?lvaro Mart¨ªn se retira del atletismo tras ganar un oro y un bronce en los Juegos Ol¨ªmpicos de Par¨ªs 2024

Poco despu¨¦s de que Mar¨ªa P¨¦rez, su pareja en la conquista ol¨ªmpica de Par¨ªs, aquella medalla de oro a cuatro pies en el relevo mixto, le impusiera la medalla de Extremadura en el imponente Teatro Romano de M¨¦rida, el marchador ?lvaro Mart¨ªn, vestido de traje y corbata verde Extremadura, se dirigi¨® al estrado, despleg¨® unos papeles y comenz¨® un discurso de ocho minutos que cerr¨® con un anuncio sorprendente: su despedida del atletismo como vigente campe¨®n ol¨ªmpico y mundial. ¡°Anuncio que los Juegos Ol¨ªmpicos de Par¨ªs fueron mi ¨²ltima competici¨®n como deportista profesional. Lo siento mucho, Mar¨ªa, s¨¦ que te hubiera gustado que dijera algo diferente, pero es as¨ª¡±, dijo.

El atleta de Llerena solo tiene 30 a?os y la gente del deporte se pregunta el motivo de esta decisi¨®n. ?Por qu¨¦ dejar la marcha en lo m¨¢s alto? ?Por qu¨¦ renunciar a una cantidad de dinero, la suma de todas sus becas y ayudas, que puede superar los 150.000 euros anuales? La respuesta solo la tiene ?lvaro Mart¨ªn, que de momento ha elegido guardar silencio, aunque se especula con que volver¨¢ a Madrid para coronar sus estudios despu¨¦s de haber completado Derecho y Ciencias Pol¨ªticas. ¡°Para la formaci¨®n que quiero hacer a nivel acad¨¦mico necesito un tiempo que el entrenamiento de m¨¢ximo nivel no me permite¡±, dijo en una entrevista con el Peri¨®dico de Extremadura.

Otro cambio en su vida. El primero, uno especialmente duro, lo dio siendo un adolescente de 15 a?os. El atleta dej¨® Llerena, su pueblo, en Badajoz, para instalarse en Madrid en el Centro de Alto Rendimiento. Su hermano mayor, que iba a empezar en la universidad, tambi¨¦n estaba en la capital, pero los primeros meses sinti¨® el peso de la soledad y la a?oranza. No se arrug¨®. Luego vino otro, determinante, cuando dej¨® Madrid en 2021 para irse a Cieza (Murcia) a aprender de Jos¨¦ Antonio Carrillo, el sabio entrenador que le ha guiado hasta los dos t¨ªtulos mundiales ¡ªfue campe¨®n de 20 y 35 km marcha en Budapest, en 2023¡ª y las dos medallas ol¨ªmpicas ¡ªoro en el relevo mixto y bronce en los 20 km¡ª.

?lvaro Mart¨ªn vio sus logros, que ya era campe¨®n ol¨ªmpico, mundial y europeo, y decidi¨® buscar nuevos alicientes. El atleta pacense habl¨® de lo bonito que es ganar y subir al podio, pero se hizo una pregunta. ¡°?Para qu¨¦? ?Es ganar por ganar lo ¨²nico importante en la vida? La respuesta es un no rotundo. M¨¢s all¨¢ de vencer est¨¢ influir, influenciar de manera positiva¡±. Y valor¨® mucho haber demostrado que se puede ser un campe¨®n desde Murcia o Extremadura, tierra de conquistadores, como record¨® en un parlamento de calado en el que le dio tiempo, incluso, a reclamar ¡°un tren digno¡± para su comunidad aut¨®noma.

El campe¨®n en Par¨ªs record¨® que no le mueven la gloria, los reconocimientos, ¡°ni mucho menos el dinero¡±. Siempre se ha distinguido como un tipo audaz, un deportista que se ha atrevido a criticar p¨²blicamente a las federaciones nacional e internacional porque ve¨ªa peligrar el futuro de la marcha. Sus valores han sido tan importantes y valiosos como sus medallas. El esfuerzo, m¨¢s importante que el talento. ¡°Yo dudo que estuviera destinado a esto (recibir la medalla de Extremadura), ni para ser campe¨®n ol¨ªmpico. Reniego de haber tenido unas cualidades f¨ªsicas por encima del resto. ?nicamente he tenido mucho trabajo, sacrificio y una pizca de suerte. Nada m¨¢s¡±.

De Tokio a Par¨ªs

Tambi¨¦n ha sido obstinado. En el verano de 2021 sali¨® herido de Tokio despu¨¦s de haber logrado un cuarto puesto que le dej¨® a las puertas del podio. Fue uno de esos momentos en los que una persona se replantea todo. Se hace preguntas, como si vale la pena todo el esfuerzo. Si no ser¨¢ mejor dejar de intentarlo. Pero la reflexi¨®n solo le hizo m¨¢s fuerte, m¨¢s tozudo, m¨¢s hambriento. Y entonces llegaron sus mejores a?os. Ya hab¨ªa sido campe¨®n de Europa entren¨¢ndose en Madrid junto a Jos¨¦ Antonio Quintana, su anterior t¨¦cnico. Pero lo mejor estaba por llegar con esos dos t¨ªtulos mundiales y ese par de medallas ol¨ªmpicas que premiaron, de paso, a Carrillo, el maestro de la marcha en su Cieza del alma. El hombre al que su alumno le mand¨® una carta para que el entrenador la leyera, ya en Par¨ªs, horas antes de competir en los 20km marcha. Porque un deportista tambi¨¦n se puede alimentar de romanticismo.