El Arsenal involuciona y tropieza en la Premier
El equipo de Arteta, que alega bajas, empata (2-2) contra un Tottenham mermado y el City le aventaja en cuatro puntos
El Arsenal que hace un a?o lider¨® la Premier en una de las galopadas m¨¢s emocionantes de su historia se estrell¨® contra el Tottenham en el Emirates. En su casa. Ante su p¨²blico jubiloso y sentimental. El derby del norte de Londres, uno de los partidos de mayor tradici¨®n en Inglaterra, acab¨® 2-2 despu¨¦s de un intercambio revelador para los dos equipos. Al cabo de la jornada la clasificaci¨®n se?ala que el Arsenal es quinto con 14 puntos, los mismos que el Tottenham que es cuarto por debajo de Brighton (15), Liverpool (16) y Manchester City, que solo cosecha victorias (18).
El Tottenham acudi¨® al Emirates a contragolpear por la v¨ªa Madison-Heun-ming Son, su estupenda pareja de punta y mediapunta, plet¨®ricos de complicidad. Ange Postecoglou, el entrenador, no tiene jugadores para otra cosa ni pretende otra cosa. Pero lo que se encontr¨® fue que dispuso de la pelota incluso m¨¢s que su sofisticado rival: un 54% del tiempo de acci¨®n. Tanto lo cuantificable como aquello que resulta intangible indica que algo falla en el Arsenal. Algo impide que el bal¨®n gire a la velocidad supers¨®nica de hace un a?o. Odegaard parece m¨¢s solo en los metros decisivos. El mediocampo no acaba de sincronizarse con los atacantes y las dudas en ataque generan inestabilidad en la retaguardia. Mikel Arteta cambia los engranajes en busca de la tracci¨®n perdida, sustituye los cojinetes, la bomba de agua, el alternador y la correa del ventilador. Pero el motor de su equipo sigue emitiendo un ruido inquietante. El Tottenham lo descubri¨® este domingo, como anteriormente lo mostraron el West Ham y el Fulham, todos capaces de hacer chirriar al equipo que hace unos meses asombr¨® a Europa.
El Tottenham procura aprender a vivir sin Harry Kane, su l¨ªder deportivo y espiritual, traspasado al Bayern en verano. Atraviesa una ¨¦poca de reconstrucci¨®n, sostenido por Sarr y Bissouma, dos mediocentros limitados bajo presi¨®n; comandado en defensa por un Romero con m¨¢s lagunas de concentraci¨®n que nunca; y sobreexpuesto a la dependencia de James Madison para emprender cualquier empresa m¨¢s o menos ambiciosa. En este escenario, las en¨¦rgicas maniobras de presi¨®n del Arsenal durante la media hora inicial del partido causaron estragos. Odegaard y Gabriel Jes¨²s son, probablemente, la pareja m¨¢s agresiva del mundo a la hora de estirar al equipo a la caza de la pelota en campo contrario. El Tottenham los sufri¨® porque se vio encajonado, pero las ocasiones que le produjeron no resultaron tan n¨ªtidas.
Vicario, el portero, par¨® tiros a bocajarro de Gabriel Jes¨²s y de Nkettah en la defensa de su primer palo antes de recibir el 1-0 al cabo de un contragolpe. Odegaard abri¨® para Saka y el extremo ingl¨¦s, consentido por Udogie, remat¨® con violencia al meollo del ¨¢rea. La pelota rebot¨® en Romero y fue a la red.
