El Madrid pierde ante el Fenerbah?e su primer partido en la Euroliga: 100-99

Euroliga jornada 11

Fenerbahce

100 99

Finalizado

Real Madrid

El campe¨®n perdi¨® su primer partido en la Euroliga de la manera m¨¢s loca. Despu¨¦s de 10 victorias consecutivas en el campeonato europeo, el Madrid cay¨® en la pista del Fenerbah?e en el ¨²ltimo segundo de una pr¨®rroga y por 100-99. El destino fue cruel para Facundo Campazzo, que despu¨¦s de firmar el mejor encuentro de su carrera en la Copa de Europa perdi¨® un bal¨®n que propici¨® la remontada turca. El base argentino se despidi¨® con 33 puntos (11 canastas sin fallo en los tiros de dos) y siete asistencias, pero en la ¨²ltima posesi¨®n qued¨® ahogado por la defensa del conjunto de Itoudis, su bal¨®n largo lo recuper¨® el rival y Madar volte¨® el marcador cuando solo quedaban ya seis d¨¦cimas en el reloj. El Madrid cedi¨® su primer encuentro en el torneo en medio del marat¨®n, despu¨¦s de arrasar al Maccabi en su exilio en Belgrado y antes de una doble y exigente cita la pr¨®xima semana con sus visitas seguidas al Olympiacos y al Panathinaikos. El conjunto de Chus Mateo domin¨® gran parte del choque, incluso por una renta de 14 puntos, impulsado por la chistera de Campazzo, pero prob¨® por primera vez la derrota en Europa. Un triple terminal de Wilbekin le hab¨ªa arrastrado a un tiempo extra que debi¨® jugar sin Tavares, eliminado por cinco faltas, y esa acci¨®n final acab¨® por condenarle.

El mates de Tavares, esta vez al rebote de una penetraci¨®n de Deck, es ya un cl¨¢sico en los inicios del Madrid, la canasta que suele abrir el repertorio blanco. Al descorche del p¨ªvot se uni¨® en breve la locomotora del conjunto de Chus Mateo, Facundo Campazzo. Las incursiones hacia el aro del base argentino fueron como cuchillos penetrando la mantequilla. El Fenerbah?e intentaba sacar a Tavares de la cueva con el im¨¢n de Papagiannis, un tallo de 2,20m, pero su amenaza en el tiro exterior no result¨®. El conjunto de Itoudis percuti¨® con la mu?eca de Calathes, inteligente siempre para mover la orquesta, y de Guduric, para anticipar alguna apretura para los visitantes (11-10). Mateo hab¨ªa apostado por Deck y Ndiaye en el comienzo para reforzar el rebote, aunque todo gir¨® alrededor del m¨¢s peque?o del conjunto espa?ol. Campazzo coleccionaba un acierto tras otro, imparable en sus r¨¢pidos avances hacia el aro y en el triple. El Madrid apret¨® el acelerador a fondo y emergi¨® con un parcial de 0-10. Por encima de todos, Campazzo celebr¨® 16 puntos en el primer cuarto, tantos como todo el Fenerbah?e junto: 16-29. Itoudis se desesperaba.

El Madrid hab¨ªa arrancado la tarde como la noche del martes ante el Maccabi, un cicl¨®n en ese primer tramo en que deja encaminada la faena y obliga al contrario a viajar a remolque. La ruleta de los cambios entra luego en acci¨®n. Sergio Rodr¨ªguez, Abalde, Rudy, Hezonja y Poirier compusieron un nuevo quinteto en los blancos, s¨ªntoma de una plantilla amplia y con todas las piezas al menos de notable. La segunda unidad mantuvo los pu?os en alto, aunque el encuentro era ya m¨¢s parejo. Tambi¨¦n m¨¢s bronco y espeso. La hinchada comenz¨® a apretar y el partidos a detenerse por las faltas y el videoarbitraje. El ritmo era otro, m¨¢s lento. El Madrid picaba con su nueva conexi¨®n base-p¨ªvot, la del Chacho con Poirier, aunque los muelles de Motley, la mu?eca de Madar y una mejor defensa turca apretaron la cita (32-35 tras un 10-0). Campazzo regres¨® a la cancha. Tambi¨¦n Tavares. El duelo al que regresaron iba en otra direcci¨®n, pero igual le da al Facu, que roba, corre, asiste, anota... El argentino tiene la capacidad de hacer suyos los encuentros, de manejar el reloj. El tim¨®n blanco dio el ¨²ltimo apret¨®n en defensa y en ataque, y el Madrid cogi¨® aire antes del descanso (37-44).

