El US Open, o la burbuja de los l¨ªos

Repantingado sobre una camilla instalada en uno de los anillos de la Arthur Ashe, el alem¨¢n Alexander Zverev toquiteaba su m¨®vil y se divert¨ªa a la espera de que alguien le transmitiera qu¨¦ estaba ocurriendo, por qu¨¦ ¨¦l y Adrian Mannarino no pod¨ªan saltar a la pista para dirimir el pase a los octavos del US Open, sin causa aparente. Pas¨® una hora y despu¨¦s otra, y lo que al principio le resultaba gracioso comenz¨® a hac¨¦rsele pesado. Finalmente, casi tres horas despu¨¦s de la hora fijada en el programa, ¨¦l y el franc¨¦s pudieron acceder al cemento, ante el desconcierto generalizado y el silencio sepulcral de la organizaci¨®n del torneo. ?Qu¨¦ demonios estaba pasando?

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Fractura y alerta en el US Open

Luego, la Federaci¨®n Estadounidense (USTA) emiti¨® un escueto comunicado en el que argumentaba ¡°razones m¨¦dicas¡±, lo que obliga a rebobinar.

Mannarino, de 32 a?os, era una de las 11 personas que hab¨ªa estado en contacto con su compatriota Benoit Paire. Este ¨²ltimo dio positivo por coronavirus a las puertas del evento y, ateni¨¦ndose al protocolo de seguridad, el torneo lo apart¨® directamente. Mientras, a siete de esos 11 jugadores que hab¨ªan compartido una partida a cartas o alg¨²n momento de relax con ¨¦l ¡ªcinco tenistas franceses y dos belgas¡ª se les aplic¨® una supervisi¨®n especial; esto es, se cre¨® para ellos una burbuja dentro de la burbuja dise?ada para que se haya podido desarrollar el grande estadounidense.

Efectuadas todas las pruebas pertinentes, la USTA les autoriz¨® a que siguieran compitiendo, eso s¨ª, bajo un estricto r¨¦gimen y una cuarentena controlada. ¡°Es abominable lo que nos est¨¢n haciendo vivir aqu¨ª. Parecemos prisioneros, esto es una pesadilla¡±, denunci¨® Kristina Mladenovic, una de las sospechosas, tras caer en la segunda ronda. ¡°No s¨¦ si contar lo que est¨¢ pasando en esta falsa burbuja¡±, carg¨® de la mano Paire. ¡°La burbuja nunca fue real, desde el primer d¨ªa. Nunca nos comentaron que un diez por ciento de nosotros ¨ªbamos a estar en otro hotel, completamente diferente¡±, se sum¨® el doblista Tim Puetz en declaraciones a Advantage-Podcast.

Se refer¨ªa el alem¨¢n a que el plan inicial hab¨ªa cambiado. Aunque te¨®ricamente todos los profesionales iban a alojarse en un mismo hotel, el bunkerizado Marriot de Long Island, un grupo tuvo finalmente que hospedarse en otro en el que, al parecer, la normativa es bastante m¨¢s laxa. Seg¨²n Puetz, en el Garden Hotel los jugadores se mezclan a diario con los turistas y comparten espacios, sin control alguno de entradas y salidas; tambi¨¦n, en palabras del propio Puetz que corrobor¨® Zverev, all¨ª se celebran bodas y fiestas estos d¨ªas, sin atenerse al exigente protocolo anunciado por la USTA.

As¨ª, las voces que cuestionan el dispositivo empezaron a coger fuerza hasta que el viernes lleg¨® el desconcierto a las cinco de la tarde, porque no arrancaba el partido entre Zverev y Mannarino. ?El motivo? La irrupci¨®n directa del Departamento de Salud del Estado de Nueva York. ¡°Un di¨¢logo colaborativo con los responsables sanitarios¡±, precis¨® el torneo. El duelo estaba paralizado. ¡°Y la decisi¨®n no estaba en nuestras manos. Ha sido una cuesti¨®n pol¨ªtica de gente que est¨¢ por encima de nosotros¡±, explic¨® Zverev, de 23 a?os. ¡°Comentaban que deb¨ªa estar en mi habitaci¨®n porque hab¨ªa estado expuesto a un caso positivo, y que no deb¨ªa saltar a la pista¡±, cont¨® Mannarino.

