Luis Rubiales, en el banquillo: claves del juicio por el beso no consentido y las presuntas coacciones a Jennifer Hermoso

La Audiencia Nacional se prepara para acoger a partir de este 3 de febrero uno de los juicios que mayor expectaci¨®n medi¨¢tica ha levantado dentro y fuera de Espa?a. Luis Rubiales, expresidente de la Real Federaci¨®n Espa?ola de F¨²tbol (RFEF), se sienta en el banquillo acusado de un delito de agresi¨®n sexual por el beso no consentido que le dio a la futbolista Jennifer Hermoso tras la final del mundial femenino de f¨²tbol de 2023, as¨ª como por las supuestas coacciones posteriores que impuls¨® para tratar de que la jugadora justificara en p¨²blico su actuaci¨®n.

El Juzgado Central de lo Penal, dirigido por el magistrado Jos¨¦ Manuel Clemente Fern¨¢ndez-Prieto, ha reservado tres semanas para el desarrollo de esta vista oral, que acoger¨¢ el desfile como testigos de algunas de las principales figuras del f¨²tbol mundial femenino (como las jugadoras Alexia Putellas, Irene Paredes, Misa Rodr¨ªguez y Laia Codina; y la entrenadora Montse Tom¨¦) y del actual t¨¦cnico de la selecci¨®n espa?ola masculina, Luis de la Fuente. El tribunal ha programado que el juicio, que prev¨¦ que acabe el 19 de febrero, arranque con la declaraci¨®n de Hermoso este mismo 3 de febrero. Seg¨²n fuentes jur¨ªdicas, se ha acordado que Rubiales y los otros tres acusados sean interrogados tras los testigos ¡ªpor tanto, varios d¨ªas despu¨¦s¡ª.

?Qu¨¦ se juzga? El magistrado instructor Francisco de Jorge, que asumi¨® la investigaci¨®n del caso, delimit¨® los hechos que deber¨¢n analizarse durante estas semanas. Seg¨²n expuso el magistrado, el 20 de agosto de 2023, durante la entrega de medallas a las futbolistas de la selecci¨®n espa?ola tras la final del mundial celebrada en S¨ªdney, Rubiales ¡°sujet¨® la cabeza¡± de Jennifer Hermoso ¡°con ambas manos, a la altura de los o¨ªdos¡±: ¡°Y, de manera sorpresiva e inesperada, propin¨® un beso en los labios de la jugadora, que no se apercibi¨® de la intenci¨®n del querellado de besarla en los labios ni dio su consentimiento para ello¡±.

¡°Hermoso, desconcertada y sorprendida por el inesperado beso en los labios, no tuvo tiempo de reaccionar¡±, describi¨® el juez instructor al concluir sus pesquisas, cuando remach¨®: ¡°La jugadora trat¨® de restarle importancia en un primer momento y continuar celebrando el hist¨®rico triunfo de la selecci¨®n. No obstante, conforme iban pasando las horas, la euforia del triunfo fue dando paso al malestar y al sentimiento de haber sido ofendida por la acci¨®n antes relatada, malestar que fue en aumento ante las presiones de Luis Rubiales y de su c¨ªrculo para que p¨²blicamente manifestase que el beso hab¨ªa sido consentido¡±.

Fue a partir de entonces cuando, seg¨²n el sumario, el entonces presidente de la RFEF puso en marcha una bater¨ªa de artima?as para presionar a la futbolista. Esas presuntas coacciones comenzaron en el propio S¨ªdney (Australia), siguieron en el vuelo de vuelta a Espa?a y continuaron durante los d¨ªas posteriores de festejos.

?Qui¨¦nes se sientan en el banquillo? A Rubiales le acompa?ar¨¢n otras tres personas en el banquillo por su presunta participaci¨®n en las coacciones desplegadas contra Hermoso: Albert Luque, exdirector de la selecci¨®n masculina y exfutbolista (jug¨® en el Deportivo de la Coru?a y con la selecci¨®n espa?ola absoluta, entre otros equipos); Jorge Vilda, exentrenador de la selecci¨®n femenina; y Rub¨¦n Rivera, exresponsable de marketing de la Federaci¨®n.

Sobre ellos, entre otros aspectos, el juez instructor Francisco de Jorge destac¨® lo siguiente: ¡°[Rubiales] pidi¨® a Vilda que hablase con el hermano [de Hermoso] para convencerla de que participase en la realizaci¨®n de un video [afirmando que el beso hab¨ªa sido consentido]. Vilda busc¨® en el avi¨®n a Rafael Hermoso y en el curso de la conversaci¨®n le advirti¨® de que, si su hermana no acced¨ªa a participar en el v¨ªdeo, su negativa tendr¨ªa consecuencias negativas para ella y experimentar¨ªa perjuicios en su carrera profesional como futbolista¡±. ¡°A pesar de la clara negativa de Jennifer Hermoso, con expresi¨®n de su hartazgo, Rub¨¦n Rivera le insisti¨® de manera reiterada para que hablase con Albert Luque, tambi¨¦n con la intenci¨®n de insistirle para que participara en el v¨ªdeo¡±.

