No debemos jugar de cualquier modo
Volver y tener que parar despu¨¦s por casos de contagio ser¨ªa el peor escenario posible y dif¨ªcilmente salvable, adem¨¢s de un golpe moral
Sin f¨²tbol se puede vivir, pero peor
Hay una frase que se ha quedado en mi cabeza y a la que no paro de darle vueltas: ¡°sin f¨²tbol se puede vivir¡±. Y s¨ª, es cierto, se puede vivir, pero peor. O, al menos, as¨ª lo sienten los 4.000 millones de aficionados que este deporte tiene en todo el mundo. Quiz¨¢s sea ese n¨²mero lo que haya convertido la vuelta del f¨²tbol en prioridad. O eso es lo que deducimos de todas las noticias, reuniones y esfuerzos que se est¨¢n haciendo.
Que genera miles de millones lo sabemos todos, y no hablo ya del salario de los futbolistas, sino de todos los dem¨¢s, de todas esas familias que viven directa o indirectamente del f¨²tbol. Pero tampoco podemos olvidar que hay otras muchas familias que viven de otros sectores que tambi¨¦n quieren que su actividad sea una prioridad. Por eso hay que tener mucho tacto y mucho respeto con todas las opiniones.
Despu¨¦s de tantas semanas apartados del verde est¨¢ claro que los futbolistas queremos volver a jugar, y cuanto antes. Pero no a cualquier precio ni de cualquier manera. Algunos comentan que los jugadores no querr¨ªan concentrarse porque no les gusta o porque se aburren. Bueno, puntualicemos. A ver a qui¨¦n despu¨¦s de casi dos meses encerrados en casa le gustar¨ªa recluirse en un hotel, sin hablar de la poca tranquilidad y seguridad que indica el tener que concentrarse y aislarse. Sin tener controlada la situaci¨®n y los n¨²meros de contagios y muertes, volver a jugar ser¨ªa una irresponsabilidad. Adem¨¢s de un mensaje err¨®neo para el resto de ciudadanos.
Que el f¨²tbol profesional s¨ª tenga acceso a tests (aunque sea por una empresa privada) ser¨ªa otro error de soberbia y poca empat¨ªa. Pero no deber¨ªan ser los futbolistas los que se posicionen en uno u otro lado, ni los que pongan las condiciones de seguridad. Sobre todo porque hay que tener en cuenta que cada uno tendr¨¢ su situaci¨®n personal y sus intereses. No creo que quien se est¨¦ jugando el descenso, y de ello dependa su pr¨®ximo contrato, tenga muchas ganas de reiniciar esto. Y tendremos los contrarios, para los que ese ascenso o ese puesto Champions significa un cambio en su carrera.
Personalmente, creo que hay que tener paciencia y esperar lo m¨¢ximo posible, porque como dice el saber popular: ¡°las prisas no son buenas¡±. Volver y tener que parar despu¨¦s por casos de contagio ser¨ªa el peor escenario posible y dif¨ªcilmente salvable, adem¨¢s de un golpe moral para todos.
Tambi¨¦n creo que es el momento de sanar el f¨²tbol, de buscar un modelo m¨¢s sostenible. ?C¨®mo es posible que despu¨¦s de uno o dos meses tantos clubes est¨¦n en riesgo financiero y casi todos ellos haciendo grandes recortes? La fragilidad que muestran es preocupante. Pero es la fragilidad de la burbuja en la que vive el f¨²tbol mundial. Salvarlo a corto plazo y sanarlo para el futuro.
Mientras tanto en EE UU...
Aqu¨ª en Estados Unidos la vuelta a los entrenamientos sigue marcada para mediados de mayo, y la competici¨®n regresar¨ªa a finales de junio. Muy optimista todo si tenemos en cuenta que aqu¨ª ya hay m¨¢s muertes que en Espa?a e Italia juntas. Pero nuestra vista, la de los deportistas, est¨¢ m¨¢s puesta en Europa, con su evoluci¨®n y decisiones, que en el calendario. Lo que pasa al otro lado del charco es lo que vivimos aqu¨ª dos semanas despu¨¦s. Un deja v¨² constante para los expatriados.
Mis compa?eras y compa?eros del Real Salt Lake me preguntan c¨®mo est¨¢ la cosa en Espa?a, si se avanza, si los equipos ya entrenan... yo a mi vez paso la pregunta a mis excompa?eras chinas que me cuentan que all¨ª han empezado a entrenar por grupos. A la siguiente pregunta de cu¨¢ndo volver¨¢n a jugar responden con un simple: ¡°Nadie sabe¡±.
Mientras tanto, seguiremos con nuestros entrenamientos diarios en casa e intentando llevar nuestras mentes a un estado de hibernaci¨®n, para que cuando estemos de vuelta la motivaci¨®n y la ilusi¨®n tambi¨¦n vuelvan como en cada inicio de temporada.
Un d¨ªa menos, falta un d¨ªa menos.
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