Las apariencias enga?an con Valverde
A partir de la sencillez y el sentido com¨²n, el t¨¦cnico se ha ganado la estima y la credibilidad futbol¨ªstica del Bar?a
A simple vista, Ernesto Valverde no parece el entrenador del Bar?a, a veces ni siquiera parece un entrenador de f¨²tbol y, sin embargo, es uno de los mejores entrenadores de la Liga, l¨ªder de momento durante 66 jornadas si se cuentan las dos temporadas que lleva en el Camp Nou. No se recuerdan unos registros parecidos desde los a?os sesenta, tiempos del Madrid de los yey¨¦s de Miguel Mu?oz. Tampoco parece un entrenador muy institucional para una instituci¨®n tan singular como el Bar?a y, sin embargo, tiene un sentido de club ¨²nico, manifiesto en el vestuario, el campo y en la sala de prensa, siempre cercano a sus futbolistas y al tiempo alejado del palco, nada protocolario, ni siquiera en el Camp Nou.
Incluso cuando pasea, a veces se camufla con una gorra y unas gafas, no por disimular, sino porque se siente ciudadano y agradece ser an¨®nimo en Barcelona. No concede entrevistas en calidad de t¨¦cnico de f¨²tbol, sino como aficionado a la lectura o a la fotograf¨ªa y hasta su apodo de Txingurri ¡ªhormiga¡ª responde m¨¢s al de un personaje de c¨®mic que de un t¨¦cnico. Y, sin embargo, su t¨¢ctica en el Villamar¨ªn, el d¨ªa en que el Betis le gan¨® la posesi¨®n y se hablaba del cruyffismo de Seti¨¦n, le vali¨® ser elogiado por Messi.
El 10 est¨¢ a gusto con Valverde, tanto que ya no solamente es el mejor jugador del mundo sino que desde el pasado verano ejerce de capit¨¢n y de l¨ªder despu¨¦s de la salida de Puyol, Xavi e Iniesta. Hay quien advierte en la manera de ser de Valverde un paralelismo con el que tuvo Rijkaard con Ronaldinho. Los futbolistas parecen encantados con el t¨¦cnico. No ¨²nicamente por el trato y gesti¨®n de los egos, sino por sus conocimientos, capacidad de lectura de los partidos y flexibilidad t¨¢ctica. Y por compartir y discutir su punto de mira a pie de campo, como se advierte con Piqu¨¦.
De una salida casi anunciada a la renovaci¨®n
Aparentemente, Valverdeten¨ªa decidido no renovar, se dec¨ªa que el actual ser¨ªa su ¨²ltimo a?o en el Bar?a, despu¨¦s del desgaste sufrido desde la partida de Neymar, y sin embargo continuar¨¢ una tercera temporada, la que viene con De Jong y qui¨¦n sabe si De Ligt. Hab¨ªa m¨¢s dudas por su parte que por la de los jugadores, defensores del entrenador ante una directiva que le cuestion¨® por la derrota de Roma, previa a la final de Copa ganada al Sevilla. Aquel 3-0 en la Champions ha sido el ¨²nico momento cr¨ªtico para Valverde, que asumi¨® el gatillazo sin se?alar a un solo jugador en un partido en el que algunas figuras dimitieron por su precariedad f¨ªsica en el Ol¨ªmpico. La ca¨ªda de Roma ha sido superada ahora con la clasificaci¨®n para las semifinales que le enfrentar¨¢n a un Liverpool ya con Valverde renovado por el Bar?a.
Valverde habla como un futbolista en la cancha y manda en el vestuario del Camp Nou. Aseguran en la Ciudad Deportiva que ha cuadrado a los jugadores m¨¢s de un partido, sin c¨¢maras de por medio, como le gusta a la plantilla, igualmente recelosa de la prensa de Barcelona o de Madrid.
El Txingurri entiende que quienes construyen el perfil del ¨¦xito a partir de la victoria son los mismos que escribir¨¢n el retrato del fracaso desde la derrota, raz¨®n de m¨¢s para ¡°relativizar¡± las cosas, y m¨¢s en el deporte, sobre todo en el f¨²tbol, y ya no digamos en el Bar?a. No presume ni dogmatiza, Valverde relativiza hasta lo relativo y se remite siempre al resultado, hoy a la altura de los mejores t¨¦cnicos del Barcelona.
Valverde ha ganado dos ligas seguidas nada m¨¢s llegar, igual que Enrique Fern¨¢ndez, Helenio Herrera, Louis Van Gaal, Guardiola y Luis Enrique, y sin embargo nunca se dar¨¢ un ataque de importancia, ni ser¨¢ grandilocuente. Tampoco se pondr¨¢ trascendente ni pontificar¨¢ sobre el estilo del Bar?a. Y a buen seguro que el d¨ªa que no sea entrenador azulgrana no le importar¨ªa preparar como quien dice al Extremadura.
Aparentemente ten¨ªa decidido no renovar, y sin embargo continuar¨¢ al menos una tercera temporada, la que viene con De Jong. Aunque entiende que los contratos dan estabilidad, Valverde sostiene, siempre pragm¨¢tico, que los entrenadores dependen del marcador, tambi¨¦n en el Bar?a.
La estad¨ªstica asegura que su equipo consigue el 80% de los puntos y solo perdi¨® tres partidos en dos Ligas: Levante, Legan¨¦s y Betis. Amante de los picos de juego a partir de la solidez, Valverde administra mejor que el a?o pasado los esfuerzos de sus jugadores y tiene una plantilla m¨¢s rica y rejuvenecida porque no pierde a ning¨²n futbolista, sino que tiene momentos para cada uno, se llame Malcom, Coutinho, Vidal o Umtiti. Hasta Messi es feliz a pesar de que juega menos minutos que nunca en el Bar?a.
La naturalidad, la discreci¨®n y el sentido com¨²n no est¨¢n re?idos con el inconformismo, de manera que quiere ganar m¨¢s que agradar y no se preocupa cuando le acusan de que el Bar?a no brilla ni entusiasma ni cuida la Masia.
La tendencia es hablar de Messi m¨¢s que de Valverde, y sin embargo, Messi se remite a Valverde. Las apariencias enga?an, y m¨¢s en el caso del t¨¦cnico, que a los 55 a?os aspira a un triplete despu¨¦s del doblete alcanzado nada m¨¢s llegar al Camp Nou.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.