Aquellas fueron solo las primeras maniobras. Seg¨²n el sumario, las presiones continuaron durante d¨ªas y se prolongaron en el viaje que las futbolistas hicieron a Ibiza para celebrar el t¨ªtulo. Siempre a instancia de Rubiales, Rivera y Luque insistieron a Hermoso para que respaldara en p¨²blico al presidente de la RFEF. Ambos contactaron con ella de forma ¡°persistente¡± para tratar de conseguir el objetivo (¡°Luque se person¨® en el hotel intentando forzar a Jennifer a hablar con ¨¦l para convencerla de participar en el v¨ªdeo¡±, subray¨® el juez), y ampliaron sus intentonas a su c¨ªrculo m¨¢s pr¨®ximo. Por ejemplo, Luque envi¨® el siguiente texto por WhatsApp a una amiga de Hermoso: ¡°Me parece tan injusto lo que se le est¨¢ haciendo a Luis. Me parece de tanta bajeza humana la actitud de Jenni... Tan poca empat¨ªa y humanidad... Un simple gesto: quitarle a una persona [el] marr¨®n m¨¢s grande de su vida [...] Solo le deseo en la vida, que le devuelva lo que le est¨¢ haciendo pagar a una persona injustamente¡±.

?Qui¨¦nes acusan? Los cuatro procesados tendr¨¢n enfrente a tres acusaciones: la p¨²blica (representada por la Fiscal¨ªa de la Audiencia Nacional), la particular (ejercida por Jennifer Hermoso) y la popular (desempe?ada por la Asociaci¨®n de Futbolistas Espa?oles, AFE).

?A qu¨¦ penas se enfrentan? La Fiscal¨ªa reclama para Rubiales una sentencia de dos a?os y seis meses de c¨¢rcel (un a?o de prisi¨®n por la agresi¨®n sexual, y otro a?o y medio por las coacciones). Tambi¨¦n pide que se le inhabilite para el ejercicio de una ¡°profesi¨®n relacionada con el ¨¢mbito deportivo durante el tiempo de condena¡±, y se le impongan dos a?os de libertad vigilada y una orden de alejamiento de 200 metros de Jennifer Hermoso durante cuatro a?os. El ministerio p¨²blico solicita, a su vez, que indemnice a la futbolista con 50.000 euros por el beso, y con otros 50.000 euros por las presiones ¡ªeste segundo montante, a abonar junto a los otros tres acusados, para quienes se exige un a?o y medio de reclusi¨®n¡ª.

La deportista y la AFE piden una pena de c¨¢rcel similar para los cuatro procesados, seg¨²n el auto de apertura de juicio oral. Aunque la jugadora reclama que la orden de alejamiento se ampl¨ªe a 500 metros.

?C¨®mo se defiende Rubiales? La estrategia del expresidente de la RFEF ha tenido siempre un eje principal: defender que el beso que propin¨® a Hermoso fue consentido, fruto de una ¡°manifestaci¨®n de euforia, de m¨¢xima alegr¨ªa y satisfacci¨®n¡± por la victoria en el Mundial. ¡°Esto no es que alguien ha llevado a una oficina a alguien a escondidas, a darle un beso por la fuerza. Es que fue algo tan natural, a la luz de millones de ojos, entre dos personas que han estado conviviendo mucho tiempo...¡±, se justific¨® durante su declaraci¨®n como imputado ante el juez, donde remach¨®: ¡°No hay nada autorizado ni desautorizado, son comportamientos dentro de una celebraci¨®n extraordinaria¡±.

Seg¨²n la versi¨®n del exmandatario, despu¨¦s de que ambos se abrazaran y se besaran en las mejillas, ¨¦l le pregunt¨® si le pod¨ªa dar ¡°un besito¡± y ella contest¨® ¡°vale¡±. Cuando lo hizo, seg¨²n su tesis de defensa, la jugadora no mostr¨® ¡°rechazo, incomodidad o contrariedad¡±. Adem¨¢s, Rubiales niega que ¡°ordenase¡± a sus subordinados para que presionasen a la jugadora para que lo salvara en p¨²blico.

?Qui¨¦nes declaran como testigos? El tribunal ha reservado seis d¨ªas para interrogar a m¨¢s de una veintena de testigos y a tres peritos. Entre ellos, adem¨¢s de Jennifer Hermoso, destacan las futbolistas Alexia Putellas, Irene Paredes, Misa Rodr¨ªguez y Laia Codina; los seleccionadores Tom¨¦ y De la Fuente; y actuales y antiguos altos cargos de la RFEF (como Rafael del Amo). Tambi¨¦n est¨¢ programado que declaren el hermano de Hermoso y sus amigas, que vivieron las presuntas coacciones. Para sostener su tesis de defensa, Rubiales ha pedido que testifiquen dos de sus hijas porque estuvieron en la final y viajaron de vuelta en el avi¨®n a Espa?a.

?Por qu¨¦ se juzga en la Audiencia Nacional? En septiembre de 2023, la Fiscal¨ªa decidi¨® dar un paso adelante y present¨® una querella contra Rubiales en la Audiencia Nacional. El ministerio p¨²blico, que ya incid¨ªa entonces en la ¡°situaci¨®n de hostigamiento¡± que hab¨ªa padecido la futbolista, explicaba que este ¨®rgano judicial ten¨ªa las competencias para asumir la investigaci¨®n (y juzgar posteriormente el caso), ya que el supuesto delito lo hab¨ªa cometido un espa?ol en el extranjero ¡ªel beso que desat¨® todo se produjo en S¨ªdney, que acogi¨® la final del Mundial¡ª. Adem¨¢s, la v¨ªctima tambi¨¦n es espa?ola y no se hab¨ªa abierto ning¨²n procedimiento penal en Australia sobre los hechos.