De los silbidos de Ramos al ingl¨¦s de Alaba
El austriaco, que ya tuvo la confianza de Ancelotti en el Bayern, comanda al Madrid para ajustar la defensa tras la marcha del capit¨¢n
El verano se llev¨® a su paso a la pareja titular de centrales del Real Madrid y Carlo Ancelotti telefone¨® a un viejo conocido. El brasile?o David Luiz, de 34 a?os, quedaba libre al vencer su contrato con el Arsenal y, seg¨²n adelant¨® O Globo y confirm¨® este peri¨®dico en fuentes cercanas al futbolista, el t¨¦cnico quiso saber si le interesar¨ªa jugar para ¨¦l en el Madrid, despu¨¦s de haber coincidido 10 a?os atr¨¢s en el Chelsea. Las mudanzas de Ramos a Par¨ªs y de Varane a M¨¢nchester abr¨ªan un vac¨ªo de jerarqu¨ªa, m¨¢s all¨¢ de otras consideraciones futbol¨ªsticas.
Ramos manej¨® durante a?os la disposici¨®n del equipo sobre el c¨¦sped: una mezcla de mariscal de campo y pastor conduciendo un reba?o. A una se?al de su brazo, la l¨ªnea defensiva avanzaba en formaci¨®n para ahogar los espacios al rival. Un grito suyo evitaba la tentaci¨®n de ceder al temor y recular demasiado pronto cuando iban a lanzarles una falta lateral en contra: ¡°?Aguantamos! ?Aguantamos!¡±. En lo peor de la pandemia, el silencio ambiental del Di St¨¦fano vac¨ªo subray¨® la influencia del capit¨¢n. Sus gritos resonaban, tanto si se encontraba sobre la hierba como desde la grada, y se o¨ªa con mayor nitidez su idioma universal de los silbidos, con los que alertaba, correg¨ªa y mov¨ªa a un reba?o pol¨ªglota.
Durante los primeros meses en el Madrid de Ferland Mendy, que no fue muy r¨¢pido en sus progresos con el espa?ol, los silbidos derribaban cualquier barrera cultural. Sobre todo cuando la emergencia de la jugada no dejaba tiempo a Varane para acudir a oficiar como int¨¦rprete. El mercado veraniego se llev¨® la jerarqu¨ªa de esa pareja y Ancelotti llam¨® a Luiz. Pero el central no tiene pasaporte comunitario, y est¨¢ empe?ado en acumular minutos y visibilidad en Brasil para colarse en la lista de la Canarinha del Mundial de Qatar.
As¨ª que Ancelotti se qued¨® para componer el centro de la zaga con Milit?o, Nacho, Vallejo y otro viejo conocido, David Alaba, con quien hab¨ªa coincidido entre julio de 2016 y septiembre de 2018 en el Bayern M¨²nich. All¨ª fue el segundo futbolista que m¨¢s utiliz¨®: en la temporada 2016-17, su ¨²nica completa en Alemania, le dio 3.799 minutos, solo por detr¨¢s de los 4.201 de Robert Lewandowski. ¡°Carlo le conoce bien y sabe de sus capacidades para ser l¨ªder atr¨¢s. Es un jugador que en M¨²nich siempre valor¨® much¨ªsimo. Tiene galones¡±, dice una fuente que conoce bien al t¨¦cnico, enfrascado estas semanas en ajustar la defensa, a¨²n una debilidad del equipo.
Pero el austriaco, al que el italiano us¨® casi siempre como lateral izquierdo de largo recorrido en el Bayern, era un reci¨¦n llegado al Madrid. Nada que ver con las 16 temporadas que acumul¨® Ramos. Sin embargo, desde el principio ha desplegado la energ¨ªa y el mando que luci¨® en verano durante la Eurocopa como capit¨¢n de Austria, y el Madrid ha pasado de los silbidos al ingl¨¦s como lingua franca. Alaba todav¨ªa est¨¢ con sus primeros pasos con el espa?ol, aunque ya empiezan a asomar los primeros frutos. ¡°Let¡¯s go! One step up! [Vamos. Un paso adelante]¡±, animaba en el t¨²nel de vestuarios de Mestalla antes de salir al campo para el segundo tiempo, a¨²n con 0-0. ¡°?Vamos!¡±, cerr¨® en castellano.
El paso adelante del equipo es una de las obsesiones de Ancelotti, transmitida en el campo por Alaba, con quien el t¨¦cnico habla a menudo durante los partidos. El italiano explic¨® ayer, en la previa de recibir esta noche al Villarreal en el Bernab¨¦u (21.00, Movistar LaLiga), la importancia de ese paso adelante para mejorar el balance defensivo: ¡°La l¨ªnea de defensa se posiciona teniendo en cuenta la presi¨®n que hay con el bal¨®n. Si metemos presi¨®n al bal¨®n, la l¨ªnea se puede quedar m¨¢s alta y en esto Alaba es muy h¨¢bil, en tener la l¨ªnea alta. Pero si no hay presi¨®n sobre el bal¨®n, es un riesgo tener la l¨ªnea alta. Entonces, si no hay presi¨®n, tenemos que defender con bloque bajo. Es lo que estamos trabajando. A nosotros nos gustar¨ªa tener la l¨ªnea en la mitad del campo, pero no siempre es posible¡±, explic¨®.
Ancelotti apunta a la delantera, los primeros de la presi¨®n, como origen de la vulnerabilidad. En los primeros partidos Bale y Hazard fueron sustituidos justo despu¨¦s de sendas desatenciones ostensibles. Los esfuerzos del t¨¦cnico se centran en ajustar esas tuercas, aunque dice que el calendario no ayuda: ¡°Entrenar en el campo no es posible, porque son entrenamientos en los cuales necesitas intensidad y no puedes hacer intensidad en el entrenamiento cuando juegas cada tres d¨ªas. Lo hacemos con los v¨ªdeos¡±. Y con los braceos de Alaba empujando a los puntas desde su cueva.
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