Todo gira en torno a Simone Biles
El Mundial de gimnasia empieza con la estadounidense, que puede lograr su quinto t¨ªtulo, como estrella absoluta
Michael Phelps no estuvo en los Mundiales de nataci¨®n este verano, ni Usain Bolt est¨¢ en Doha estos d¨ªas, pero Simone Biles, la otra gran estrella de los Juegos Ol¨ªmpicos de R¨ªo, s¨ª est¨¢ en Stuttgart, en los Mundiales de gimnasia que empiezan este viernes y deciden buena parte de las plazas para Tokio 2020. Desde hace seis a?os la gimnasia mundial gira en torno al prodigio estadounidense, que no solo ha revolucionado su deporte sino que adem¨¢s ha conseguido disparar la expectaci¨®n de una cita que antes segu¨ªan solo los muy cafeteros. Miles de espectadores se acercaron a la sesi¨®n de entrenamiento oficial de las estadounidenses para ver volar de cerca a Biles, que promete nuevos r¨¦cords en la ciudad alemana: convertirse en la primera gimnasta en lograr cinco t¨ªtulos mundiales, superar las 23 medallas mundialistas de Vitaly Scherbo (suma 20) e inscribir en el C¨®digo de Puntuaci¨®n los dos nuevos elementos con los que asombr¨® al mundo este verano.
¡°Nunca pienso en cu¨¢ntas medallas de oro puedo conseguir¡±, afirm¨® Biles en la rueda de prensa, abarrotada, el pasado martes; ¡°sino en terminar todos mis ejercicios y hacerlos bien¡±. La declaraci¨®n, pol¨ªticamente correcta, tiene gracia porque, desde que debut¨® en unos Mundiales en 2013, lleva 14 oros, m¨¢s que ning¨²n otro gimnasta en la historia. Y no ha perdido ni un s¨®lo t¨ªtulo absoluto. Solo cedi¨® el de 2017 a su compatriota Morgan Hurd porque se tom¨® un a?o sab¨¢tico despu¨¦s del esfuerzo ol¨ªmpico.
El a?o pasado regres¨® a la alta competici¨®n y, a pesar de estar m¨¢s fallona de lo habitual, volvi¨® a proclamarse campeona del mundo en Doha. La Simone Biles de hoy es m¨¢s segura y sus ejercicios mucho m¨¢s complicados, tal vez porque la meta ol¨ªmpica est¨¢ cada vez m¨¢s cerca y ha asimilado ya a la perfecci¨®n el cambio de entrenador. Hoy, bajo la atenta mirada de los franceses Laurent y Cecile Landi, es una gimnasta renovada, madura y segura de s¨ª misma. A los 22 a?os, no tiene nada que demostrar pero debe encontrar la motivaci¨®n para seguir entren¨¢ndose y compitiendo en un deporte tremendamente exigente.
M¨¢s all¨¢ de la victoria de Biles, que todo el mundo da por descontada, est¨¢ su programa de ejercicios, el m¨¢s dif¨ªcil de la historia. En Stuttgart la campeona ol¨ªmpica tiene previsto realizar el triple-doble en suelo ¡ªdoble mortal agrupado con triple pirueta, tan dif¨ªcil que los jueces se han inventado una nueva categor¨ªa¡ª en todas las pruebas ¡ªpor equipos, individual y por aparatos¡ª y el doble-doble de salida de la barra de equilibrios, con el que ser¨¢ m¨¢s selectiva. Si cumple su promesa, ambas acrobacias llevar¨¢n su nombre en el pr¨®ximo C¨®digo (ya tiene un salto de potro y otra acrobacia en suelo registradas).
El brillo de Simone Biles lo eclipsa todo: que en Stuttgart est¨¢n en juego casi todas las plazas ol¨ªmpicas (nueve equipos completos, tanto en masculina como en femenina, y 20 billetes individuales para las mujeres y 12 para los hombres), con la tensi¨®n y adrenalina que genera esto en todos los equipos. Que Rumania no levanta cabeza. Que Rusia acude con un equipo que anhela a su nueva estrella, la a¨²n j¨²nior Vladislava Uzarova, que promete guerra en Tokio. Que Francia tiene una estrella, Melanie de Jesus dos Santos, y un equipo que aspiran a medalla. Que ha vuelto Giulia Steingruber. O que Oksana Chusovitina nunca se fue y, a los 44 a?os, una edad imposible, opta a una medalla en salto.
Por no hablar de la competici¨®n masculina que, a falta de Uchimura y con un Vernaiev en horas bajas, busca una nueva estrella. El ruso Dalaloyan, que defiende t¨ªtulo, aspira a ello. El Mundial empieza este viernes, pero el espect¨¢culo de Biles dar¨¢ comienzo el s¨¢bado.
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