Un verano sin Mourinho

Ze no es completamente feliz. Este verano se enfrenta a un v¨¦rtigo desconocido para ¨¦l: por primera vez desde que es entrenador de ¨¦lite, no tiene equipo con el que empezar la temporada. Al menos, de momento. Ze es Jos¨¦ Mourinho, su apodo de ni?o, as¨ª se llama a s¨ª mismo cuando recuerda su infancia en Set¨²bal. Desde 2002, el t¨¦cnico portugu¨¦s, de 56 a?os, ha enlazado clubes de primer nivel en los que ha ido multiplicando su cach¨¦ y su imagen cautivadora y repudiada a partes iguales: Oporto, Chelsea, Inter, Real Madrid, otra vez Chelsea, Manchester United¡­ Sin embargo, sus dos ¨²ltimas experiencias insatisfactorias en Stamford Bridge y Old Trafford, especialmente en este ¨²ltimo, le han descabalgado hasta nueva orden de la primera l¨ªnea de los banquillos.

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¡°Mis amigos me dicen que disfrute de mi tiempo, de julio, de agosto, de lo que nunca he tenido. Sinceramente, no puedo disfrutar. No estoy lo suficientemente feliz para ello. Echo de menos mi f¨²tbol, tengo la chispa, un compromiso conmigo mismo. Ze est¨¢ lleno de fuego¡±, reconoc¨ªa en una entrevista en Sky Sports.

No ha habido muchos movimientos en los clubes grandes e hist¨®ricos de Europa a los que haya podido engancharse. Solo Chelsea, Inter, Juventus y Milan han cambiado al inquilino del banquillo, y ninguno de ellos ha reparado en ¨¦l. Descontando a los blues, donde ya ha estado en dos ¨¦pocas (all¨ª ha recalado Frank Lampard, buen alumno suyo), el Inter (con el que gan¨® el triplete antes de llegar al Madrid) eligi¨® a uno de sus ¨²ltimos enemigos en la Premier, Antonio Conte. La Juve repesc¨® para el Calcio a Maurizio Sarri, ex del Chelsea y N¨¢poles. Y el l¨¢nguido Milan, con mucho pasado y escaso presente, expulsado de la Europa League por incumplir el fair play financiero, opt¨® por Marco Giampaolo, procedente de la Sampdoria.

Quiz¨¢s de donde ha estado m¨¢s cerca dentro de esa c¨²spide es del Real Madrid. En medio de la horripilante pasada campa?a, su nombre se consider¨® como un posible relevo y ¨¦l tambi¨¦n se dej¨® querer. ¡°Fue una experiencia ¨²nica y diferente. Comet¨ª errores y he mejorado mucho desde entonces como entrenador y persona. No he tenido problemas en regresar al Chelsea y no tendr¨¦ en hacerlo a los clubes donde he estado¡±, dijo despu¨¦s de la semana tr¨¢gica blanca de principios de marzo, a unos d¨ªas de la destituci¨®n de Santiago Solari. Finalmente, la m¨ªstica y el consenso absoluto en torno a Zidane, con una parte de la grada que ya se hac¨ªa notar, inclinaron la decisi¨®n de Florentino P¨¦rez.

Pujante y dominador en la primera parte de su trayectoria, con dos Champions en el Oporto e Inter, su imagen ha palidecido en su segunda etapa en Inglaterra. En las ¨²ltimas seis temporadas gast¨® en fichajes 820,5 millones, seg¨²n la web Transfermakt (la mitad que en toda su carrera), aunque con escasos resultados en el campo: una Premier, dos Copas de la Liga, una Europa League y una Supercopa. Enchufado a la m¨¢quina de los ingresos televisivos, desembols¨® 105 millones por Pogba, 84,7 por Lukaku, 59 por Fred o por 38 por Diego Costa. Solo en sus tres cursos en el United invirti¨® 466 millones. Sin embargo, su reflejo sobre el c¨¦sped result¨® demasiado pobre, lastrado por un f¨²tbol poco vistoso. Del Chelsea fue despedido en diciembre de 2015 cuando iba 16? en la Liga y los red devils prescindieron de ¨¦l con el equipo sexto y un vestuario con excesivos fuegos.

Pese a la falta de un equipo ¡°top¡±, por primera vez este verano la posibilidad de entrar en el mundo de las selecciones la descarta de plano. ¡°?Un partido al mes? Demasiado trabajo de oficina. Sin campo, ni partidos, esperar dos a?os para la Eurocopa y otros dos para un Mundial... Todav¨ªa no¡±, asegur¨® en Sky Sports. ¡°Ze tiene que ser Ze hasta el ¨²ltimo d¨ªa, pero no veo el ¨²ltimo d¨ªa porque mi pr¨®ximo movimiento ser¨¢ el comienzo¡±, concluy¨® Mou, sumergido en la melancol¨ªa del verano. Todav¨ªa queda can¨ªcula para tapar su vac¨ªo.