Ansu Fati se grad¨²a en casa de Ramos
El joven delantero azulgrana lanza a Espa?a a una goleada (4-0) contra Ucrania, reducida a cenizas en Valdebebas por una Roja convincente y recreativa
Gui?os del f¨²tbol: un becario de La Masia se diplom¨® como internacional en Valdebebas. En el reino de Sergio Ramos irrumpi¨® como un cohete Ansu Fati, cometa de la Roja para fulminar a Ucrania. En su segundo partido con Espa?a, el cadete azulgrana dej¨® un testamento sonoro. En el primer tiempo, Fati arm¨® un taco de a¨²pa a los muchachos de Shevchenko, que llevaban once partidos sin perder. Todo un repertorio de mo?as burlonas, chistes con las piernas, remates, acrobacias... Todo impropio de un cr¨ªo de 17 a?os, por tanto desparpajo, por tanta audacia. Y qu¨¦ decir de su efectividad: un penalti provocado antes de los dos minutos, un gol y un extenso cat¨¢logo de f¨²tbol recreativo. El chico tiene tanto encanto como miga: desequilibra y no le falta mazo.
V¨ªa Fati encontr¨® Espa?a su ruta hacia una goleada sellada con un doblete de ese defensa tan adiestrado como goleador que es Sergio Ramos. En una noche de r¨¦cords, el capit¨¢n madridista se convirti¨® en el defensa internacional m¨¢s goleador (23, por delante del argentino Pasarella). El recluta Fati bati¨® la marca de precocidad goleadora de un internacional espa?ol. Lejos, muy lejos, quedan los tres goles que Errazqu¨ªn ¡ªun argentino que jug¨® seis partidos con Espa?a e hizo carrera en el Real Uni¨®n de Ir¨²n¡ª le endos¨® a Suiza en 1925 cuando ten¨ªa 18 a?os y 344 d¨ªas. El ni?o Fati, tambi¨¦n de origen extranjero (Guinea Bissau), cumplir¨¢ 18 el pr¨®ximo 31 de octubre.
Camino de la gloria que le espera, Fati no se demor¨®. Antes de los dos minutos anud¨® a su marcador con un amague y otro amague y otro amague. Enfil¨® el ¨¢rea y Krystov le atropell¨® sin remedio. Sergio Ramos, en su patio particular, ejecut¨® el penalti, casi frustrado por Pyatov, que le adivin¨® la direcci¨®n.
A hombros de Fati y con Ramos afilado, Espa?a martiriz¨® a Ucrania, chata ante la presi¨®n adelantada de los de Luis Enrique. La idea de Shevchenko de articular el juego desde sus torpes portero y centinelas fue un chollo para la Roja. Apretaron los locales con mand¨ªbula y birle a birle dejaron a Ucrania abrochada en su terreno. Ni un foco para De Gea. Nadie afloj¨®, sin dimitidos a la hora de acogotar al adversario. Rodri, Merino ¡ªgran futbolista integral de la Real¡ª y Thiago achucharon por el medio, Reguil¨®n y Navas ventilaron por las orillas y Dani Olmo, Gerard Moreno y Fati fueron un piquete constante para los rivales.
Jugadores expansivos
Jugaba Espa?a, Ucrania era la nader¨ªa. Y m¨¢s cuando Ramos caz¨® el segundo, un cabezazo a pase de Dani Olmo ¡ªotro jugador expansivo¡ª que vol¨® sobre la coronilla del hipnotizado Pyatov. A la fiesta de graduaci¨®n de Fati le faltaba el gol de Fati. El juvenil azulgrana no solo es un extremo picante y veloz. Es m¨¢s que un regateador. Es curioso, pese a su aparente ligereza f¨ªsica tiene armadura para el gol, no elude ir a las cuerdas contra zagueros cachas. Y en el per¨ªmetro no se lo piensa. Ocurri¨® en el tercer tanto local, cuando Fati redujo a cenizas a Ucrania con un disparo combado imposible para Pyatov.
Al descanso, la Espa?a de Fati y Sergio Ramos ya ten¨ªa la faena casi liquidada. No hubo reacci¨®n visitante, abrumado el equipo amarillo por la mordida espa?ola. Sobre ruedas la jornada, Luis Enrique tuvo ocasi¨®n de mover el cesto a su antojo. Dio descanso a Ramos para que debutara Eric Garc¨ªa, el central del City. Y luego recurri¨® a otros dos reci¨¦n llegados a la pasarela internacional: ?scar Rodr¨ªguez ¡ªpegador de primera, como en su disparo al larguero¡ª y el habilidoso Ferran Torres ¡ªque se estren¨® como goleador con la Roja con el 4-0¡ª. Fati, Ferran, ?scar, Eric, Olmo, Merino... Es la Espa?a que llega a las ¨®rdenes del eterno Sergio Ramos. Es la Espa?a que ya lidera su grupo en esta Liga de las Naciones tras el empate entre Suiza y Alemania (1-1). Es la Espa?a en transici¨®n que perfila Luis Enrique con la Eurocopa del pr¨®ximo a?o en la mirilla.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.