El Tour de Francia ser¨¢ el Tour de Euskadi durante tres d¨ªas de 2023

Como siempre recuerda el escritor Christian Laborde, Dios no cre¨® los Pirineos para separar Francia de Espa?a, sino para distinguir el grano de la paja, los ciclistas de verdad, los escaladores, de los que est¨¢n para rellenar el pelot¨®n. Y, podr¨ªa a?adir Laborde, tanta pasi¨®n, para regalar a los vascos un lugar de culto entre monta?as, las cunetas del Aubisque, del Tourmalet, de Luz Ardiden.

De ah¨ª, de considerar los Pirineos su tierra, y a sus aficionados que ahora se visten de naranja, sus adoradores, a pensar que el Tour de Francia --la gran carrera que dio su verdadero sentido a la cordillera y a su Jes¨²s Loro?o, patriarca del Aubisque y rey de la monta?a del Tour del 53, antes que Bahamontes-- es cosa propia, hay solo un paso. El paso que ha dado el propio Tour concediendo a Bilbao la salida de la grande boucle de 2023. Y entre el Gobierno Vasco, las diputaciones y los ayuntamientos de las tres capitales, Bilbao, San Sebasti¨¢n y Vitoria, han aprovechado el privilegio (12 millones de euros, su precio) para convertir los cuatro d¨ªas, del 1 al 3 de julio, que el pelot¨®n pedalee por sus tierras en un verdadero y concentrado Tour de Euskadi.

El gran ciclista vasco Txomin Perurena siempre recuerda el amor de Eddy Merckx por Euskadi y por los ciclistas vascos, con los que se juntaba en el pelot¨®n y les dec¨ªa que si ellos le ense?aban euskera ¨¦l les ense?ar¨ªa flamenco. ¡°Y, f¨ªjate¡±, cuenta Perurena de vez en cuando, ¡°si me viera Merckx ahora mismo empezar¨ªa a gritar ?Gora Euskadi Askatuta! Quiz¨¢s se trabar¨ªa un poco, pero lo dir¨ªa. Siempre que me ve lo recuerda. Se lo ense?¨® el ciclista de Errezil Santi Lazcano, pero yo tambi¨¦n colabor¨¦ un poco. Y Merckx lo quer¨ªa gritar en tiempos de Franco, en el 74, cuando el Tour entr¨® en Catalu?a despu¨¦s de atravesar Andorra y ¨¦l gan¨® en Seo de Urgel. ¡®C¨¢llate, ni se te ocurra¡¯, le tuvimos que callar. ¡®Que acabas en la c¨¢rcel¡¯. Aquel d¨ªa la Guardia Civil le zurr¨® al mism¨ªsimo director del Tour, a Jacques Goddet, porque que no llevaba la acreditaci¨®n¡±.

Casi 50 a?os m¨¢s tarde el mundo es otro, y el Gora Euskadi es casi un grito oficial que gritan presidentes y alcaldes, y el Tour ser¨¢ mucho m¨¢s calmo, y hasta, deber de memoria, pasar¨¢, y dos veces, en la primera etapa por el lugar m¨¢s simb¨®lico de su patria, por Gernika, y su roble, la ciudad m¨¢rtir de los bombardeos nazis en la Guerra Civil, la capital espiritual del Pa¨ªs Vasco.

Ser¨¢n dos etapas con salida y llegada en el Pa¨ªs Vasco ¨CBilbao-Bilbao, Vitoria-San Sebasti¨¢n¡ªy una con salida en Amorebieta y final en Francia, posiblemente en la vasca Bayona. Los organizadores pidieron a la candidatura que las dos etapas iniciales fueran las que representan t¨ªpicamente al ciclismo vasco, trazados, sin apenas un metro de llano, para puncheurs ¨Cciclistas que, como Alaphilippe o Valverde, aman los repechos cortos, los despegues fulgurantes, los finales en cuestas duras-- que hace diferente la Cl¨¢sica de San Sebasti¨¢n (y se subir¨¢ Jaizkibel en la segunda etapa) y la Itzulia, la Vuelta al pa¨ªs Vasco, y se llegar¨¢ a Bilbao a un repecho duro el primer d¨ªa. Y la afici¨®n ser¨¢ multitudes. ¡°No me gusta decir eso de que la vasca es la mejor afici¨®n del mundo¡±, dice Perurena. ¡°Pero s¨ª que hay una gran diferencia con otros lugares. Nos gusta que ganen los nuestros, claro, pero aplaudimos a todos¡±.

Tambi¨¦n les dijo ASO a las instituciones vascas que s¨ª, que sus paisajes naturales son muy bonitos y dan muy bien en la tele, pero que lo que hace al Tour y al ciclismo especial es la gente, la afici¨®n, su pasi¨®n, su memoria hist¨®rica, y que era obligatorio pasar por la mayor¨ªa de pueblos que se pudiera entre mareas humanas. Y lo har¨¢, siempre la memoria y el homenaje, por Larrabetzu, el pueblo en el que naci¨® y muri¨®, demasiado pronto, Jes¨²s Loro?o.

En un ambiente mucho m¨¢s tenso, con duras negociaciones del Tour con la izquierda abertzale para evitar que la violencia destrozara el intento, se desarroll¨® la anterior gran salida del Tour de Francia desde el Pa¨ªs Vasco, de San Sebasti¨¢n, en 1992, cuando Miguel Indurain gan¨® el pr¨®logo del que ser¨ªa su segundo Tour. En un ambiente mucho m¨¢s emotivo, sentimental y resignado, se vivi¨® la llegada a Pamplona, en 1996. La capital navarra hab¨ªa pedido la etapa pensando que a la meta llegar¨ªa su Indurain de amarillo, camino de ganar su sexto Tour, y su campe¨®n lleg¨® derrotado, y recibi¨®, quiz¨¢s, el homenaje sentimentalmente m¨¢s grande que pudiera haber so?ado. Y en un ambiente mucho m¨¢s sordo se vivi¨® la primera llegada del Tour a Euskadi (y a territorio espa?ol). Fue una etapa con final en San Sebasti¨¢n en el Tour de 1949 que gan¨® Louis Caput. En el pelot¨®n no hab¨ªa ni un ciclista espa?ol: todos hab¨ªan abandonado en la primera semana. Mejor result¨® la etapa que en 1977 acab¨® en Vitoria despu¨¦s de salir de Oloron. La gan¨® un vasco del Goierri, Jos¨¦ Nazabal, de Zaldibia, que lleg¨® escapado con m¨¢s de cinco minutos sobre el pelot¨®n liderado por Rick van Linden.

Puedes seguir a EL PA?S DEPORTES en Facebook y Twitter, o apuntarte aqu¨ª para recibir nuestra newsletter semanal.