El Sevilla acaricia los cuartos de final ante el Athletic

La trilog¨ªa vasco-sevillana que ha deparado el destino, y que obliga a los andaluces a hacer uno de esos viajes de anta?o, de m¨¢s de tres d¨ªas, que recuerdan los nost¨¢lgicos del f¨²tbol (y algunos periodistas viajeros), deja claro que en la Copa es el Sevilla el que tiene todo a su favor.

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Claro que a Gaizka Garitano, y a los m¨¢s de 30.000 aficionados rojiblancos que acudieron a San Mam¨¦s y asumieron con flema el resultado, les importa m¨¢s LaLiga, y no ser¨ªa extra?o que, asumiendo la l¨®gica caparrosiana, y como sucedi¨® en sus tiempos de entrenador del Athletic, en aquella semifinal copera de 2009, que todav¨ªa se recuerda en Bilbao, todo lo que ocurri¨® en la fr¨ªa tarde copera no fuera sino una a?agaza, un trampantojo.

Entonces, el partido que el Athletic tir¨® al cubo de la basura fue el liguero. Crecido en su euforia, el presidente sevillista, Del Nido, asegur¨® que en la Copa, su equipo se iba a comer al le¨®n de la melena hasta el rabo. Y lo que le cantaron despu¨¦s, irreproducible aqu¨ª, hac¨ªa menci¨®n a ese ap¨¦ndice.

Con los dos equipos plagados de suplentes, el Sevilla demostr¨® tener m¨¢s fondo de armario, Garitano sac¨® del ba¨²l a jugadores como Iturraspe, que no jugaba 90 minutos desde tiempo inmemorial, recuper¨® a Unai Sim¨®n para la porter¨ªa y aline¨® de salida al joven Guruzeta. Mach¨ªn tambi¨¦n dej¨® en el banco a Jes¨²s Navas, Banega o Ben Yedder, y les dio pista a Soriano, Nolito y alg¨²n otro jugador que no cuenta habitualmente. El delantero gaditano cumpli¨® con lo que le pidieron, y para los seis minutos ya hab¨ªa marcado dos goles: el primero, anulado por falta al portero y el segundo, ya sin traba alguna para subir al marcador. La relajaci¨®n de los centrales del Athletic pon¨ªa por delante al Sevilla.

Luego apareci¨® el VAR, que sigue siendo pasto de la pol¨¦mica. Cuando para evaluar una jugada hace falta que se re¨²na un sanedr¨ªn de sabios y despu¨¦s la tengan que explicar una decena de expertos, con argumentos que entiende apenas el com¨²n de los mortales, es que el invento todav¨ªa no funciona del todo. Que s¨ª, que seguramente aciertan, pero en un juego que parec¨ªa tan sencillo de entender como el f¨²tbol, eso no quiere decir que tengan raz¨®n.

El gol que Del Cerro Grande anul¨® a Aduriz por fuera de juego es un ejemplo. Hasta Mach¨ªn coment¨® despu¨¦s del partido que la decisi¨®n hab¨ªa paliado el error que su equipo cometi¨® en defensa.

Lesi¨®n de Aduriz

Adem¨¢s, el delantero del Athletic se lesion¨® en esa jugada y su equipo se qued¨® sin referencia en punta. A¨²n as¨ª, San Jos¨¦ consigui¨® empatar en un c¨®rner al comienzo de la segunda mitad, en un instante de lucidez de los rojiblancos, que se empe?aron entonces en conseguir el segundo y darle la vuelta a la eliminatoria. Fue el ¨²nico momento del partido en el que la grada pens¨® que el Athletic pod¨ªa dar un vuelco a la situaci¨®n.

Pero dur¨® muy poco. No hubo lugar al cambio de tendencia porque los rojiblancos volvieron a evidenciar la dejadez en defensa que les hab¨ªa condenado en la primera mitad. Se despistaron lo suficiente como para permitir que Andr¨¦ Silva y Ben Yedder ¡ªque sali¨® en la segunda mitad¡ª se sintieran a gusto con espacios abiertos y pusieran un marcador imposible para el Athletic, que parece dar por amortizada la eliminatoria.

San Mam¨¦s, que hab¨ªa comenzado fr¨ªo, se qued¨® helado con los goles del Sevilla, que tiene pie y medio en los cuartos de final. El domingo, el segundo acto, pero en LaLiga. Posiblemente, en el equipo estar¨¢ el atacante Ibai G¨®mez, que tras el choque copero salt¨® al c¨¦sped de San Mam¨¦s para entrenarse por primera vez, tras su regreso del Alav¨¦s, con la camiseta rojiblanca del Athletic.