Iga Swiatek, un torbellino de 19 a?os

Lo celebra Iga Swiatek como se debe, con la frescura propia de una chica de 19 a?os que juega y gana sin complejos. Aqu¨ª estoy, Par¨ªs. Aqu¨ª estoy, tenis. La polaca, acelerada perdida, acaba de rendir en la final de Par¨ªs a Sofia Kenin (6-4 y 6-1, en 1h 24m) y tras pedir permiso al juez de silla corretea por las gradas y sortea un murete hasta dar con los miembros de su equipo, a los que abraza uno a uno, feliz como unas casta?uelas. L¨®gico, teniendo en cuenta que acaba de conquistar Roland Garros, palabras mayores, su primer t¨ªtulo como profesional y convirti¨¦ndose adem¨¢s en la primera representante polaca, hombre o mujer, que alza un grande en la categor¨ªa individual.

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Lo hace Swiatek con todos los honores: no solo ha sido la mejor, sino que a lo largo de las dos semanas francesas ha arrasado, literalmente. En su trazado hacia el trofeo ha despachado a rivales de talla ¨CVondrousova fue finalista el a?o pasado, Halep es Halep, la efervescente Podoroska y la ruda Kenin, campeona a comienzos de este a?o en Australia¨C y no ha dejado pr¨¢cticamente ni las migas: cierra el torneo sin haber cedido un solo set, lo que obliga a rebobinar 13 temporadas, hasta 2007, para dar con el logro de la belga Justine Henin.

No ha dejado t¨ªtere con cabeza la polaca, desde este s¨¢bado la mujer m¨¢s joven que se corona en el Bois de Boulogne desde que lo hiciera Monica Seles, con 18 a?os y 187 d¨ªas en 1992; tambi¨¦n, la jugadora que menos juegos se deja (28) desde la alemana Steffi Graf (20) en 1988 y arrancando 38 breaks al resto. ?El secreto? ¡°Creo que mi consistencia mental y la agresividad¡±, dice conteniendo la emoci¨®n a pie de pista mientras se acuerda de su padre, que particip¨® en los Juegos de Se¨²l como remero y le ha inculcado ese no tener miedo a nada y no mirar a los lados, trabajar duro.

Solo as¨ª se puede superar la oposici¨®n herc¨²lea de Kenin, que tiene solo 21 a?os pero se desempe?a con el rictus y las formas de las veteranas. La estadounidense, seis del mundo, iba cargada de razones hacia el t¨ªtulo, pero se encontr¨® con un torbellino que no atiende a circunstancia ni condici¨®n, que ha crecido admirando a Nadal y que se toma tan en serio esto del tenis como ella. Y he aqu¨ª la raz¨®n de la final: mientras otras sestean o se despistan, las dos se aplican. Eso s¨ª, en el pulso definitivo hubo poca discusi¨®n. Kenin tuvo que ser atendida del muslo izquierdo y una vez que desencall¨® el primer parcial, Swiatek puso la directa.

Su encumbramiento en Par¨ªs viene acompa?ado, c¨®mo no, de otro golpe de tim¨®n en el circuito femenino. Desde que Serena Williams celebrase su ¨²ltimo major, Australia 2017, son ya nueve campeonas primerizas en los grandes escenarios. Por orden cronol¨®gico: Jelena Ostapenko (Roland Garros 2017), Sloane Stephens (US Open 2017), Caroline Wozniacki (Australia 2018), Simona Halep (Roland Garros 2018), Naomi Osaka (US Open 2018), Ashleigh Barty (Roland Garros 2019), Bianca Andreescu (US Open 2019) y Kenin (Australia 2020).

El triunfo de Swiatek, absolutamente inesperado porque part¨ªa como la 54? de la WTA, aunque ma?ana figurar¨¢ como la 17?, subraya tambi¨¦n una tendencia que contrasta con el masculino, territorio de la vieja guardia. La juventud se impone entre las tenistas y subraya el relevo generacional. La veintena frente a la treintena. Swiatek, el ¨²ltimo bandazo, es la quinta ganadora diferente en Par¨ªs desde 2015. Y, desde luego, la m¨¢s contundente.