s duro trabajan. Hay muy pocos deportes como la gimnasia y la nataci¨®n. No quiero faltar al respeto a los otros, porque todos los de alto nivel son muy duros, pero nosotros entrenamos todo el a?o. La nataci¨®n no es un deporte natural. Por ejemplo, comparado con correr. Caminas unos cinco kil¨®metros al d¨ªa. Siempre mantienes el movimiento natural de correr. Pero cuando dejas de nadar diez d¨ªas, vuelves y dices ¡°?qu¨¦ est¨¢ pasando aqu¨ª?¡±. La nataci¨®n es muy dura. Definitivamente, merecemos ganar mucho m¨¢s.
"Vengo de un lugar donde la cosa no va de talento, ni de t¨¦cnica, sino de dureza mental"
P. Aparte del aspecto econ¨®mico, ?supone tambi¨¦n cambios en c¨®mo afrontan la competici¨®n?
R. No nos preocuparemos mucho de las marcas. Ser¨¢ todo por las carreras. Si ganas un oro ol¨ªmpico con una marca de un minuto o de 55 segundos, da igual. A no ser que batas el r¨¦cord del mundo, nadie se va a acordar de ese tiempo. Nadie va a recordar qu¨¦ tiempo hice en Londres [oro en 200 mariposa]. Mi marca en Londres fue m¨¢s r¨¢pida que el tiempo de Phelps en R¨ªo [oro en 200 mariposa]. Pero a nadie le importa. A la gente no le importan las marcas; le importan las carreras y los momentos.
P. La FINA amenaz¨® con dejar sin Juegos a quien compitiera en una prueba impulsada por la ISL. ?Qu¨¦ significar¨ªa?
R. No podemos sacrificar los Juegos. Eso lo hemos dejado claro. Si van a sancionar con suspensiones, tendremos que decidir como un equipo. No podemos dejar los Juegos. Pero esto tiene que ver tambi¨¦n con el legado. Dentro de un par de a?os, se me recordar¨¢ como uno de los m¨¢s grandes. El dinero es importante, por supuesto, pero no me met¨ª en esto por el dinero. Si fuera por el dinero, habr¨ªa estudiado y me habr¨ªa dedicado al petr¨®leo o algo as¨ª.
P. ?Le preocupa lo que va a dejar?
R. Eso es todo lo que quiero. Quiero ser recordado. La ISL podr¨ªa ser un buen legado. Reunir a los mejores nadadores para que compitan cada dos o tres semanas. Todo el a?o, no como ahora. Cuando ganas la Premier League, eres el mejor. Creo que es mejor ganar la Premier que la Champions, es mucho m¨¢s dif¨ªcil.
"Cuando ten¨ªa 11 a?os le dije a mis amigos: un d¨ªa voy a ganar a Phelps"
P. ?Suele pensar en aquella final ol¨ªmpica de 200 mariposa que le gan¨® a Phelps en Londres?
R. Pienso en ella a menudo. Si soy honesto, despu¨¦s de R¨ªo me era dif¨ªcil ver esa carrera de Londres y estar contento. Me doli¨® mucho la manera en que perd¨ª [en R¨ªo termin¨® cuarto; gan¨® Phelps], se llev¨® mucho del brillo del oro que gan¨¦ en Londres. Estaba muy decepcionado. Miro atr¨¢s y digo ¡°mierda¡±. Me gustar¨ªa poder volver atr¨¢s. Creo que la carrera de R¨ªo, de diez veces, la ganar¨ªa nueve. As¨ª que estoy hambriento por ganar en Tokio [2020]. Pero Londres fue¡ Ahora veo la carrera y se me saltan las l¨¢grimas.
P. ?Qu¨¦ pas¨® en R¨ªo?
R. No se lo dir¨¦. Se lo dir¨¦ despu¨¦s de ganar. No quiero excusas. No fue psicol¨®gico, no fue emocional. Pero aquel d¨ªa no nad¨¦ a mi mejor nivel.
P. Una oportunidad que se fue.
R. Nunca voy a volver a tenerla. Le di a Phelps la oportunidad¡ No es que yo le diera la oportunidad, pero tuvo la oportunidad de redimirse [de la derrota de Londres]¡ Por eso los mundiales del a?o pasado fueron importantes para m¨ª. Era importante nadar en un tiempo m¨¢s r¨¢pido que el que hab¨ªa hecho ¨¦l. Solo para m¨ª. No me importaba nada m¨¢s. En Tokio, gane oro, plata, bronce o sea cuarto, estar¨¦ muy orgulloso, porque no voy a dejar una sola piedra sin remover.
P. Antes de Londres, a Phelps se lo ten¨ªa por invencible. ?C¨®mo se prepara uno para competir contra alguien as¨ª?
R. Yo sab¨ªa que pod¨ªa. Absolutamente. S¨¦ c¨®mo correr contra los grandes. Vengo de un lugar donde la cosa no va de talento, ni de t¨¦cnica, sino de dureza mental. Respeto mucho a Phelps, pero de alg¨²n modo ten¨ªa una obsesi¨®n insana con Phelps; porque era un h¨¦roe para m¨ª, pero ten¨ªa una obsesi¨®n con derrotarlo. Si yo nadara braza, por ejemplo, ir¨ªa directamente a por la cabeza de Adam Peaty, y eso que es mi amigo. As¨ª es como soy. Cuando te plantas cara a cara con alguien, es un juego diferente. Sabe que vas a por su cabeza. En el fondo de su coraz¨®n, lo sabe. As¨ª que Phelps lo sab¨ªa. Cuando corres, puedes sentir al otro. Y yo puedo sentir que Phelps es un guerrero. Eh, seamos justos: pese a lo que me pas¨® a m¨ª, que no fue mi mejor d¨ªa [la final de R¨ªo], ¨¦l volvi¨® y gan¨®. Es un guerrero. Cuando compites contra los grandes, como Phelps y Lochte, tienes que cre¨¦rtelo de verdad.
P. ?Siempre ha sido as¨ª?
R. Mucho antes de conocer a Phelps, antes de verlo cara a cara, sab¨ªa que le iba a derrotar. Lo sab¨ªa. Cuando ten¨ªa 11 a?os, le dije a mis amigos, lo recuerdo, voy a ganarle un d¨ªa, voy a ganar los Juegos Ol¨ªmpicos. Lo dije y realmente lo cre¨ªa. Igual que no tengo dudas de que voy a ganar en Tokio. No quiero decir que vaya a ganar, ?entiende? A lo mejor no gano, pero siento que voy a ganar.
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