La llama rosa de Evenepoel incendia el Giro de Italia

El fuego se combate con m¨¢s fuego, que le roba el ox¨ªgeno, y Remco Evenepoel es fuego bajo la lluvia, una llama rosa que desciende estrepitosa por las carreteras tortuosas de la Basilicata pobre, mezcla de asfaltos, viejo, nuevo, curvas contraperaltadas, para combatir hacia Melfi las emboscadas que traza el Giro. La emboscada soy yo, puede proclamar el belga, patr¨®n del Giro, y a su rueda todos luchan para mantener el equilibrio, unos cuantos caen, muchos levantan el pie, y Primoz Roglic, oportunista iluso, intenta robarle la bonificaci¨®n de la meta volante a 10 kil¨®metros del final. El esloveno lanza a Bouwman para que le abra camino, pero Evenepoel, un rayo, se cuela entre ambos y descorazona al rival, que pliega.

Despu¨¦s, el fuego del l¨ªder que tanto impone se apaga. Arde el de los sprinters que han sobrevivido a duras penas las dos ¨²ltimas subidas y el descenso, Pedersen, Matthews, Groves. Han pasado m¨¢s de 200 kil¨®metros de una etapa que no termina, como parece que tampoco quiere terminar el ¨²ltimo kil¨®metro, y los ciclistas parecen haber entrado en los surcos de la concha de un caracol, una curva sin salida hasta que, a falta de 250 metros, una cuesta imponente, una aceleraci¨®n de Matthews, el rostro cubierto de barro negro, victoria. Pedersen, el hombre que ama la lluvia, y bajo un diluvio gan¨® el Mundial ingl¨¦s del 2020, ha saltado antes; el australiano, el ciclista que ama los finales salvajes, ha calculado mejor, y le remonta. Tercera victoria de etapa en el Giro de Mathews, que ya se visti¨® de rosa el d¨ªa de 2014 en el que Purito Rodr¨ªguez se rompi¨® la cadera en la ascensi¨®n a Monte Cassino. Hac¨ªa 300 d¨ªas que no ganaba una carrera Bling Matthews, as¨ª apelado por su exuberancia y su amor por los colgantes de oro, campe¨®n del mundo amateur en 2010, en su Geelong, Australia. La ¨²ltima, el aeropuerto de Mende del pasado Tour. Ninguno de los siete espa?oles que corren el Giro entr¨® en el pelot¨®n.

Cuando se cay¨®, y casi muere, Evenepoel en un descenso de Lombard¨ªa en agosto de 2020, no hubo quien no dijera que ese chico era muy bueno, pero que ten¨ªa un problema con los descensos, que nunca llegar¨ªa a nada porque no sab¨ªa ir en pelot¨®n, que no controlaba. ?Qu¨¦ se iba a esperar de uno, se dec¨ªa, que hab¨ªa sido futbolista hasta los 17 y hab¨ªa saltado de j¨²nior a profesional sin tiempo para aprender el oficio? Tres a?os despu¨¦s, y Evenepoel acaba de cumplir 23, el belga es campe¨®n del mundo y ense?a a los italianos c¨®mo correr en Italia, el summum del arte cicl¨ªstico. ¡°Hay que estar muy concentrado todo el tiempo. En estos d¨ªas largos, si te distraes es cuando la puedes cagar, y m¨¢s si llueve¡±, dice Evenepoel, que, con sus compa?eros Vervaeke y Cattaneo solo apareci¨® por cabeza al comienzo del descenso decisivo, e impuso su ritmo. ¡°Conoc¨ªa bien el final. He estudiado todos los finales de las etapas que no parecen importantes, porque es donde puede haber sorpresas¡±.

Como si tuviera 40 a?os, y 20 de campe¨®n, Evenepoel ya no aprende, imparte cursos magistrales, hace vacilar la fe de quien le desaf¨ªa y hasta a?ade un segundo a su ventaja en una etapa de nada. Y nada m¨¢s terminar la tercera etapa comienza a desplegar sus ense?anzas sobre la cuarta, la del martes en los Apeninos de Campania, los montes Picentinos, siempre en el sur, tan verde, la ascensi¨®n al Lago de Laceno, 1.050 metros, en la que le gustar¨ªa perder, moment¨¢neamente, la maglia rosa, para quitarle carga de trabajo a su Soudal. ¡°Pero, bueno, vamos a ver. El plan es ese, pero no le podemos dejar la maglia a un corredor que pueda ser peligroso y quiera disputar el Giro¡±, dice Evenepoel, deseoso de hacer como hizo Miguel Indurain en el Giro del 93 y no solo se quit¨® un peso de encima sino que adem¨¢s se gan¨® para siempre el amor y la ayuda generosa del beneficiario, el proletario italiano Bruno Leali, y su equipo, el Mercatone Uno. ¡°La maglia rosa sigue siendo la maglia rosa y tienes muchas ventajas y beneficios. El trabajo extra despu¨¦s de la carrera es lo ¨²nico negativo, pero por otro lado tienes una mejor posici¨®n en el pelot¨®n. Siempre puedes tomar el control de la carrera t¨² mismo con el equipo. Pero s¨ª, ya veremos en la subida. Es una etapa dura. Depender¨¢ de qui¨¦n vaya en la escapada, claro¡±.

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