Osasuna y Arsenio: l¨¢grimas por la clase obrera del f¨²tbol

¡°No soy navarro, pero tengo el mismo ADN. Me dieron hostias, pero resist¨ª y no tirar¨¦ nunca la toalla¡±, aseguraba en una reciente entrevista en este diario el jugador del Osasuna Chimy ?vila, de origen argentino. Ya lo explic¨® otro navarro cabez¨®n, David Beriain, en un art¨ªculo en 2020: el equipo por el que pregunt¨® al tel¨¦fono desde los lugares m¨¢s rec¨®nditos del mundo, entre talibanes y soldados, narcos y sicarios, tiene ¡°alma de pueblo¡±: ¡°Una identidad que, siendo tan propia, no excluye a nadie. No hace falta haber nacido en la curva de la estafeta para tenerla. Pueden haberte parido en Rosario y que corra por tus venas porque es el alma de los luchadores, de los que conocen el valor de lo que cuesta. Es el alma de quien ha tenido que poner un plato en la mesa colocando ladrillos o agachando el ri?¨®n para coger esp¨¢rragos¡±.

El texto se public¨® en la revista Panenka un a?o antes de que su autor fuera asesinado en Burkina Faso junto al c¨¢mara Roberto Fraile. Al releerlo hoy aparecen expresiones casi id¨¦nticas a las que Chimy, hijo del hombre que llevaba el pan de ladrillos a casa, emplea tres a?os despu¨¦s en la entrevista. Son las pruebas gen¨¦ticas. Uno era reportero, el otro es futbolista; Uno naci¨® en un pueblo de 1.700 habitantes, Artajona, y otro en una barriada peligrosa a 10.000 kil¨®metros de Espa?a. Pero los dos son, como se autodefin¨ªa el argentino, ¡°fuego por dentro¡±; compart¨ªan esa clase de c¨®digos universales que nacen, crecen y se reproducen en cualquier parte del mundo, siempre en el terreno f¨¦rtil de las grandes pasiones.

Dice Chimy: ¡°Mi padre [alba?il] siempre me dijo que hay tres cosas que el ser humano puede ganar r¨¢pido, pero que a la vez es muy f¨¢cil perderlas: el respeto, el cari?o y la humildad. De mi madre tom¨¦ la valent¨ªa y la pureza, la sinceridad y esas ganas de luchar d¨ªa tras d¨ªa¡±.

Dec¨ªa David: ¡°Osasuna es la f¨¢bula con la que los navarros aprendemos desde peque?os los valores que definen a nuestro pueblo: entrega, honestidad, compromiso, humildad, esfuerzo. Osasuna es la par¨¢bola de los talentos. Es mi padre, Javier, dici¨¦ndome: ¡®En la vida s¨¦ lo que quieras ser, pero s¨¦ el mejor que puedas ser. No mejor ni peor que otros, eso no importa. El mejor que t¨² puedas ser¡±.

Dice Chimy: ¡°No cambio una tarde de sol en casa por nada, el disfrutar con mi mujer, con la que estoy desde los 14 a?os. Algunas personas me dicen: ¡®Podr¨ªas tener a la mujer que quieras¡¯. Pero les digo: ¡®Ya, pero ella pas¨® hambre y ha llorado conmigo¡±.

Dec¨ªa David de la afici¨®n del Osasuna: ¡°Gente que podr¨ªa cantar a coro con Barricada: Cuando se aprende a llorar por algo, tambi¨¦n se aprende a defenderlo¡±.

Dice Chimy: ¡°Las cicatrices son de guerreros. Yo solo tengo miedo a defraudar a la gente que est¨¢ conmigo¡±.

Dec¨ªa David: ¡°Osasuna es la sabidur¨ªa que solo traen las cicatrices, el honor de las heridas, la dignidad del trabajo (...) Aqu¨ª la parroquia no te va a juzgar por el resultado, porque ganar o perder solo es una consecuencia casi accidental de algo mucho m¨¢s importante. Aqu¨ª te van a mirar a la frente por si te guardaste algo, por si te qued¨® alguna gota de sudor por derramar¡±.

Cuando el f¨²tbol habla de superligas, de pretemporadas o torneos en pa¨ªses remotos con mucho dinero y pocas libertades, a menudo no se expande, encoge. Porque se deshumaniza. Si la afici¨®n se transmite de padres a hijos; si no todos los ni?os tienen la camiseta de Messi o de Ronaldo; si un argentino de Rosario puede expresarse de la misma manera que un navarro cabez¨®n es porque el f¨²tbol es, en efecto, una f¨¢bula, un cuento. En la final de la Copa del Rey contra el Madrid, Osasuna era Cenicienta, David contra Goliat. Y los rojillos terminaron, escribi¨® Pepe S¨¢mano, ¡°con las piernas acalambradas y el coraz¨®n chupado¡±.

No se guardaron nada.

La v¨ªspera de ese duelo desigual muri¨® Arsenio Iglesias, inspirador de otra epopeya: el superd¨¦por. Un busto suyo frente al mar, al igual que la estatua de Mar¨ªa Pita, la hero¨ªna coru?esa que hizo que la Armada Invencible se diera la vuelta, sigue defendiendo hoy una hermosa idea, la que inculc¨® Javier Beriain a su hijo: intenta ofrecer siempre la mejor versi¨®n de ti mismo. Era f¨¢cil llorar el s¨¢bado con Jagoba Arrasate, que llev¨® a La Cenicienta al baile final con el Rey, y en 1994 con Arsenio, O Bruxo, que perdi¨® una liga en el ¨²ltimo minuto. Tambi¨¦n hay clase obrera en el f¨²tbol. Y da gusto verlos trabajar.

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