Comprensivo, el alem¨¢n esper¨® relajadamente y en cuanto las autoridades dieron luz verde, con casi tres horas de retraso sobre la hora prevista, el partido se jug¨®. Venci¨® Sascha, y se medir¨¢ este domingo (hacia las 19.30, Eurosport) por un puesto en los cuartos al espa?ol Alejandro Davidovich.

¡°No dir¨ªa que este US Open es una pesadilla, me han dejado jugar... Dir¨ªa que es una edici¨®n especial¡±, atenu¨® Mannarino, que deber¨¢ seguir con la cuarentena y no podr¨¢ abandonar el pa¨ªs al menos hasta el viernes. ¡°Malas noticias. Tenemos que permanecer en nuestra habitaci¨®n hasta el pr¨®ximo d¨ªa 11¡±, lamentaba la belga Kirsten Flipkens desde la ¡°burbuja dentro de la burbuja¡±. Entretanto, las autoridades francesas y estadounidenses no han alcanzado un acuerdo para que los tenistas eliminados puedan regresar a Francia, por lo que no pueden seguir entren¨¢ndose ni trabajando en el gimnasio pese a que se avecina de inmediato la gira europea sobre arcilla y Roland Garros.

Sucede todo cuando nada m¨¢s aterrizar en Nueva York para disputar Cincinnati, ensayo a modo de lanzadera, ya se form¨® una polvareda porque el argentino Guido Pella y el boliviano Hugo Dellien fueron apartados despu¨¦s de que el preparador f¨ªsico de ambos diera positivo. ¡°Es una injusticia total, he dado nueve negativos¡±, protest¨® el primero e iniciando las cr¨ªticas que est¨¢n top¨¢ndose a su vez con los numerosos elogios hacia el esfuerzo de la organizaci¨®n para que todo transcurra con seguridad y se haya podido celebrar el torneo.

¡°Creo que no hay lugar m¨¢s seguro en el mundo que este. Quiz¨¢ si te encierras en una cueva, o est¨¢s en medio del mar. Es complicado controlar a tanta gente, pero esperemos que nadie m¨¢s est¨¦ afectado¡±, valora el austriaco Dominic Thiem. ¡°Los prisioneros o los criminales no tienen la oportunidad de jugar segundas rondas y recibir un premio de seis cifras¡±, le contest¨® el exn¨²mero uno Andy Roddick a Mladenovic, descalificada del dobles (en la misma situaci¨®n que Mannarino el d¨ªa previo) que iba a jugar junto a la h¨²ngara Timea Babos, con la que forma la mejor pareja femenina del mundo.

Antes, Roddick hab¨ªa enviado tambi¨¦n un recado a Paire y Zverev: ¡°Dir¨ªa que la falsa burbuja ha conseguido albergar con ¨¦xito un evento internacional, y espero que el querido Roland Garros de Paire sea capaz de hacer lo mismo. Tambi¨¦n dir¨ªa que Zverev, de quien soy fan, deber¨ªa ser el ¨²ltimo en tirar piedras a la gente y su comportamiento con respecto a la covid-19¡å.

En mitad del remolino, Novak Djokovic dijo haberse preocupado por Mannarino. ¡°Estuve en contacto con su entrenador, con la ATP y el Tour Manager. Tir¨¦ de mis contactos para tratar de llegar al gobernador del estado de Nueva York [Andrew Como]. Al llegar aqu¨ª, sab¨ªamos que este tipo de cosas pod¨ªan pasar¡±, se?al¨® el rey actual del circuito. Tambi¨¦n anunci¨® Nole que la nueva asociaci¨®n que ha impulsado (PTPA), que choca frontalmente con los intereses de la ATP y los torneos, sigue ganando adeptos. ¡°Esta asociaci¨®n era necesaria desde hace m¨¢s de 20 a?os, diferentes hombres y mujeres han intentado hacer algo as¨ª y estoy orgulloso. Estoy feliz de que tengamos hasta ahora unas 150 firmas de jugadores¡±, aplaudi¨®.

Y el l¨ªo contin¨²a en Nueva York...