El emperador Tom Brady
El legendario ¡®quarterback¡¯ de 43 a?os eleva a un equipo perdedor como Tampa y suma siete t¨ªtulos de Super Bowl, m¨¢s que cualquier franquicia de f¨²tbol americano
No diga ¨¦xito, diga Tom Brady. La sociedad de la competitividad no ha podido encontrar un icono mejor en el deporte. Tras ganar en la madrugada del lunes por 31-9 a los Kansas City Chiefs la Super Bowl LV con los Tampa Bay Buccaneers, una franquicia fallida que no entraba en playoff desde 2007, el quarterback tiene m¨¢s t¨ªtulos (siete) que cualquier equipo de la NFL, la liga de f¨²tbol americano. A los 43 a?os, Brady ha superado a sus New England Patriots y a los Pittsburg Steelers, que suman seis, los mismos anillos que Michael Jordan, la figura hegem¨®nica del deporte estadounidense, en la NBA. Ha convertido el ¨¦xito en rutina, con 10 Super Bowl jugadas, tres de ellas despu¨¦s de cumplir los 40. Nadie logr¨® retrasar tanto su declive.
La historia de Brady representa el sue?o americano. Fue elegido por los New England Patriots en la sexta ronda del draft del 2000: 198 jugadores salieron antes que ¨¦l. Ya entonces tuvo el orgullo de decirle al propietario de la franquicia, Robert Kraft, con una pizza bajo el brazo, que hab¨ªan tomado la mejor decisi¨®n de su historia. In¨¦dito en su temporada como rookie, recogi¨® el testigo tras la lesi¨®n de Drew Bledsoe en 2001. As¨ª lleg¨® su noche fundacional: remont¨® 10 puntos en un playoff ante los Raiders con el campo nevado y tras una decisi¨®n arbitral hist¨®rica que indult¨® un bal¨®n que se le hab¨ªa escapado. De derrota segura a victoria en la pr¨®rroga y, semanas despu¨¦s, al primer t¨ªtulo de los Patriots.
El idilio de Brady y su entrenador, Bill Belichick, les llev¨® a dominar un deporte muy incierto: solo entran en playoff 12 de 32 equipos y todas las eliminatorias son a partido ¨²nico. Ganaron seis t¨ªtulos y perdieron tres Super Bowl, incluida la de 2008, ante los Giants, tras ser el ¨²nico equipo en la historia en ganar los 16 partidos de temporada regular. El a?o siguiente se rompi¨® el cruzado en la primera jornada; su ¨²nica temporada sin playoff en dos d¨¦cadas.
Tras un mes final de temporada para olvidar, Brady sali¨® de su zona de confort en Boston el a?o pasado. Si all¨ª era parte de un engranaje que le dejaba poco margen para la selecci¨®n de jugadas o la composici¨®n de la plantilla ¡ªBelichick mediante¡ª, en Tampa se encontr¨® una franquicia sin nada que perder que puso el destino en sus manos. Sac¨® del retiro a Rob Gronkowski, una fuerza de la naturaleza con una habilidad impropia de su f¨ªsico de armario. El que hab¨ªa sido su gran socio en su etapa final en los Patriots interrumpi¨® su cameo en la lucha libre para volver con ¨¦l. Sin Brady, New England ha vivido su primera temporada con m¨¢s derrotas que victorias desde 2000.
La pandemia dej¨® sin pretemporada a la NFL y los Buccaneers tardaron en arrancar. Terminaron como quinto cabeza de serie y tuvieron que ganar tres partidos a domicilio para convertirse en el primer equipo que jugaba una Super Bowl en su estadio. Prueba de su crecimiento es que eliminaron en Nueva Orleans a los Saints, un equipo que les hab¨ªa aniquilado en su propio estadio (3-38) en noviembre. En Tampa, Brady hace lo que quiere con el libro de jugadas. Y su entrenador, Bruce Arians, le ha dado rienda suelta con una filosof¨ªa muy ofensiva. Ante la duda, arriesga. Lo ¨²ltimo que quiere un quarterback es dejar sitio a la defensa cuando queda una yarda para el primer down.
Lejos de las heroicidades de otros tiempos, Brady se ha aprovechado de un trabajo magn¨ªfico de su defensa, la gran art¨ªfice de los playoffs, ante quarterbacks de leyenda. Drew Brees, de los Saints, jug¨® su peor partido en a?os en la semifinal. En la final de Conferencia, tumbaron en su campo a los Green Bay Packers ¡ªprimer cabeza de serie¡ª y al MVP de la temporada, Aaron Rodgers. Los Buccaneers dejaron escapar una renta amplia en una segunda parte en la que Brady lanz¨® tres intercepciones, pero la defensa neg¨® los ataques locales en el tramo final.
La misma f¨®rmula funcion¨® en la Super Bowl ante el fen¨®meno actual, Patrick Mahomes (25 a?os, 18 m¨¢s joven que Brady), y sus Kansas City Chiefs. La l¨ªnea defensiva de Tampa somete a un acoso inmediato al quarterback y Mahomes, MVP en su temporada de rookie y campe¨®n el a?o pasado, se pas¨® la noche corriendo por su vida, improvisando jugadas que se hab¨ªan roto en d¨¦cimas de segundo. Brady, que ya le gan¨® la final de Conferencia en 2019, alargaba su reinado en la banda mientras su sucesor era derribado una y otra vez. Pasan los a?os, pero su historia a¨²n se conjuga en presente.
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