Una incursi¨®n de Hayes-Davis y dos triples, de Guduric y Madar, caldearon la atm¨®sfera en el Ulker Sports Hall mientras el equipo de Chus Mateo aguantaba el tipo con los palmeos de Tavares (45-48). La torre carg¨® sin embargo con la tercera falta personal y enfil¨® el banquillo. Todo el peso volv¨ªa a recaer en Campazzo, que no fallaba una. El choque se mov¨ªa ya en distancias muy cortas. En medio del incendio apareci¨® Llull con una de esas incre¨ªbles canastas que tanto ha coleccionado en su carrera, un triple (y lleg¨® a los 600 en la Euroliga) cay¨¦ndose hacia atr¨¢s que a?adi¨® a la falta para el 51-58. Los dos equipos intercambiaron aciertos (Musa, Deck, Guduric, Madar) a falta del ¨²ltimo envite (59-67).

Quer¨ªa correr el Madrid para matar el encuentro. Poirier pidi¨® la palabra en defensa y Musa dio un paso al frente en ataque. Tiene el conjunto blanco a secundarios que puede ser protagonistas. El campe¨®n se manten¨ªa en esa ventaja c¨®moda que le permit¨ªa el cuerpo a cuerpo mientras ca¨ªan los segundos (61-74). Chus Mateo no se confiaba pese a todo y mantuvo sudando a Campazzo hasta que el argentino no pod¨ªa m¨¢s y descans¨® unos segundos resoplando en el banquillo cuando los deberes parec¨ªan casi hechos. Wilbekin caz¨® entonces un triple acrob¨¢tico para un ¨²ltimo apret¨®n: 72-78. El t¨¦cnico blanco dio carrete a Sergio Rodr¨ªguez, en la pista junto a Llull y Rudy, la vieja guardia unida de nuevo. Tocaba remar porque Tavares cometi¨® la quinta falta con m¨¢s de tres minutos por delante. Un triple de Calathes al filo de la posesi¨®n levant¨® a la grada (77-81). Guduric y Wilbekin continuaron picando y el Fenerbah?e tuvo incluso bola para ponerse por delante por primera vez en el encuentro. El partido se decid¨ªa en una baldosa. Campazzo, qui¨¦n si no, manej¨® el ritmo y la pelota, y anot¨® dos tiros libres. Wilbekin firm¨® el 87-87 con un triple a falta de 9,7 segundos y el encuentro desemboc¨® en la pr¨®rroga.

En el tiempo extra, Llull congel¨® al pabell¨®n con otra mandarina imposible, Campazzo conect¨® con Deck, y Guduric respondi¨® desde el triple. Hayes-Davis dio la primera renta en el encuentro al Fenerbah?e tras un tap¨®n a Deck y un reverso en el tablero contrario (94-92). Volvi¨® a acudir Campazzo al rescate, primero con una canasta y luego con un pase largu¨ªsimo a Poirier para el mate. Sin Tavares, el p¨ªvot franc¨¦s parec¨ªa rematar una sufrida victoria blanca (96-98), pero un fallo en el tiro libre de Hezonja abri¨® una peque?a rendija. Con una posesi¨®n de 6,9 segundos, Campazzo qued¨® ahogado en una esquina de la pista en un dos contra uno, perdi¨® el bal¨®n y Madar anot¨® a falta de seis d¨¦cimas. Era el 100-99, la locura turca y la primera derrota del Madrid en la Euroliga.

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