Un gol con f¨®rceps
Frenkie de Jong desequilibra en el minuto 87 un partido espeso entre Alav¨¦s y Barcelona, dos equipos muy necesitados y escasos de f¨²tbol
No se sabe si estaba m¨¢s necesitado el Alav¨¦s o el Bar?a. Y, ante la duda, el partido parec¨ªa abocado al 0-0 cuando los azulgrana se encontraron con una jugada tan sorprendente y afortunada que tardaron en celebrar el gol de Frenkie de Jong. Ning¨²n jugador local ni forastero se acababa de creer el 0-1 en el 87. El resultado compromete al Alav¨¦s, que no gana desde noviembre y no sale del descenso, mientras que el f¨²tbol delata al Barcelona, sin juego ni ¨¢nimo, a un punto todav¨ªa de la zona Champions y eliminado en una semana de la Copa y la Supercopa. No logran cuadrar un buen partido los azulgrana, aliviados de todas maneras por la victoria, la tercera en campo ajeno, despu¨¦s de las de Villarreal y Mallorca.
Aunque el Alav¨¦s no es el Athletic, en Mendizorroza se anunciaba para el Bar?a un guion de partido parecido al de San Mam¨¦s y no se sabe si por miedo o desconfianza los muchachos de Xavi pisaron la cancha con mucha prudencia, caminaron a c¨¢mara lenta, tan lejos de Ter Stegen como de Pacheco. La cautela barcelonista sorprendi¨® incluso al equipo de Mendilibar, habitualmente intenso y directo, m¨¢s pausado que de costumbre ante el Bar?a. El Alav¨¦s, a fin de cuentas, se sabe fuerte en las jugadas a bal¨®n parado que tanto atormentan al Bar?a y los azulgrana parec¨ªan tener m¨¢s miedo al partido que al adversario menos goleador de la Liga (16) despu¨¦s de encajar seis tantos en los dos ¨²ltimos encuentros ante el Athletic y el Real Madrid.
Las penurias ofensivas del Alav¨¦s propiciaron seguramente que Xavi recuperara a Dest como lateral derecho e insistiera en el izquierdo con Alba. El nudo del choque giraba en cualquier caso alrededor de Busquets. La fidelidad del entrenador con el capit¨¢n es inquebrantable y los t¨¦cnicos contrarios se aplican en presionar al discutido mediocentro del Bar?a. La salida de bal¨®n del ¨¢rea azulgrana volvi¨® a ser lenta porque nadie se asociaba con Busquets, tampoco hab¨ªa finura en la l¨ªnea de pase y a los delanteros les faltaba dinamismo y profundidad para alcanzar el ¨¢rea de Pacheco. La posesi¨®n era inocua, el control del partido resultaba est¨¦ril por m¨¢s bien puestos que estuvieran los futbolistas y el ¨²nico rematador que aparec¨ªa era Luuk de Jong.
El Barcelona echaba en falta a Ansu, Demb¨¦l¨¦ y Memphis porque Ferran no entraba en juego y Abde no paraba de perder la pelota por m¨¢s que intercambiara su posici¨®n ante los laterales del Alav¨¦s. El partido se fue apagando poco a poco para el Bar?a. A la media hora solo se contaban dos remates, ambos fuera del marco de Pacheco, igual de in¨¦dito que Ter Stegen. Ni un tiro, ni un regate ni una jugada de m¨¦rito en un encuentro muy plano y cada vez m¨¢s apagado, siempre pendiente de la estrategia: el Alav¨¦s buscaba una falta y el Bar?a un saque de esquina; los cabezazos con y sin bal¨®n se suced¨ªan en Mendizorroza. El Alav¨¦s aguardaba pacientemente un error del Bar?a. Acostumbra a llegar en cada partido, tambi¨¦n en Mendizorroza.
Alba dobl¨® mal a Ferran en la ¨²ltima acci¨®n antes del descanso, al delantero le rebanaron la pelota y en la transici¨®n Luis Rioja habilit¨® a Pere Pons. El volante catal¨¢n remat¨® flojo a las manos de Ter Stegen. La jugada despabil¨® a los azulgrana a la salida del vestuario, y pasaron de no jugar a atacar mal y replegar peor para suerte de las transiciones del Alav¨¦s. Alrededor de Pedri, agigantado pese a acabar reventado en Bilbao, los barcelonistas agitaron la contienda y alcanzaron posiciones de disparo ante Pacheco. No dur¨® mucho porque los azulgrana no ten¨ªan tino ni contundencia y el Alav¨¦s se sent¨ªa fuerte en la contra y las segundas jugadas, y agresivos en los centros y faltas frente a Ter Stegen.
Un cambio de dibujo
Xavi empez¨® a mover el banquillo y dispuso un 3-4-3 sin Abde y con Nico. Tambi¨¦n se anim¨® el Alav¨¦s, mejorado con el cambio ofensivo de De la Fuente, m¨¢s afilado desde entonces que el Barcelona. Joselu no acert¨® en un cabezazo franco, suerte que domina como ning¨²n delantero, despu¨¦s de que Luuk de Jong no hubiera embocado un bal¨®n que se pase¨® por delante de Pacheco. El aturdimiento barcelonista dur¨® hasta el ¨²ltimo tramo cuando ya se renegaba sobre los veteranos y Alba filtr¨® un pase para el desmarque de Ferran y su centro fue empujado a la red por Frenkie de Jong.
La jugada, epis¨®dica en un campo helado, no redimi¨® a los barcelonistas, faltos de f¨²tbol y de deseo al inicio y venturosos al final, redimidos por el gol de Frenkie de Jong. A falta de liderazgo, sin que nadie marcara la diferencia, el neerland¨¦s se activ¨® y corrigi¨® un partido dif¨ªcil de digerir, sobre todo en la primera parte, tan reprobable que dif¨ªcilmente se olvidar¨¢ con el 0-1. Todos los partidos se juegan a cara y cruz y sali¨® cara en Mendizorroza.
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