El City da un paso adelante y otro atr¨¢s
El 1-0 del West Ham impulsa a Guardiola a desmontar el 4-3-3 para reivindicar su doble pivote, pero la reacci¨®n apenas produce un 1-1
Una pirueta de Michail Antonio dinamit¨® la escasa fe que Pep Guardiola le reserva al 4-3-3 como herramienta para vivificar a su cada vez m¨¢s l¨¢nguido Manchester City. Bast¨® medio partido para que el t¨¦cnico cambiara su propuesta inicial en un intento por darle fluidez al juego y remontar el 1-0. No hubo caso. El City empat¨® en su visita al West Ham (1-1), pero no jug¨® mejor. Con ocho puntos tras cinco jornadas, se aleja un poco m¨¢s (12?) de la cabeza de la clasificaci¨®n, recuperada por el Liverpool, que le gan¨® al Sheffield con m¨¢s determinaci¨®n que buen juego (2-1). La estad¨ªstica revela el peor arranque del City de Guardiola en el campeonato.
¡°Hay que analizar la situaci¨®n en la que hemos empezado la temporada", dijo el t¨¦cnico tras el partido; "sufriendo por las lesiones, por los contagios de covid de jugadores como Gundogan, por la falta de preparaci¨®n, y por la falta de tiempo de recuperaci¨®n entre partidos¡±.
La pandemia ha penalizado al City, seg¨²n Guardiola. A Michail Antonio el punta del West Ham, la pandemia le ha proporcionado una oportunidad. A sus 30 a?os, este extremo armado de una voluminosa estructura muscular, esforzado trashumante del f¨²tbol profesional entre la Segunda Divisi¨®n y la Premier, ha asumido el papel de definidor y de mandam¨¢s. De manera provisional, en junio; de forma definitiva, en octubre. Nadie elev¨® tanto la voz en el estadio Ol¨ªmpico de Londres cuando este s¨¢bado se midieron el West Ham y el City. Nadie se luci¨® m¨¢s que ¨¦l, autor de un gol que nadie m¨¢s vio: un centro de Coufal al medio del ¨¢rea, que le descubri¨® rodeado del portero y cuatro rivales, especialmente de Rub¨¦n D¨ªas, que le hab¨ªa tendido el lazo. Michail Antonio estaba marcado y de espaldas pero se las ingeni¨® para enganchar la pelota seg¨²n ca¨ªa y mandarla a la red con una media tijera.
El 1-0, a los 18 minutos, tuvo repercusiones profundas. No solo sobre el partido. Sobre todo pareci¨® afectar a la convicci¨®n de Guardiola sobre la viabilidad del 4-3-3, una cuesti¨®n que debe atormentarle desde hace un a?o, a juzgar por las continuas alteraciones que introduce en la arquitectura originaria de su equipo.
Guardiola, que desde hac¨ªa dos partidos hab¨ªa vuelto a desplegar su viejo 4-3-3, no esper¨®. No contempl¨® que su equipo ven¨ªa de imponerse al Arsenal y al Oporto con un modelo que requiere m¨¢s rodaje. A la m¨ªnima, se apresur¨® a desmontar el 4-3-3. Tras el descanso, reivindic¨® el doble pivote, un m¨®dulo que, en la imaginaci¨®n del entrenador adquiere dimensiones que, de momento, s¨®lo ¨¦l logra percibir. Sobre el campo los jugadores se muestran dubitativos.
Guardiola mand¨® a Ag¨¹ero a la grada, meti¨® a Foden en el partido, como extremo izquierda, y desplaz¨® a Sterling al medio del ataque, al tiempo que reformaba el mediocampo. Si en la primera parte hab¨ªa dispuesto que Rodri ejerciera de mediocentro ¨²nico, escoltado por Bernardo Silva y Gundogan, a la salida del intervalo escolt¨® al espa?ol con Gundogan y dej¨® que Bernardo Silva se descolgara. La propuesta fren¨® aun m¨¢s el ritmo de circulaci¨®n del bal¨®n del City. Si la pelota ya rodaba lenta con dos interiores, cuando Gundogan se plant¨® atr¨¢s, en plan vigilante, con uno menos para triangular entre l¨ªneas, el equipo perdi¨® continuidad.
El gol de Foden, a pase de Cancelo, fue un fogonazo. El empate result¨® definitivo. Con Bernardo Silva o con su sustituto, Kevin de Bruyne, el juego del City nunca se elev¨® lo suficiente para desmontar la defensa de su rival. Un mano a mano de Fornals con Ederson pudo generar el 2-1. Un mano a mano de Sterling con Fabianski pudo provocar el 1-2. Por juego, sin embargo, ninguno mereci¨® m¨¢s.
El Liverpool recupera el liderato
La ausencia de p¨²blico hace mella en el espect¨¢culo. Los grandes jugadores andan entristecidos. Los equipos que logran agitarse, sorprenden. El Sheffield visit¨® Anfield en estado de ebullici¨®n. Defensa de cinco, balones divididos, coraje, y empuje al l¨ªmite del reglamento le reportaron el 0-1 gracias a un penalti que descubri¨® el vac¨ªo que ha dejado Van Dijk en el coraz¨®n del campe¨®n. Fabinho se equivoc¨® y trat¨® de enmendar el error en la salida del bal¨®n con una acci¨®n imprudente. El VAR castig¨® el derribo de Berge con el penalti que el mismo Berge anot¨®.
El Liverpool se sobrepuso a la adversidad a base de tes¨®n. Le falt¨® f¨²tbol porque sin Thiago, lesionado, su mediocampo carece de luz. Wijnaldun, Jota y Henderson hicieron el esfuerzo por compensarlo pero no consiguieron enlazar con los delanteros de manera clara. Solo la fatiga del Sheffield abri¨® huecos y siempre por las bandas. Los goles cayeron desde centros laterales: uno de Henderson que empuj¨® Firmino tras el cabezazo rechazado de Man¨¦; otro de Man¨¦ que meti¨® Jota ante la impotencia del robusto Stevens para despejar el env¨ªo.
El Liverpool culmin¨® la remontada (2-1) y recuper¨® el liderato provisional de la Premier en una jornada cuya peor noticia fue la anulaci¨®n del gol de Mo Salah por fuera de juego milim¨¦trico, seg¨²n el VAR. El egipcio captur¨® el pase largo de Alexander-Arnold tras desmarcarse a la espalda de los centrales y remat¨® ante la salida del portero en dos toques. Control y tiro en el aire, sin permitir que la pelota botara. Una obra de arte de la coordinaci¨®n destrozada por la tecnolog¨ªa. Un bello recuerdo de la nada, casi con el mismo peso que el 0-0 que coron¨® la visita del Chelsea a Old Trafford. Un encuentro que se inscribir¨¢ en los libros por el debut de Cavani en la Premier y poco m¨¢s.
¡°Edinson ha causado un gran impacto en nuestros entrenamientos¡±, dijo Ole Gunnar Solsjkaer, t¨¦cnico del United, en la conferencia que sucedi¨® al partido. ¡°Ya es muy influyente. Nos aportar¨¢ mucho. Solo necesita ritmo de competici¨®n¡±.
Cavani no jugaba un partido oficial desde que, vistiendo el uniforme del PSG, elimin¨® al Dortmund en los cuartos de final de la Champions, el 11 de marzo.
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