Cruyff juega para Laporta

Jordi Cruyff ha dicho que su padre habr¨ªa votado a Joan Laporta en las elecciones a la presidencia del Bar?a. Nada nuevo si se tiene en cuenta la amistad que ten¨ªa el exentrenador azulgrana con el expresidente y ahora candidato desde los tiempos del Elefant Blau, la plataforma que en 1998 promovi¨® un voto de censura contra Josep Llu¨ªs N¨²?ez cuando se perpetuaba en el palco del Camp Nou desde 1978. La sorpresa es que Jordi Cruyff figura como director deportivo nombrado por el m¨¢nager general Xavi Hern¨¢ndez en el organigrama de la candidatura de V¨ªctor Font, rival de Laporta en los comicios del pr¨®ximo 7 de marzo.

¡°La gente tiene ganas de volver a sentir sensaciones del pasado¡±, remach¨® Jordi Cruyff en declaraciones al programa El Larguero de la Cadena Ser. La apostilla agrand¨® el disgusto de Font porque el lema de su campa?a es ¡°S¨ª al futur¡± frente a la nostalgia que a su entender representa precisamente Laporta. Jordi Cruyff, hoy entrenador del Shenzhen de China, no solo marcaba distancias con respecto a Font sino que le gui?aba un ojo a Laporta. Font tampoco ha podido activar a Xavi en la campa?a electoral porque cumple contrato con el Al Sadd y, al igual que Jordi Cruyff, no quiere enemistarse con el expresidente del Barcelona.

Font navega contracorriente porque algunos de sus mejores activos han quedado neutralizados desde que Laporta anunci¨® su intenci¨®n de volver tambi¨¦n al Camp Nou. Las encuestas pronostican desde entonces un triunfo del expresidente, que ni siquiera ha tenido que poner nombres a su proyecto deportivo, mientras Font ha dado a conocer hasta quienes ocupar¨ªan las ¨¢reas transversales de su junta si alcanza el palco del Camp Nou. El aspirante jam¨¢s lleg¨® a imaginar un escenario como el actual cuando en 2013 empez¨® a articular una candidatura alternativa al modelo representado por Sandro Rosell y Josep Maria Bartomeu.

Font aspiraba a aglutinar de alguna manera a los seguidores de Cruyff, a los exjugadores del Dream Team, a los fieles de Pep Guardiola y tambi¨¦n a los socios m¨¢s nacionalistas del Bar?a. Y, en consecuencia, se preparaba para competir con Jordi Roche, expresidente de la Federaci¨®n Catalana y del Girona, heredero del legado de la directiva y de quienes defienden la independencia del club respecto de los poderes pol¨ªticos, medi¨¢ticos y empresariales, la tesis que defendi¨® tambi¨¦n N¨²?ez. Hab¨ªa dos modelos muy definidos y contrapuestos hasta que se supo del inter¨¦s por presentarse de Laporta.

Roche ni siquiera lleg¨® a anunciar entonces su candidatura, despu¨¦s de advertir las cuitas que provocaba la composici¨®n de su lista y constatar la ruina del Bar?a, y Font se encontr¨® como rival a Laporta. Y, puestos a comparar a dos aspirantes que comparten ideolog¨ªa futbol¨ªstica y pol¨ªtica, a Laporta se le considera m¨¢s independentista que Font, m¨¢s amigo de la familia Cruyff y tambi¨¦n de Guardiola, m¨¢s pr¨®ximo igualmente al Dream Team y desde luego m¨¢s conocedor de La Masia y de Unicef. El capital humano que pretend¨ªa aglutinar Font fue metabolizado autom¨¢ticamente por Laporta.

Al expresidente le alcanz¨® con una pancarta que recordaba su curr¨ªculo y le exim¨ªa de mostrar su programa para liderar la carrera al Camp Nou. Las elecciones siempre tuvieron un car¨¢cter presidencial en el f¨²tbol y hay pocos liderazgos m¨¢s conocidos y operativos en el barcelonismo que el de Laporta. La alternativa es un equipo colegiado y profesional, con nombre y apellidos, como el que presenta Font, m¨¢s preparado seguramente para mandar que para ganar despu¨¦s de los errores cometidos por la necesidad que siente de desvirtuar a Laporta. Ocurre que incluso los defectos y los errores parecen haber prescrito para el expresidente del Bar?a.

A¨²n queda tiempo, sin embargo, para la salida de m¨¢s actores que pueden cambiar el pron¨®stico despu¨¦s de la irrupci¨®n de Jordi Cruyff. No hay que olvidar que quien medi¨® para que acabara la bronca de Johan Cruyff con la directiva del Bar?a y ambas fundaciones llegaran a un acuerdo de colaboraci¨®n fue Jaume Gir¨®, director general de la Fundaci¨® de La Caixa y hoy hombre fuerte de la candidatura de Laporta. Font, en cualquier caso, persevera en su intento de demostrar que la candidatura de Laporta tiene truco mientras Toni Freixa, el tercer candidato, se felicita por un duelo que de rebote revitaliza sus opciones para el 7-M.