El l¨ªmite salarial y el Bar?a
El gran aval del sistema es que la Liga revela las cifras de los clubes y si alguien saliera favorecido, los de su entorno en aspiraciones protestar¨ªan y eso no pasa
El l¨ªmite salarial naci¨® en la temporada 13-14 para atajar una deriva ca¨®tica. Nuestro f¨²tbol deb¨ªa 750 millones a Hacienda, la deuda con la banca era de unos 1.000, los clubes se deb¨ªan 500 entre s¨ª, cerca de 500 jugadores ten¨ªan denuncias de impago por un monto total de 79 millones y amenazaban huelga. De los 42 clubes, 32 estaban en concursal. La forma de acabar con eso fue el l¨ªmite salarial. Hubiera sido sencillo imponer un tope de 70% del presupuesto para costo de plantilla, pero eso dejar¨ªa fuera la soluci¨®n para las deudas arrastradas. As¨ª que se cre¨® una f¨®rmula que recogiera ingresos, gastos y deuda.
El texto no es un secreto, cualquiera lo puede consultar en la web de LaLiga, pero advierto que son 180 folios. Empez¨® con 16 art¨ªculos, ahora va por 111, todo un bosque de casu¨ªsticas para recoger problemas aparecidos sobre la marcha. A veces para flexibilizar, como ese art¨ªculo 92 que sirvi¨® a Laporta para inscribir a Kound¨¦ mediante aval, pero otros para endurecer. Ejemplo: un pirata que ha recorrido varios clubes pagaba en negro e inscrib¨ªa con una cantidad menor y se resolvi¨® no tramitar ninguna ficha sensiblemente m¨¢s baja que la que el jugador ten¨ªa en su club previo.
Tras la pandemia se abri¨® la mano a todos en un sentido: las p¨¦rdidas de taquilla de aquel a?o se pueden repartir en los siguientes cinco siempre que en ellos no se exceda el monto salarial prepandemia.
Digamos que ha funcionado: el f¨²tbol est¨¢ en paz con Hacienda, los jugadores cobran. Hubo un solo fallo, el Reus, que col¨® disparates y fue expulsado.
Ya, me dicen muchos, pero ?y el Bar?a? ?C¨®mo si no es con la indulgencia del controlador pudo producirse el ¡®desastre Bartomeu¡¯? ?Y c¨®mo debiendo tal barbaridad y teniendo en proyecto un nuevo estadio ha podido Laporta hacer tantos fichajes?
Lo primero tiene mala explicaci¨®n. El propio Laporta dijo que con Bartomeu hicieron la vista gorda y con ¨¦l no. Respecto a los fichajes, hay que recordar que palanca a palanca Laporta ha reunido 700 millones y que el gasto de los fichajes imputable a este curso es de 140, porque cuando se ficha a un jugador el costo se reparte entre las temporadas de duraci¨®n del contrato.
Con todo, no se puede ocultar que un texto as¨ª da lugar a discusiones casi teol¨®gicas. En este caso se ha dado. Esa estrategia del Bar?a de crear empresas propias para adelantarse dinero a cuenta de ingresos futuros, ?las apuntamos como deuda o como inversi¨®n?.
Cuando se cre¨® el plan lo explicaron en As el propio Tebas y Javier G¨®mez, el sabio especialista que lo desarrolla. Ya saqu¨¦ la idea de que el Madrid y el Bar?a ser¨ªan mirados de otra forma, dado c¨®mo ponderaron su capacidad para generar ingresos. Bien se ha visto en el caso del Bar?a. Laporta consigui¨® 600 millones de Goldman Sachs hace un a?o; ahora, palanca a palanca, otros 700 para sus compras de verano, con la perla de Lewandowski.
Dentro de poco LaLiga reunir¨¢ a los clubes para revelar el l¨ªmite salarial de unos y otros y sus porqu¨¦s. Se hace todos los a?os, se hizo el pasado, y el gran aval del sistema es que si alguien saliera favorecido los de su entorno en aspiraciones protestar¨ªan, y eso no pasa. Quiz¨¢ porque todo est¨¦ bien hecho. Quiz¨¢ porque en ese bosque de art¨ªculos se pueden disfrazar cosas: la econom¨ªa no es mera aritm¨¦tica. O quiz¨¢ porque todos son conscientes de que el Bar?a resulta esencial para el sistema. Es conocido que Florentino ha ayudado a Laporta en estos apuros y nada tiene de extra?o que Roures, que est¨¢ en la gesti¨®n de los derechos internacionales de LaLiga, le apoyara en la palanca final.
Eso s¨ª: a¨²n queda tarea. Laporta anunci¨® que tendr¨ªa que rebajar su masa salarial de los 640 millones a los 400, en la l¨ªnea del Bayern y el Madrid. No lo ha hecho, sigue excedido, as¨ª que el verano que viene, si no lo ha corregido, se ver¨¢ otra vez sometido a la norma uno por cuatro, es decir, que s¨®lo podr¨¢ invertir un euro por cada cuatro que venda. El verano pr¨®ximo seguir¨¢ la pel¨ªcula.
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