Un presidente de la RFEF que no nos averg¨¹ence

El TAD ha dictaminado que Pedro Rocha no puede convocar elecciones a la asamblea de la Federaci¨®n, sino s¨®lo para nombrar sucesor de Luis Rubiales, como presidente de la gestora que es. Responde as¨ª a la denuncia de un personaje singular y justiciero que habita la periferia de nuestro f¨²tbol, Miguel Gal¨¢n, al que apodan querell¨¦itor porque sale al cruce en todo tipo de cuestiones, como un ecologista exagerado.

Esta era una cuesti¨®n mayor. El intento de Rocha lo dise?¨® el gran Rasput¨ªn de Rubiales, Tom¨¢s Gonz¨¢lez Cueto, cuya influencia en el TAD ya vemos que afortunadamente ha mermado, aunque sigue pesando demasiado en la desnortada Federaci¨®n, a la que sirve desde su bufete de abogados. Rocha, presidente de la extreme?a, fue entresacado por el dedo de Rubiales de entre su numerosa corte de vicepresidentes (Rafael del Amo presidente de la navarra, Pablo Lozano, de la andaluza, Joan Soteras, de la catalana, Salvador Gomar, de la valenciana, Elvira Andr¨¦s, Antonio Su¨¢rez ex de la canaria y Miquel Bestard, ex de la mallorquina), para que pilotara la Federaci¨®n durante su ausencia, que preve¨ªa equivocadamente corta, pensando en una inhabilitaci¨®n de meses. Ocurri¨® la noche de su dimisi¨®n, de la que a la ma?ana siguiente se desdir¨ªa. Design¨® a Rocha como presidente de la gestora ¡°para convocar elecciones despu¨¦s de los Juegos¡±.

Lo fiaba largo, y Rocha ha aprovechado este tiempo para ponerse c¨®modo. Mare¨® a V¨ªctor Francos para convencerle de que las dos elecciones se pod¨ªan reducir a una, porque sus pelotas le auguraron que ser¨ªa su camino m¨¢s seguro para perpetuarse. Ahora se lo han pinchado y ha de hacer lo que exige la norma. Esto plantea una primera duda: determinadas decisiones que ha tomado en este tiempo, como los despidos o la renovaci¨®n del seleccionador, ?son v¨¢lidas?

Todos los presuntos aspirantes est¨¢n ahora ante una disyuntiva: ?ir a esta primera elecci¨®n o esperar a la de la asamblea? En uno y otro caso, a quien quiera que se presente resulta imprescindible contar con un fuerte n¨²mero de apoyos entre los presidentes regionales.

?Por qu¨¦ deciden tanto, si s¨®lo son 19 en una asamblea de 143 miembros? En ella, aparte de 12 del f¨²tbol-sala y 3 del f¨²tbol-playa hay 108 de f¨²tbol a secas, divididos entre clubes (49), jugadores (32), entrenadores (10) y ¨¢rbitros (11); en cada apartado hay profesionales y no profesionales. De estos ¨²ltimos, que dependen directamente de su presidente regional, hay 29 clubes, 19 jugadores, 10 entrenadores y 7 ¨¢rbitros. O sea, 65. Que con los 19 califas suman 84. Mayor¨ªa holgada.

Ese es el truco que permite a la Federaci¨®n ser desde hace a?os un ente cerrado, donde unos pocos se cocinan todo. Mirados de lejos, son un colectivo borroso. Mirados de cerca, la mayor¨ªa arrastra pleitos o sospechas fundadas de alg¨²n gatuperio, bien de tipo econ¨®mico, de irregularidad en las elecciones que le elevaron ah¨ª, de abuso de poder, de alguna mancha pol¨ªtica en el pasado en alg¨²n caso¡­ Para echarse a temblar si pensamos que entre ellos deciden qui¨¦n va a dirigir una Federaci¨®n que maneja los s¨ªmbolos nacionales en escenarios de m¨¢xima exposici¨®n.

La novedad es que ante esta nueva elecci¨®n est¨¢n desunidos. Los implicados en la Operaci¨®n Soule, aquella por la que pas¨® por la c¨¢rcel ?ngel Mar¨ªa Villar, se agrupan en torno a Rocha, porque esperan protecci¨®n de ¨¦l y del Rasput¨ªn Gonz¨¢lez Cueto. Entre el resto hay al menos dos tendencias, pero sin acuerdo entre ellas. Digamos que contra Rocha est¨¢n a d¨ªa de hoy Asturias, el Pa¨ªs Vasco, las dos Castillas, Valencia, Baleares, la mitad de Canarias y en principio tambi¨¦n Andaluc¨ªa.

Puede presentarse cualquiera y ha habido personajes de calado que han tanteado, y algunos que han manifestado su prop¨®sito expl¨ªcitamente: Carlos Herrera y Eva Parera. Entre los del tanteo se puede citar a Mateu Alemany, Rami Aboukhair, Carlos Su¨¢rez o Javier Lozano. Mateu Lahoz ha hecho sonar su propio nombre para s¨ª mismo y su mecanismo de autobombo. (¡°Si ¡®el f¨²tbol¡¯ me lo pide¡­¡±).

Por un lado, Rocha, que ha establecido una paz beneficiosa con LaLiga y sue?a con atraer como CEO a Rami Aboukahir, hombre de excelentes relaciones con Tebas. Por otro lado, alguna figura que pueda aglutinar al resto, en cuyo caso habr¨ªa partido. Pero deber¨ªa ser externo, porque entre ellos hay pugnas por la primac¨ªa.

Y, al fondo, un Mundial en Espa?a compartido con Marruecos y Portugal, que exige que al frente de la Federaci¨®n haya alguien que al menos no nos averg¨¹ence.

Puedes seguir a EL PA?S Deportes en Facebook y X, o apuntarte aqu¨ª para recibir nuestra newsletter semanal.