David Raya, la parada de la tarde
El Arsenal no supo explotar la ventaja. Seg¨²n se agotaba el primer tiempo y Odegaard y Gabriel Jes¨²s dosificaban sus esfuerzos defensivos, el Tottenham sinti¨® que se aflojaban las ataduras que lo ce?¨ªan a su ¨¢rea. Madison dirigi¨® las operaciones de avance y los desmarques de Son y Kulusevski crearon paredes y desorden. Del revuelo en la defensa local se aprovech¨® el joven Brennan Johnson para obligar al espa?ol David Raya a completar la parada de la tarde. El portero se desplaz¨® de palo a palo para tapar el tiro de Johnson desde el punto de penalti. Fue el primer remate a quemarropa que detuvo en una secuencia de disparos que acab¨® en el gol de Son, sublime, a un toque adelant¨¢ndose a Saliba que no le concedi¨® m¨¢s ¨¢ngulo que una ranura. Ah¨ª puso el pie el coreano para desviar el pase de Madison al segundo palo y anotar el 1-1.
La reacci¨®n de Arteta en el descanso sorprendi¨® a todos. El vasco quit¨® a Declan Rice, el jugador m¨¢s caro de la historia del club, 120 millones de euros, para poner a Jorginho; y sustituy¨® a Fabio Vieira, un interior, por Havertz, un jugador indefinible que si por algo no se defini¨® fue por sus habilidades como interior. Le lastran la inconstancia, las distracciones, y el peso de un cuerpo demasiado grande para los desplazamientos largos repetidos. Con ¨¦l en el mediocampo, el Arsenal gir¨® en c¨ªrculos. El 2-1, se?alado v¨ªa VAR por mano de Romero a la salida de un c¨®rner mal defendido, fue un espejismo de remontada. Al minuto siguiente sucedi¨® lo impensable: saque de centro del Arsenal, desconcierto de Jorginho con la pelota en los pies, robo de Madison y gol de Son. El 2-2, m¨¢s que un accidente, fue la constataci¨®n de una realidad. Despu¨¦s de 200 millones gastados en el mediocampo el pasado verano (Havertz m¨¢s Rice), el equipo que roz¨® la ¨²ltima liga inglesa no acaba de evolucionar.
Arteta: ¡°Hemos echado en falta a cinco grandes jugadores¡±
¡°Rice ten¨ªa problemas de espalda¡±, explic¨® Arteta tras el partido. ¡°Se encontraba realmente inc¨®modo; hoy hemos echado en falta a cinco grandes jugadores¡±, a?adi¨®, en referencia a Partey, Trossard y Martinelli, todos lesionados.
Ange Postecoglou se dio el lujo de sustituir a sus dos jugadores imprescindibles, Madison y Son, asistente y goleador, a falta de 20 minutos para el final. Ambos estaban golpeados y daban muestras de cansancio. El partido se estir¨® hasta el minuto 100. Para fortuna, y tambi¨¦n para desgracia del Arsenal, obligado a exhibir sus carencias ante una afici¨®n rendida a la fe ciega. El equipo ya no juega tan f¨¢cil, ni tan r¨¢pido, ni es tan preciso como en otros tiempos, y mucho menos si sale Gabriel Jes¨²s y entra Nelson.
El 2-2 en el Emirates debi¨® aliviar a Guardiola. El s¨¢bado, el t¨¦cnico catal¨¢n observ¨® con alarma c¨®mo Rodri, su jugador m¨¢s fiable, se hac¨ªa expulsar contra el Nottingham Forest (2-0) por coger del cuello a Gibbs White. Rodri, castigado con roja directa por acci¨®n violenta, podr¨ªa ser baja por sanci¨®n ante el Arsenal, que recibe al City el domingo 8 de octubre. ¡°Estoy enfadado¡±, dijo Guardiola. ¡°Espero que [Rodrigo] aprenda a controlar sus emociones¡±.
En otros partidos de la jornada el Chelsea de Pochettino perdi¨® (0-1) con el Villa de Emery y se descolg¨® al puesto 14? de la clasificaci¨®n. El Liverpool se impuso al West Ham (3-1) en Anfield y se mantiene firme en la persecuci¨®n del City. El Brighton de De Zerbi escal¨® al 3? puesto de la tabla tras vencer (3-1) al Bournemouth de Iraola, que se desploma al borde de los puestos de descenso (17?).
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