Guerra en el golf mundial: Sergio Garc¨ªa y Dustin Johnson se alistan en la Superliga saud¨ª y retan al PGA Tour

La guerra en el golf mundial ya tiene soldados. El circuito LIV Golf, la Superliga impulsada con fondos de Arabia Saud¨ª, anunci¨® este mi¨¦rcoles de madrugada la lista de 42 jugadores (faltan seis por confirmar) que disputar¨¢n el primero de los ocho torneos con los que desaf¨ªan al circuito estadounidense (PGA Tour) y al europeo (DP World Tour) y ponen patas arriba la organizaci¨®n de este deporte en todo el mundo. Entre los rebeldes atra¨ªdos por los petrod¨®lares hay figuras de peso: Dustin Johnson, exn¨²mero del mundo, Sergio Garc¨ªa, Ian Poulter, Louis Oosthuizen, Kevin Na, Graeme McDowell y Lee Westwood. Tambi¨¦n otros tres espa?oles: Pablo Larraz¨¢bal (n¨²mero 65 en la clasificaci¨®n mundial), Adrian Otaegui (162), ambos del circuito europeo, y el amateur David Puig, de la Universidad de Arizona, la misma en la que se form¨® Jon Rahm.

La bomba ha estallado. El primero de los ocho torneos de la Superliga saud¨ª se celebrar¨¢ la pr¨®xima semana, del 9 al 11 de junio en el Centurion Golf Club de Londres. Sobre la mesa, 25 millones de d¨®lares en premios, el doble de lo que reparte cada uno de los grandes. Y cuatro millones solo para el campe¨®n (120.000 d¨®lares para el ¨²ltimo clasificado), m¨¢s de lo que se embolsa el vencedor del torneo m¨¢s jugoso del circuito americano -The Players, 3,6 millones- y mucho m¨¢s de lo que recibe el ganador de un major: 2,7 millones han ingresado este curso Scottie Scheffler por vestirse con la chaqueta verde del Masters de Augusta y Justin Thomas por levantar el Campeonato de la PGA; 2,2 millones esperan al vencedor del US Open (16 al 19 de junio); y 2,07 a quien se corone en Saint Andrews en el Open Brit¨¢nico (14 al 17 de julio).

El dinero saud¨ª ha provocado un terremoto sin precedentes en el golf. Hace tres semanas, el PGA Tour envi¨® una carta a sus jugadores prohibi¨¦ndoles participar en los torneos de la Superliga saud¨ª, a pesar de que cada golfista puede solicitar una exenci¨®n para enrolarse en campeonatos fuera del ¨¢mbito del circuito americano. La amenaza de una expulsi¨®n definitiva de la ¨¦lite del golf mundial es real. Sin embargo, eso no ha asustado a estrellas como Dustin Johnson, de 37 a?os, que fue n¨²mero uno durante 135 semanas (ahora es el 13?) y ganador de dos grandes (el US Open de 2016 y el Masters de 2020). El estadounidense ha dado un volantazo tras afirmar hace meses: ¡°Es el momento para acabar con las especulaciones. Estoy comprometido plenamente con el PGA Tour¡±. No ha sido as¨ª. Y la culpa, seg¨²n The Telegraph, es un cheque de 125 millones de d¨®lares para hacerle cambiar de opini¨®n y convertirle en la gran figura de la Superliga. Johnson ten¨ªa previsto jugar la pr¨®xima semana el RBC Canadian Open, ya que firm¨® un acuerdo de patrocinio con el banco canadiense. El torneo ha expresado su decepci¨®n por la espantada, y es posible que RBC sea la primera gran marca en retirar su apoyo al estadounidense. Muchos otros patrocinadores pueden saltar por los aires en esta guerra.

Tambi¨¦n Sergio Garc¨ªa ha dado un portazo. El castellonense, de 42 a?os y n¨²mero 54 en la clasificaci¨®n mundial, ya avanz¨® sus intenciones cuando hace un mes protest¨® en¨¦rgicamente una decisi¨®n de los ¨¢rbitros en el torneo Wells Fargo: ¡°?No puedo esperar a dejar este circuito! Solo un par de semanas m¨¢s y no tendr¨¦ que tratar con vosotros nunca m¨¢s¡±. Ahora ha consumado el divorcio. En su palmar¨¦s, 36 victorias profesionales, 11 de ellas en el circuito americano, 93 grandes disputados (r¨¦cord espa?ol empatado con Olazabal) y el Masters de Augusta de 2017 como cima, adem¨¢s de su brillant¨ªsima hoja de servicios en la Copa Ryder: seis t¨ªtulos y r¨¦cord hist¨®rico de la competici¨®n en puntos (28,5) y victorias (25). La oposici¨®n del circuito europeo a la Superliga tambi¨¦n puede poner en riesgo su concurso en este torneo, cuya pr¨®xima edici¨®n es en Roma en 2023.

