El Tottenham contrata a Mourinho como entrenador tras despedir a Pochettino
"En Jos¨¦ tenemos a uno de los entrenadores de mayor ¨¦xito en el f¨²tbol. Tiene mucha experiencia, puede inspirar a los equipos y es un gran t¨¦cnico", afirma en un comunicado el presidente del club londinense
Jos¨¦ Mourinho vuelve a entrenar despu¨¦s de 11 meses en el paro. Nunca desde que se hizo cargo del Benfica en septiembre de 2000 hab¨ªa transcurrido tanto tiempo alejado de los banquillos. Cuando Daniel Levy, el presidente del Tottenham, se reuni¨® con ¨¦l para ofrecerle el cargo que ocupaba Mauricio Pochettino, este lunes, no pudo resistirse. Su sue?o de volver a entrenar al Madrid, reconocido por personas de Gestifute, su agencia de representaci¨®n, se desvanec¨ªa ante la mejor¨ªa manifiesta del equipo que dirige Zidane. En la noche del martes al mi¨¦rcoles estamp¨® su firma. El acuerdo con el club del norte de Londres se hizo oficial en la madrugada.
Despedido por el Manchester United en diciembre de 2018, Mourinho atravesaba sus horas m¨¢s bajas en el plano personal y profesional. A sus 56 a?os era objeto de un debate recurrente entre los directores generales de los grandes clubes de Europa, cada vez m¨¢s convencidos de que su m¨¦todo, tan celebrado y triunfal en la primera d¨¦cada del siglo, se hab¨ªa quedado obsoleto. El hombre no pod¨ªa evitar sentir la amenaza de la p¨¦rdida de prestigio. Los principales clubes, esos que acumulan Champions en sus vitrinas, hab¨ªan dejado de llamarle. Las ofertas que le hicieron el Dortmund y el Olympique de Ly¨®n le confirmaban que se hab¨ªa convertido en un t¨¦cnico de equipos aspiracionales. Mourinho los rechaz¨® a la espera de mejores d¨ªas.
Trabajaba como comentarista en los plat¨®s brit¨¢nicos de Sky Sports sin ocultar su dolor. El pasado verano ofreci¨® dos entrevistas televisivas en las que llor¨® abiertamente al confesar que sufr¨ªa sin poder meterse en un vestuario a dar ¨®rdenes. ¡°?Lo echo de menos!¡±, dijo, entre trist¨ªsimos pucheros, mientras deambulaba por un parque solitario seguido de un reportero y una c¨¢mara. ¡°Extra?o el f¨²tbol, la adrenalina, el campo, mi trabajo¡ En este momento estoy estudiando alem¨¢n. No sab¨ªa este idioma. Hablo ingl¨¦s, espa?ol, portugu¨¦s, franc¨¦s e italiano. No excluyo nada. Ni siquiera Alemania¡±.
Convertido en un ¨ªdolo de masas, una figura pop m¨¢s que un entrenador, un fen¨®meno nuevo en la industria, entre 2008 y 2013 el portugu¨¦s pas¨® de la apoteosis del Inter al ba?o de multitudes en el Madrid y al calor del regreso a casa en el Chelsea. Su viaje de celebridad no tuvo soluci¨®n de continuidad. Por el camino conquist¨® 25 t¨ªtulos en total, incluyendo dos Champions y cuatro Ligas en cuatro pa¨ªses distintos, un r¨¦cord que sigue vigente. Cuando por fin hizo realidad su m¨¢xima aspiraci¨®n, que era dirigir al Manchester United, se puso de manifiesto que carec¨ªa de respuestas adecuadas al gran problema que se le presentaba. Nunca super¨® al Liverpool de Klopp ni al City de Guardiola. Acumular fichajes por valor de 500 millones de euros en tres a?os no le sirvi¨® de mucho ante un vestuario que acab¨® ignor¨¢ndole. Dos a?os sin clasificar al equipo para la Champions, exhibiendo un juego conservador y sombr¨ªo, fue el equivalente a un fracaso estrepitoso.
¡°He cambiado¡±, repet¨ªa en sus entrevistas en estos meses de desempleo. Mourinho se preocup¨® por recordar a su clientela que ¨¦l no viv¨ªa aferrado al pasado. Se modernizaba. Incluso cambiaba de ayudantes. Cuando el invierno ya empezaba a oscurecer el horizonte se le ilumin¨® el paisaje. La crisis del Tottenham, un club rico en el que tiene poco que perder, 14 clasificado en la Premier despu¨¦s de encadenar el peor arranque de curso en a?os, se le presenta como una oportunidad de restituci¨®n.
¡°Estoy entusiasmado por unirme a un club con una herencia tan importante y unos aficionados tan apasionados¡±, dijo Mourinho en la nota oficial emitida por el Tottenham en la ma?ana del mi¨¦rcoles. ¡°La calidad tanto en el equipo como en la academia me excitan. Trabajar con estos jugadores es lo que me ha atra¨ªdo¡±.
El presidente Daniel Levy, que antes llam¨® a Julian Nagelsmann y le respondi¨® que no, celebr¨® el acuerdo con alivio: ¡°En Jos¨¦ tenemos a uno de los entrenadores m¨¢s exitosos del f¨²tbol. Tiene un patrimonio de experiencia incre¨ªble, puede inspirar equipos y es un gran t¨¢ctico. Ha ganado t¨ªtulos en cada club que ha entrenado. Creemos que traer¨¢ energ¨ªa y fe al vestuario¡±.
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