El Bar?a asfixia al Efes y fuerza una final en Estambul

El Barcelona se transform¨® en dos d¨ªas. Pas¨® de ser un equipo terriblemente vulnerable y expuesto al vendaval del Efes, a convertirse en una roca contra la que se estrell¨® el equipo turco. Y eso es lo que le hace merecedor de una final particular, la de esta convulsa serie en la que ha sido tan capaz de estamparse el mi¨¦rcoles por 34 puntos en el Palau como de ganar por 10 puntos dos d¨ªas despu¨¦s en el mismo escenario. El billete para la cita de los cuatro mejores del continente, en Vitoria, se dirimir¨¢ el mi¨¦rcoles en Estambul.

Los vuelcos en el guion de la serie han sido asombrosos. El m¨¦rito del Barcelona es que ha sabido reaccionar a la perfecci¨®n tras cada una de las victorias del Efes. El equipo de Ataman ha dado la sensaci¨®n de ser m¨¢s poderoso sobre el papel y, muchas veces, sobre la cancha tambi¨¦n, con una colecci¨®n de jugadores de primera l¨ªnea. Pero eso no ha querido decir que haya sido el m¨¢s eficaz. Fue un rodillo en el primer partido y sobre todo en el tercero. De ah¨ª que tenga m¨¢s m¨¦rito la r¨¦plica del Barcelona de Pesic que, si por algo se caracteriza, es por aferrarse siempre a su suerte. Puede recibir 102 puntos, perder por 34 y quedar hecho unos zorros, como le sucedi¨® el mi¨¦rcoles. Y puede empezar mal, como le pas¨® de nuevo esta vez cuando perd¨ªa por 10 puntos (12-22) y parec¨ªa que volv¨ªa a las andadas.

Pero incluso entonces se adivinaba que era un equipo transformado, radicalmente convencido de su misi¨®n esencial: defender a base de bien, frenar a Larkin, incomodar a Micic, no dejar respirar a Beaubois ni a Moerman. Lo consigui¨®. Le cost¨® porque sufri¨® para ajustar tanto en defensa y a la vez alimentar su ataque. Hasta el tercer cuarto. La chispa la encendi¨® un triple de Kuric que dio por primera vez tres puntos de ventaja a los suyos (41-38). El aceler¨®n fue tremendo, el parcial de ese periodo, 27-12, propulsado con seis triples del Barcelona. Y el ¨²ltimo, el de Heurtel, aderezado con un tiro libre adicional, el primer tiro libre que lanzaba el Barcelona en todo el partido, tal vez escarmentado por el atroz 8 de 21 con el que concluy¨® el tercer partido. Lo m¨¢s dif¨ªcil de la misi¨®n parec¨ªa hecho para el Barcelona con un estir¨®n que lleg¨® a situarle con 15 puntos de ventaja: 63-48. Mantuvo la velocidad de crucero y cerr¨® su triunfo sin mayores angustias.

M¨¢s informaci¨®n

3er partido: Jaque mate al Bar?a

2? partido: Hanga rescata al Bar?a en Estambul

1er partido: Micic frustra el regreso del Bar?a a los cuartos

Kuric, Singleton, Claver, S¨¦raphin, Tomic... Muchos de estos jugadores se rehabilitaron despu¨¦s de la zurra del tercer partido. Una de las claves fue la asfixiante defensa del Barcelona que desactiv¨® a varios de los baluartes del equipo turco, sobre todo a Micic y Moerman. Esa defensa del Barcelona, sobre todo dentro de la zona, redujo el astron¨®mico 74% de efectividad en tiros de campo del Efes en el partido del mi¨¦rcoles a un 40%.

La presi¨®n sobre la salida de bal¨®n era inmediata por parte de ambos equipos. La voluntad de encasquillar el juego del rival era compartida. La del Barcelona se predijo desde que se supo que Pesic apostaba por introducir dos cambios en el quinteto inicial, con Pangos y Pau Ribas en lugar de Heurtel y Blazic. El base canadiense evidenci¨® las consignas recibidas lanz¨¢ndose al suelo para reba?ar un bal¨®n en poder de Micic en la primera jugada. En el otro lado de la cancha, Simon le daba un mandoble a Tomic tras un rebote defensivo del p¨ªvot azulgrana. El partido iba a ser extraordinariamente f¨ªsico, con poco tiempo para pensar y poco espacio para moverse. Pero el Efes empez¨® a estirar de la cuerda con un dato demoledor: cinco triples de cinco jugadores diferentes en siete intentos. Eso, en los nueve primeros minutos: 12-19. Pero todo eso sucedi¨® antes de que el Bar?a apretara las clavijas y empezara a carburar en ataque. El Efes se desfigur¨® y el Barcelona gan¨® la confianza que hab¨ªa desaparecido dos d¨ªas antes. Habr¨¢ quinto partido, una final.