Martin Odegaard comanda la Premier

¡±Adoraba a Isco¡±. La confesi¨®n, pronunciada en The Players Tribune esta semana, resume el aturdimiento que experiment¨® Martin Odegaard cuando con 16 a?os expuso la raz¨®n que le llev¨® a elegir el Real Madrid como destino. Para el noruego, Cristiano, Benzema, Modric o Toni Kroos eran personajes secundarios. El futuro ¡ªlo mismo que a su ¨ªdolo¡ª le reservar¨ªa una larga serie de tragos amargos. Seis a?os m¨¢s tarde, en el verano de 2021, Carlo Ancelotti le comunic¨® que el club daba preferencia a ocho jugadores en su posici¨®n: era el noveno mediapunta del equipo por detr¨¢s de... Isco. Sin ficha ni esperanza de volverse a poner la camiseta blanca, resolvi¨® ir traspasado al Arsenal, club decadente que no jugaba la Champions desde 2016 y que, gracias a su intervenci¨®n, hoy es l¨ªder de la Premier.

El t¨®pico m¨¢s manido y falso del f¨²tbol est¨¢ en boca de todos los entrenadores: los esquemas t¨¢cticos son ¡°solo n¨²meros¡±, dicen, algunos en un intento por confundir adversarios, otros porque as¨ª se ahorran explicaciones. Si el reparto de funciones y espacios fuera irrelevante, con el actual 4-3-3 del Arsenal, Odegaard seguir¨ªa siendo el mismo mediapunta de brillantes apariciones espor¨¢dicas que la temporada pasada se esforzaba por no desengancharse del tren de los partidos, encorsetado como viv¨ªa en el 4-2-3-1. La realidad es menos esot¨¦rica. La desvela un t¨¦cnico que trabaja para el club de Londres bajo la condici¨®n del anonimato: ¡°Desde que Arteta juega con un 4-3-3, Odegaard se ha convertido en el mejor jugador de la Premier¡±.

El liderato del Arsenal, que le saca cinco puntos al Manchester City en el campeonato ingl¨¦s, no se puede desvincular del extraordinario salto cualitativo y cuantitativo que ha protagonizado el noruego en los ¨²ltimos seis meses. Ning¨²n jugador ha progresado m¨¢s en Europa esta temporada. Quienes han estudiado su evoluci¨®n sobre el terreno lo explican en dos factores. El primero es an¨ªmico, y se relaciona con la presencia de Gabriel Jes¨²s. El delantero, fichado al City, contagi¨® al vestuario gunner el esp¨ªritu incansable que le inculc¨® Guardiola para afrontar cada minuto de entrenamiento y partido con la m¨¢xima energ¨ªa. El segundo factor es posicional y se explica en la rigidez del orden t¨¢ctico que el entrenador, Mikel Arteta, impon¨ªa al equipo. Hasta el verano, todo giraba en torno al doble pivote que formaban Xhaka y Partey, limitados para iniciar la jugada y, por tanto, limitados para arrimar la pelota a la zona que ocupaba Odegaard por detr¨¢s del punta. Con la implantaci¨®n del 4-3-3, Partey se estableci¨® como mediocentro ¨²nico y Odegaard y Xhaka se repartieron las tareas de administraci¨®n del mediocampo, de ¨¢rea a ¨¢rea. La nueva ordenaci¨®n espole¨® la capacidad atl¨¦tica del jugador ¡ªcapaz de recorrer 13 kil¨®metros por partido sin perder lucidez ni cambios de ritmo, en las buenas y en las malas¡ª al tiempo que contrarrest¨® su tendencia al ensimismamiento oblig¨¢ndole a entrar m¨¢s en contacto con la pelota.

Sobre la base de tareas prosaicas continuamente repetidas ¡ªapoyos, desmarques y pases de mantenimiento¡ª comenzaron a germinar las cualidades excepcionales. Hoy, reci¨¦n cumplidos los 24 a?os, el muchacho nacido en Drammen es el futbolista m¨¢s eficiente en el arte de transformar el gesto pl¨¢stico en arma competitiva. No hay un jugador m¨¢s deslumbrante en toda Inglaterra. Sin frivolidades. Cuando la jugada exige haza?as t¨¦cnicas, su zurda transformada en mano es quir¨²rguica.

¡°Esperaba que pudiera mostrar el talento que tiene¡±, dice Arteta. ¡°Su actitud, su aplicaci¨®n y su deseo de aprender han sido incre¨ªbles. Cuando tienes esos ingredientes normalmente ocurren cosas buenas. Ahora est¨¢ en un gran momento. Est¨¢ resolviendo partidos y est¨¢ teniendo una presencia distinta en el campo¡±.

¡°En el Madrid me sent¨ª un extra?o, en Londres est¨¢ mi hogar¡±

Junto con Gabriel Jes¨²s y Martinelli, Odegaard es el ¨²nico jugador de la plantilla capaz de crear contextos para que sus compa?eros eleven el nivel. Pero a diferencia de los otros dos, ¨¦l genera espacios mediante maniobras de una sutileza y una hermosura que tiene a los aficionados perplejos. La sorpresa se extiende a las secretar¨ªas t¨¦cnicas de los grandes clubes. A quien no le sorprende mucho la evoluci¨®n es a Carlo Ancelotti. Seg¨²n fuentes pr¨®ximas al entrenador del Madrid, ¨¦l ya percibi¨® en la pretemporada de 2021 que Odegaard era el mediocampista con mayor potencial de su n¨®mina. Pero por entonces la directiva estaba embarcada en la promoci¨®n de Valverde y en el ahorro para el fichaje de Mbapp¨¦. El traspaso de Odegaard al Arsenal se complet¨® por 40 millones de euros, 35 de los cuales sirvieron para financiar la llegada de Camavinga.

¡±Durante mis primeros a?os en el Madrid me sent¨ª un extra?o¡±, explic¨® Odegaard en The Players Tribune, recordando la alienaci¨®n que sufri¨® entren¨¢ndose con el primer equipo y compitiendo con el Castilla. ¡°Jugaba sobre seguro. Me preocupaba m¨¢s por no fallar que por hacer mi juego. Y la prensa me critic¨®, caro. No hay t¨¦rmino medio en el f¨²tbol moderno; o eres el mejor fichaje de la historia o eres una mierda¡±.

¡°Solo puedo agradecer al Madrid por haber apostado por un chaval de 16 a?os pero necesitaba un lugar donde establecerme¡±, dijo. ¡°Necesitaba un hogar de verdad. Lo encontr¨¦ en Londres¡±.

Martin Odegaard, la orqu¨ªdea que so?¨® el madridismo, ha florecido en el jard¨ªn de la Premier.

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