Bartomeu es muy capaz de recuperar a Neymar

Hay personajes recurrentes, capaces de mantener su protagonismo en las condiciones m¨¢s extremas, incluso en tiempos de pandemias como la de la Covid-19, pocos como Neymar Junior. No hay pr¨¢cticamente d¨ªa de la temporada en que su figura no ocupe alguna de las portadas de los diarios deportivos catalanes para contar las posibilidades que se dan para que regrese al FC Barcelona despu¨¦s de su famosa huida por 222 millones al Paris Saint Germain.

La novedad es que al parecer el club franc¨¦s ha tasado al futbolista en unos 150 millones de euros ¨C180 de acuerdo con fuentes del club azulgrana¨C, un detalle trascendente pues hasta el momento la operaci¨®n era inviable porque en el contrato del brasile?o no exist¨ªa ninguna cl¨¢usula de rescisi¨®n y el PSG se negaba a negociar su traspaso al Bar?a. El equipo franc¨¦s estar¨ªa ahora dispuesto a prescindir de Neymar para retener a Mbapp¨¦.

Mbapp¨¦ siempre ha estado en la ¨®rbita del Real Madrid de la misma manera que Neymar permanece en la del Barcelona. Incluso se sabe por boca de Piqu¨¦ que los futbolistas azulgrana estaban dispuestos a costear con sus fichas una parte del importe por el regreso del brasile?o cuando el a?o pasado ya se plante¨® despu¨¦s de que el propio jugador aceptara negociar la rebaja de su sueldo de 36,7 millones a los 22 que percib¨ªa en el Camp Nou.

Y ya se sabe que en el Barcelona mandan los jugadores, o si se quiere, Bartomeu consens¨²a cualquier decisi¨®n con la plantilla, incluso la posibilidad de que ahora se bajen el sueldo por el coronavirus y puedan aliviar la delicada situaci¨®n de la econom¨ªa del Bar?a. Al presidente tambi¨¦n le parecer¨ªa bien que volviera Neymar. Y ya no digamos a Rosell, cuyo mandato qued¨® vinculado para bien y para mal al exjugador del Santos, 10 tambi¨¦n de Brasil.

Rosell, muy pendiente de las vicisitudes de su club y de las elecciones de 2021 ¨Cse ha planteado avalar a uno de los posibles candidatos: Jordi Roche, expresidente de la Federaci¨®n Catalana¨C siempre ha cre¨ªdo que los equipos se construyen a partir de los jugadores y no de los entrenadores o directores deportivos como intent¨® demostrar con el fichaje de Ronaldinho y las negociaciones que mantuvo para contratar tambi¨¦n a Cristiano Ronaldo.

No hay que olvidar tampoco que Rosell y Bartomeu quedaron exonerados del primer juicio abierto por la causa Neymar y a cambio se conden¨® al Bar?a. Y conviene tener igualmente presente que a¨²n quedan asuntos por resolver en los tribunales entre la entidad azulgrana y el brasile?o, como la prima de renovaci¨®n o el contrato con DIS. As¨ª que su vuelta podr¨ªa suponer la opci¨®n de recomenzar sin pleitos la historia abruptamente rota en 2017.

Festivo con los toiss y con su pap¨¢ en la caja de caudales, Neymar parec¨ªa un chico feliz en Barcelona hasta la remontada del 6-1 precisamente ante el PSG. Aunque el brasile?o fue la figura de aquel partido, el protagonista result¨® ser Messi por su brindis con la hinchada del Gol Norte del Camp Nou. La fotograf¨ªa del rosarino sustituy¨® al p¨®ster del tridente que conquist¨® el triplete en Berl¨ªn y posibilit¨® el triunfo de Bartomeu en las elecciones de 2015.

Los egos y el dinero destruyeron aquella asociaci¨®n que sorprendentemente hab¨ªa funcionado tan bien, facilitada por la determinaci¨®n de Luis Enrique, despu¨¦s de que en enero se anunciara el fin del mundo en el Camp Nou. Ya nada ha sido igual en la Champions desde el adi¨®s de Neymar o cuanto menos las ca¨ªdas de Roma y Anfield han empeorado los tropiezos en Tur¨ªn con la Juve y ante el Atl¨¦tico en Madrid.

El Bar?a no sabe c¨®mo tapar el agujero que dej¨® Neymar por m¨¢s dinero que ponga despu¨¦s de la frustrada estancia de Coutinho, las lesiones de Demb¨¦l¨¦ y la incertidumbre que genera Griezmann. Hay quien tiene la sensaci¨®n en el club de que nada funcionar¨¢ en Europa hasta que no retorne el 10 de Brasil. Incluso algunos miembros del servicio t¨¦cnico advierten en Neymar al jugador veloz, profundo y valiente que necesita un equipo viciado por jugar al pie y dependiente de Messi.

Y ah¨ª nace el equ¨ªvoco del Bar?a. El compromiso de Neymar es m¨¢s con Messi ¨Cy si se quiere con Luis Su¨¢rez, en tanto que miembro del tridente¨C, y hasta con Bartomeu, que no con el equipo y el club, circunstancia que favorece el dichoso ecosistema, el mismo que impide evolucionar el juego del Barcelona. Messi no necesita amigos ni divos sino defensas, medios y delanteros titulares que saquen tambi¨¦n del anonimato a De Jong.

El reto ser¨ªa montar un equipo y no reconstruir un ataque con Lautaro y Neymar ¨Ccuestan 111 y 180 millones¨C salvo que Messi quiera convertir ahora al brasile?o en su heredero y se traspase a Griezmann y o Demb¨¦l¨¦. Neymar perdi¨® adem¨¢s la admiraci¨®n de la hinchada cul¨¦ y no tiene el respeto de los rivales por las trifulcas que gener¨® en LaLiga. Y por otra parte los n¨²meros rojos abruman al Bar?a con el coronavirus; las arcas est¨¢n vac¨ªas en el Camp Nou.

No conviene olvidar, sin embargo, que es en las situaciones cr¨ªticas cuando emerge Bartomeu. Nadie sabe generar las mejores condiciones para su inmolaci¨®n y posterior resurrecci¨®n que el presidente del Bar?a. No se daba un c¨¦ntimo por su suerte, despechado incluso por la corte que aspira a liderar la candidatura continuista a las elecciones, y hoy ser¨ªa capaz de dar sentido a la vuelta de Neymar mientras idea un plan de choque contra el coronavirus.