Sin Roglic, Evenepoel ya no sufre
Rigoberto Ur¨¢n festeja el triunfo de una etapa en la que Enric Mas atac¨® sin ¨¦xito al l¨ªder
A Roglic le dol¨ªa todo, aunque quiz¨¢ m¨¢s el alma porque ve¨ªa que se le escapaba la Vuelta por el tortazo que se peg¨® el en esprint del martes, pura ambici¨®n la suya porque entendi¨® que para resquebrajar a Evenepoel, maillot rojo, deb¨ªa atacar en cualquier parte. As¨ª que el esloveno se fue a dormir intranquilo, con magulladuras y quemaduras, padeciendo por su coxis. El doctor del Jumbo-Visma, sin embargo, prefiri¨® que descansara, que no fuera al hospital porque entend¨ªa que no hab¨ªa nada roto. Pero Roglic pas¨® una noche de perros, apenas se pod¨ªa mover. As¨ª que cuando se despert¨®, ya sab¨ªa que no podr¨ªa afrontar la etapa. Fue al hospital, le hicieron un esc¨¢ner y se confirm¨® que no se hab¨ªa roto nada. Pero no hab¨ªa tut¨ªa y Jumbo dio la noticia: Roglic se bajaba de la bici. Y sin el esloveno en el pelot¨®n, Evenepoel no tiene rival, acaso un resucitado Enric Mas que lo intent¨® con timidez en la subida al Monasterio de Tentud¨ªa, a falta de tres kil¨®metros de meta, nada que inquietara al l¨ªder.
Roglic era el picante, el arrojo sobre la bicicleta, el corredor que encarnaba la emoci¨®n y la ilusi¨®n en esta Vuelta porque iba a cara descubierta, corredor que no quer¨ªa podio sino reverdecer sus laureles ¡ªtres seguidos¡ª, todo o nada, rojo o negro, rien ne va plus. Eso demostr¨® en las ¨²ltimas monta?as, cuando dej¨® atr¨¢s por dos veces a Evenepoel para recortarle un minuto; tambi¨¦n en la etapa anterior con un ataque sideral a falta de 2,8 kil¨®metros, un estir¨®n que no encontr¨® sombra m¨¢s que en cuatro espr¨ªnters, ocho segundos de ventaja para ellos, incluso para un Roglic que se estamp¨® con el suelo al chocar su manillar con el de Wright en el esprint final. Pero ese fue su the end, gran p¨¦rdida para la ronda espa?ola que, en cualquier caso, tiene un efecto domin¨® en los ciclistas que aspiran a cerrar el podio (Juan Ayuso, Carlos Rodr¨ªguez y Superm¨¢n L¨®pez), adem¨¢s de en Enric Mas, segundo en la general y ya con solo dos disparos por tirar.
Apenas hab¨ªa dicho p¨ªo Movistar hasta ahora, poco dado a jugar a la ofensiva y desde ahora solo ante el peligro, porque a Jumbo tanto le da la tarea del desgaste. Ya no estar¨¢n Gesink o Harper al frente del pelot¨®n y solo Valverde parece capacitado para que tiemblen las piernas de Evenepoel. Aunque, esperan, Ineos puede entrar en la batalla, ocupado en poner a Carlos Rodr¨ªguez en el podio, por ahora de Juan Ayuso, que ayer se cay¨® al inicio de la etapa pero sin repercusi¨®n. La etapa, que parti¨® de Aracena, hizo que no se escaparan los que pudieron sino los que quisieron porque el nivel de los 13 fugados ¡ªentre los que se encontraban Rigoberto Ur¨¢n (EF), Marc Soler (UAE), Champoussin (AG2R), Herrada (Cofidis) y Wright (Bahrain)¡ª era de muchos quilates. Pero ninguno que preocupara a Quick-Step, ¨²nico equipo en tirar del pelot¨®n hasta que se lleg¨® a las faldas del Monasterio de Tentud¨ªa, ascenso de 10,3 kil¨®metros con pendiente media del 5%, aunque con tramos al 12%.
Ah¨ª, donde la tierra amarilla regada de abundantes olivos llegaba a su fin para dar paso a los pinos, donde el trazado reviraba y reclamaba acci¨®n y ataques, lleg¨® Valverde y tambi¨¦n Ineos. Bienvenidos. Pero fue insuficiente para que Evenepoel volviera a ense?ar sus debilidades, recompuesto tras el par¨®n. As¨ª se lo demostr¨® a Enric Mas, que le prob¨® y se qued¨® con las ganas. Lo intent¨® Ayuso y tampoco se sali¨® con la suya, todo controlado. Y pidi¨® turno Almeida al que, como estaba a siete minutos, le dej¨® hacer, siempre girando el cuello para que nada se desmadrara por detr¨¢s. El jefe estaba en la oficina y ejerci¨® su mando en el esprint final, pues dio unas ¨²ltimas pedaladas de fuego, insuficiente para despegarse de Mas, pero s¨ª de Ayuso un par de segundos y del resto, dos m¨¢s.
Cinco minutos antes, bajo el arco de meta, ya hab¨ªa levantado los brazos Rigoberto Ur¨¢n tras una batalla sensacional, pues ¨¦l, Herrada, Soler y Champoussin le echaron el lazo a Craddock cuando quedaba un ¨²nico kil¨®metro. Herrada envid¨® pero se desbrav¨® antes de tiempo y Ur¨¢n, esfuerzo tit¨¢nico y pedaladas de coraz¨®n, se llev¨® el triunfo. Aunque la victoria, moral, es para Evenepoel, que sin Roglic no sufre, pues ba?¨® en cloroformo las aspiraciones de los rivales. ¡°Quer¨ªa mover un poco la carrera. Pero esas rampas no eran muy duras y Remco est¨¢ con buenas sensaciones¡±, concedi¨® Mas, que se acord¨® de Roglic con buenas palabras. Como las del belga: ¡°Me siento triste, no es bonito perder a un gran competidor, un gran campe¨®n y uno de los mejores tipos de la carrera de esta manera¡±. Tambi¨¦n, el ¨²nico que parec¨ªa poner en entredicho su coronaci¨®n en Madrid.
? L¨ªderes tras la etapa 1?3? | Leaders after stage 1?3?
— La Vuelta (@lavuelta) September 7, 2022
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