Entre los participantes en este bautizo hay tres golfistas que fueron n¨²mero uno del mundo (Dustin Johnson, Martin Kaymer y Lee Westwood), ganadores de ocho grandes, jugadores de 11 nacionalidades, 26 de los primeros 150 clasificados del mundo y representantes de todos los circuitos del planeta. El estadounidense Chase Koepka, en el puesto 1.543 del r¨¢nking mundial, y los amateurs James Piot (EEUU) y David Puig, ambos en el 1.743, son los golfistas situados m¨¢s bajo en la clasificaci¨®n. No figura Phil Mickelson, actualmente apartado de la competici¨®n despu¨¦s de su pol¨¦mico apoyo al nuevo negocio. ¡°Son unos hijos de puta [los saud¨ªes] con los que da miedo involucrarse. Sabemos que mataron a [el periodista Jamal] Khashoggi y que tienen un historial horrible en materia de derechos humanos. All¨ª ejecutan a gente por ser gay. Sabiendo todo esto, ?por qu¨¦ iba a considerarlo? Porque esta es una oportunidad ¨²nica en la vida para remodelar el funcionamiento del PGA Tour, que es una dictadura que utiliza el divide y vencer¨¢s porque saben que los intereses de los jugadores top no son los mismos que los del resto¡±, afirm¨® Mickelson en la redacci¨®n de una biograf¨ªa. Desde entonces no ha vuelto a jugar.

La tensi¨®n es m¨¢xima en el golf mundial y los jugadores se mantienen a la expectativa de cu¨¢l ser¨¢ el siguiente movimiento del circuito americano: si habr¨¢ mano dura y expulsiones para quienes se enrolen en la Superliga o si se abrir¨¢ a una negociaci¨®n para aumentar los premios y evitar la fuga de m¨¢s estrellas. Despu¨¦s de declarar en febrero su lealtad al PGA Tour (¡±Te lanzan n¨²meros y creen que te impresionan. Yo no juego por dinero, sino por el legado¡±), Jon Rahm expres¨® recientemente a la web Ten Golf: ¡°Me mantengo fiel al PGA Tour de momento, tenemos un gran producto. El problema que va a tener, porque yo quiero jugar contra los mejores del mundo, es cuando alguien que no est¨¦ ni entre los 150 primeros del mundo gane cuatro millones. Ah¨ª es cuando le va a crear un problema. Pase lo que pase, los jugadores, sobre todo los j¨®venes, acabamos con el mejor producto. Las cosas cambiar¨¢n para mejor. En este punto de mi carrera, si voy para all¨ª y me proh¨ªben la entrada en el PGA Tour sacrifico demasiado. As¨ª que de momento me quedo donde estoy y ya veremos c¨®mo van las cosas. Nunca se sabe lo que va a pasar. El PGA Tour lleva muchos a?os y si les asustan espero que mejoren las cosas¡±. Rahm, de 27 a?os, ha ganado m¨¢s de 30 millones de d¨®lares en su trayectoria en el circuito americano.

Preguntado este mi¨¦rcoles por este peri¨®dico sobre su participaci¨®n en la Superliga saud¨ª, el catal¨¢n Pablo Larraz¨¢bal asegur¨® que tienen ¡°prohibido¡± hablar del asunto.

Tiger Woods, el campe¨®n de 15 grandes y que a los 46 a?os lucha por volver a la ¨¦lite despu¨¦s de una fractura de pierna, afirm¨® durante el pasado Campeonato de la PGA: ¡°Creo en la historia, en los torneos grandes, en lo que hicieron Jack [Nicklaus] y Arnold [Palmer], creando nuestro circuito. Hay un legado en eso¡±. Este mi¨¦rcoles, Rory McIlroy ha comentado antes del Memorial Tournament: ¡°No creo que el field [los participantes] sea nada del otro mundo¡±. El norirland¨¦s admiti¨® ¡°un par de sorpresas¡± y dijo entender los motivos por los que algunos jugadores han cambiado de bando. ¡°Cuando me hice profesional jugaba por dinero. Necesitas un trabajo para comprarte una casa. ?Ahora juego al golf por dinero? No. Mi situaci¨®n ha cambiado con los a?os. Algunos chicos est¨¢n en una posici¨®n en la que no tienen garantizado un trabajo el pr¨®ximo a?o. Es dif¨ªcil mantenerse entre los 125 primeros, sobre todo cuando tienes m¨¢s de 40 a?os y quiz¨¢ no golpeas la pelota tan lejos como antes. Hoy en d¨ªa es un juego de j¨®venes. As¨ª que si llega otra entidad y dice: ¡®te garantizamos esta cantidad durante tres a?os¡¯, adem¨¢s de que juegas por una tonelada m¨¢s de dinero en premios, juegas menos eventos y puedes pasar m¨¢s tiempo con tu familia, es muy atractivo para algunos de esos chicos que est¨¢n en esa posici¨®n. Yo no lo har¨ªa, pero hay que intentar ponerse en la situaci¨®n de los dem¨¢s¡±.

La Superliga consta de ocho torneos que se disputar¨¢n entre junio y octubre en Londres, Portland, Bedminster, Boston, Chicago, Bangkok, Yedda y Miami. El exgolfista australiano Greg Norman, de 67 a?os, es la cabeza visible de este proyecto despu¨¦s de que Jack Nicklaus, ganador de 18 grandes, rechazara, ¡°verbalmente y por escrito¡±, un cheque de 100 millones de d¨®lares para ser el padre de la criatura. El circuito dispone de una modalidad de juego individual y otra por equipos, torneos de tres d¨ªas, 54 hoyos, sin corte, y con ambiciosos deseos de expansi¨®n. ¡°No nos detendr¨¢n¡±, avisa Norman. Y asegura que la Superliga cuenta con 2.000 millones de d¨®lares m¨¢s para elevar a 10 los torneos del circuito el pr¨®ximo a?o, y a 14 el curso siguiente. La guerra en el golf es total.

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