El Granada se come al Betis
Segundo triunfo consecutivo del equipo de Diego Mart¨ªnez ante un rival tierno y muy vulnerable
El Granada no le dio la m¨ªnima opci¨®n a un Betis tan tierno como vulnerable. Se consum¨® con una facilidad pasmosa el tercer triunfo consecutivo de los locales en un derbi regional marcado por la gran competitividad de los de Diego Mart¨ªnez y el f¨²tbol artificial y poco pr¨¢ctico de los de Pellegrini. El Granada casi ni se despein¨® ante la ineficaz propuesta de los verdiblancos, que mostraron su debilidad defensiva en los dos goles y realizaron luego un in¨²til ejercicio de posesi¨®n que no le hizo ni cosquillas a su rival.
En su contumaz empe?o por acortar distancias con un 2-0 en contra a los 20 minutos, el Betis fue la viva imagen de la desesperaci¨®n. La prueba, Fekir, un campe¨®n del mundo que lo intent¨® siempre, pero que acab¨® angustiado ante la gran demostraci¨®n defensiva del Granada. Los verdiblancos remataron mucho y mal, desperdiciando una enormidad de saques de esquina. El Granada, mucho m¨¢s equipo, se lo comi¨® con una gran actitud defensiva, las carreras de Luis Su¨¢rez y el oportunismo de Soldado, que volvi¨® a hacer un doblete en LaLiga catorce a?os despu¨¦s.
El Granada dobl¨® el n¨²mero de faltas cometidas (12) por las seis realizadas por el Betis cuando S¨¢nchez Mart¨ªnez decret¨® el descanso en Los C¨¢rmenes. El dato no tiene por qu¨¦ explicar todo lo que ocurri¨® en el primer acto, pero ofrece una pista cuando muchas de estas faltas se cometieron de manera inteligente, con un equipo bien posicionado para esperar las acometidas de otro, el Betis, que con la pelota es bonito de ver, pero poco fiable y competitivo, sobre todo ante rivales tan bien estructurados como el Granada.
Por eso uno juega en Europa y el otro se pierde, una semana s¨ª y otra tambi¨¦n, en su propio laberinto. El Betis es un equipo que ofrece casi siempre buenas sensaciones. Por ejemplo, pudo adelantarse en el marcador a los siete minutos, despu¨¦s de un remate de Sanabria tras un gran centro de Miranda. Pero al mismo tiempo se derrumba al primer acto y ofrece muchas facilidades a los rivales. As¨ª, un disparo a la nada de Foulquier lo recogi¨® Luis Su¨¢rez dentro del ¨¢rea. Guido, mal colocado, le hizo penalti, muy bien transformado por Soldado.
El partido se le hab¨ªa puesto como quer¨ªa al Granada, m¨¢s fresco que en anteriores ocasiones y agresivo dentro del reglamento ante un rival tan tierno que casi nunca traduce en buenos resultados su f¨²tbol de toque. Seis minutos despu¨¦s, una fulgurante salida al contragolpe de los nazar¨ªs fue aprovechada por Soldado tras un error en el corte de Bartra. El atacante aprovech¨® del mismo modo la alocada salida de Robles, al que bati¨® por debajo de sus piernas. Cada disparo del Granada se convert¨ªa en gol, mientras el Betis acaparaba la posesi¨®n de manera in¨²til, sin apenas recursos para desmontar el entramado de un rival que juega al f¨²tbol con una tremenda eficacia. Carvalho y Sanabria tuvieron buenas opciones para hacer el 2-1, pero blando en las dos ¨¢reas, el conjunto de Pellegrini fue un juguete en manos de un Granada mucho m¨¢s eficaz y contundente.
No se puede negar la voluntad del Betis en la segunda parte. Pellegrini prescindi¨® del ineficaz doble pivote sacando del campo a Guido y fue acumulando delantero tras delantero. No hubo reacci¨®n porque, realmente, el partido estaba definido desde el minuto 20 con el 2-0 a favor de este Granada tan fiable. El Betis se fue desinflando, como un ni?o que pelea ante un adulto y que acaba cediendo en su pugna por la evidente diferencia f¨ªsica entre uno y otro. El Granada, una vez recuperadas sus se?as de identidad, se asienta en los puestos europeos mientras que este irregular Betis se pierde en la mitad de la tabla, mirando incluso a la zona de descenso. Pellegrini no acaba de dar con la tecla, mientras que Diego Mart¨ªnez sigue alimentando las cualidades de este buen Granada.
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