Ancelotti y el Liverpool: 40 a?os, cuatro finales y una llamada desde Anfield

El d¨ªa previo a la final que el Milan disput¨® contra el Liverpool en 2007, a Carlo Ancelotti, entonces t¨¦cnico rossonero, se le acerc¨® sobre el c¨¦sped el consejero delegado del club, Adriano Galliani, y le sugiri¨® que no sacara de titular a Pippo Inzaghi. El entrenamiento del delantero estaba siendo un desastre y en todo el curso apenas sumaba nueve goles. Le solt¨® como alternativa a Alberto Gilardino, que llevaba 16 y hab¨ªa marcado en las semifinales con el United saliendo desde el banquillo. ¡°Inzaghi es un animal extra?o, ma?ana podr¨ªa ser su noche¡±, le respondi¨® Carletto, seg¨²n el relato que el propio Galliani hizo en el libro Liderazgo tranquilo, del preparador italiano.

Dicho y hecho. Un doblete suyo coron¨® a los milanistas (2-1) y, no menos importante, hizo que Ancelotti y toda la entidad se sacudiese el trauma de lo ocurrido ante los reds dos a?os antes en una de las finales m¨¢s recordadas, cuando les levantaron el 3-0 del descanso. Un episodio imposible de esquivar en el expediente de todos los protagonistas. ¡°Carlo se recrimin¨® a s¨ª mismo haberse bloqueado y no haber tenido los resortes para resolver la situaci¨®n. De esa experiencia aprendi¨® que hay que ser m¨¢s flexible y menos dogm¨¢tico¡±, apunta una persona cercana al hoy entrenador del Madrid sobre aquel episodio l¨ªmite.

Ese fue el punto m¨¢s dram¨¢tico de una relaci¨®n personal con el Liverpool muy dif¨ªcil de replicar, por lo prolongada en el tiempo (40 a?os) y su gran intensidad. Incluso con la ciudad, donde pas¨® el confinamiento m¨¢s duro.

Mientras algunos grandes nombres cierran su carrera, dentro y fuera del campo, sin ninguna final de Champions, ¨¦l cuenta cuatro solo frente al Liverpool. Empez¨® mal como jugador (baja en el 84 con la Roma por una grave lesi¨®n de rodilla y derrota) y continu¨® peor con el batacazo en Estambul en 2005, aunque despu¨¦s logr¨® enderezarse. Sus deseos de cruzarse lo antes posible con el Liverpool se cumplieron pronto (se pas¨® la 2006-07 pendiente de las victorias de los reds para reencontrarse con ellos); su apuesta por Inzaghi lo alivi¨® pese a las sugerencias de los despachos; y hace nueve meses entre Courtois y Vinicius le dieron un regalo inesperado en Par¨ªs. Ahora, el duelo de octavos (este martes, ida en Inglaterra; 21.00, Movistar Liga de Campeones) vuelve a reunir a estos enemigos ¨ªntimos.

Pero Anfield tambi¨¦n pudo ser su casa despu¨¦s de salir del Bernab¨¦u en 2015. Los due?os americanos del Liverpool acababan de despedir a Brendan Rogers a principios de octubre, ten¨ªan al equipo d¨¦cimo en la Premier y, adem¨¢s de J¨¹rgen Klopp -finalmente elegido-, entre sus opciones figur¨® Ancelotti. Desde el entorno del entrenador blanco aseguran que, cuando esa llamada se produjo, las conversaciones con el Bayern para la pr¨®xima campa?a ya estaban avanzadas.

Hab¨ªa recibido tambi¨¦n ofertas del Milan y la federaci¨®n italiana, pero su idea, a?aden, era tomarse un a?o sab¨¢tico hasta su aterrizaje en M¨²nich el siguiente verano, irse a Vancouver, operarse de una hernia que le adormec¨ªa una mano y aprender alem¨¢n para cuando llegara el momento de sustituir a Pep Guardiola en Baviera. El anuncio de su desembarco en el Allianz y la salida del catal¨¢n se produjo ese diciembre de 2015, con una antelaci¨®n y una transparencia muy extra?as de ver en el m¨¢s alto nivel. El tiempo suficiente para que el estudio del alem¨¢n en su retiro canadiense diera sus primeros frutos en la presentaci¨®n con el club germano.

Anfield no fue su hogar, pero s¨ª a?os m¨¢s tarde la ciudad de Liverpool, donde vivi¨® el estallido de la pandemia y lo peor de su primera parte. Un condimento m¨¢s a esta relaci¨®n tan estrecha. All¨ª lleg¨® en diciembre de 2019, apenas diez d¨ªas despu¨¦s de ser despedido del N¨¢poles, para fichar por el Everton, cuyo estadio se encuentra a solo un kil¨®metro y medio del recinto red. Las calles de los Beatles, no obstante, apenas las pudo pisar por culpa de la reclusi¨®n obligada que se precipit¨® poco despu¨¦s. Una visita a un par de restaurantes italianos en el escaso tiempo que tuvo de normalidad y luego a resguardo en casa.

El Liverpool, c¨®mo no fue, fue uno de sus primeros rivales, en la tercera ronda de la FA Cup, y cay¨® pese a que Klopp no dispuso de Salah, Man¨¦, Firmino, Van Dijk, Allison o Alexander-Arnold. Se desquit¨®, eso s¨ª, el curso siguiente, en la Premier, con el primer triunfo del Everton en Anfield (0-2) en 22 a?os y del que este lunes se cumplieron dos a?os.

Despu¨¦s de cuatro finales de Champions, esta eliminatoria de octavos convertir¨¢ al Liverpool en el segundo conjunto no italiano al que m¨¢s se ha enfrentado como entrenador (llegar¨¢ a los 19 choques; dos m¨¢s suma ahora con el Atl¨¦tico). Con el Madrid, lejos de las malas experiencias iniciales, siempre ha ganado: 1-0 y 0-3 en la fase de grupos de la 2014-15, y la ¨²ltima final de Par¨ªs.

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