Hipnosis para tirarse a 142 km/h
Ander Mirambell, ol¨ªmpico en skeleton, recurre a un mentalista para bloquear el miedo y potenciar el subconsciente durante los descensos sobre el hielo: ¡°Para m¨ª es un plus, ahora piloto mejor que nunca¡±
Inquieto por naturaleza, el ol¨ªmpico Ander Mirambell (Barcelona, 1983) ansiaba desde hace tiempo una vuelta de tuerca a su preparaci¨®n en skeleton para afinar los descensos a todo trapo sobre esas largas lenguas de hielo, en los que su trineo alcanza los 142 km/h y su cuerpo se somete a fuerzas 5G. ¡°Todo nace cuando mi hermano dej¨® de fumar gracias a la hipnosis¡±, introduce el deportista, de alma curiosa y mente abierta, dispuesto siempre a experimentar novedades para mejorar; ¡°hab¨ªa probado con la meditaci¨®n y algunas t¨¦cnicas de relajaci¨®n, pero di otro paso m¨¢s. A ¨¦l le funcion¨® y, aparte, descubr¨ª que hab¨ªa gente que utilizaba la hipnosis para trabajar el instinto o para ir al dentista, por la alergia a la anestesia. Luego le¨ª un art¨ªculo de un velocista de 100m que cuando escuchaba el disparo de salida se imaginaba que le persegu¨ªan los leones¡¡±.
Y despu¨¦s lleg¨® la conexi¨®n, el salto definitivo.
¡°Vino a verme a un espect¨¢culo y m¨¢s tarde coincidimos en el casting de un programa de la tele, Pura Magia (RTVE). Comenzamos a hablar y a partir de ah¨ª pensamos que ser¨ªa interesante probar¡±, observa Luis Pardo, el mentalista barcelon¨¦s (44) que desde hace 15 a?os practica la hipnosis y desde hace poco m¨¢s de uno conect¨® con Mirambell, entusiasmado con el resultado. ¡°Ahora piloto mejor que nunca¡±, dice el catal¨¢n, lastrado por una lesi¨®n de espalda que le iba comiendo el ¨¢nimo, hasta que decidi¨® explorar el nuevo camino. ¡°Consiste en entrar en un sue?o relativamente profundo¡±, explica, ¡°donde t¨² eres consciente de lo que hay a tu alrededor y todo parece muy real. Es similar a cuando te quedas dormido en el sof¨¢, pero sigues oyendo la tele¡±, precisa.
¡°Se trata de trabajar el instinto, la capacidad de decisi¨®n y de abordar el tema del dolor¡±, prolonga Mirambell, que previamente ya hab¨ªa ejercitado la mente con un psic¨®logo del Centro de Alto Rendimiento (CAR) de Sant Cugat. En un deporte en el que cada maniobra se hace al l¨ªmite, cada detalle vale un mundo. ¡°Hay una gran parte de visualizaci¨®n¡±, detalla; ¡°hay curvas a las que antes les ten¨ªa m¨¢s respeto y ahora se me hacen m¨¢s naturales. Es como si ya hubiera pasado por all¨ª. Me aporta un punto extra de seguridad, porque en el skeleton debemos decidir en cent¨¦simas de segundo¡¡±.
¡°Ander apenas tiene tiempo para pensar¡±, constata Pardo. ¡°As¨ª que trabajamos para que sea el subconsciente el que tome las decisiones. Son horas y horas de hablar, para moldear el subconsciente. Tratamos tambi¨¦n de bloquear algunos miedos para que, por ejemplo, si en una curva va muy r¨¢pido y muy recto, sepa cu¨¢l es el l¨ªmite al que puede llegar y no sea el miedo el que le frene. Est¨¢ demostrado cient¨ªficamente que el subconsciente reacciona de cuatro a siete segundos antes de que nosotros sepamos qu¨¦ vamos a hacer cuando decidimos¡±, matiza el mentalista, recientemente consultado por un futbolista de Primera Divisi¨®n.
Beckham, Woods, Connors o Ali
En su d¨ªa, el futbolista David Beckham recurri¨® a la hipnosis, al igual que otras figuras deportivas como el tenista Jimmy Connors, el golfista Tiger Woods ¨Cen su adolescencia, seg¨²n la revista Time¨C o el boxeador Muhammad Ali, que contrat¨® al hipn¨®logo Justin Tranz. ¡°Pero hay una diferencia importante¡±, incide Pardo; ¡°porque la mayor¨ªa de ellos lo hicieron para resolver cuestiones del ¨¢mbito personal que les afectaban a la hora de competir. Muy pocos deportistas lo han hecho para directamente entrenar el cerebro¡±.
Uno de los ejercicios pr¨¢cticos que ha llevado a cabo consist¨ªa en que, una vez adentrado en el estado de hipnosis, el deportista deb¨ªa acertar a qu¨¦ pierna apuntaba la mano de Pardo, situada a un palmo. Cuando escuchaba el ¡°?ya!¡± de su tutor, Mirambell deb¨ªa levantar la pierna correcta de inmediato. ¡°Hice cinco de cinco. La sesi¨®n est¨¢ grabada en v¨ªdeo, e impresiona¡±, cuenta. ¡°Es algo intuitivo¡±, concreta el especialista, que a?ade: ¡°Acierta porque en esa circunstancia no se detiene a pensar, es autom¨¢tico. El subconsciente trabaja por nosotros. Al fin y al cabo es el que nos hace respirar o el que nos rasquemos si nos pica algo, sin necesidad de pensarlo¡±.
Escepticismo y actitud proactiva
En Espa?a, de momento, la hipnosis es un terreno desconocido y cuestionado por algunos cient¨ªficos. ¡°Yo no me dejo el dinero porque s¨ª y s¨¦ que hay muchos que tratan de aprovecharse de la historia, pero para m¨ª es un plus, y a estas alturas todo cuenta. Yo no puedo demostrar que sea efectivo, pero a m¨ª me funciona. Hace poco me pregunt¨® por el tema un club de Primera para propon¨¦rselo a alg¨²n jugador, por las lesiones y el dolor¡ Cuento esto porque creo que es una herramienta que puede ayudar a mucha gente. Quiz¨¢ haya miedo al qu¨¦ dir¨¢n o quiz¨¢ sea simple desconocimiento, pero ayuda. Ahora bien, la hipnosis te hace el clic, pero t¨² debes tener una actitud proactiva¡±, cierra Mirambell.
¡°En otros pa¨ªses se utiliza como terapia desde hace a?os. ?Por qu¨¦ aqu¨ª no? Algunos creen que es una patra?a o una farsa porque lo asocian a lo que se hac¨ªa en la tele de los noventa, que era ridiculizar a las personas haci¨¦ndolas caminar como un pollo. Otros creen que al estar hipnotizados pueden perder el control. Aqu¨ª hay muy poca cultura sobre esto¡±, remata Pardo.
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