Ancelotti: ¡°Vinicius debe controlar m¨¢s la presi¨®n del ambiente; lo har¨¢ porque es humilde e inteligente¡±
El brasile?o, que se perder¨¢ el pr¨®ximo partido tras ver la octava amarilla del curso, decide otro partido con su sexto gol en los cuatro ¨²ltimos encuentros
El paso del Madrid por El Sadar dej¨® la dosis de estos d¨ªas del ventilador de Vinicius, el jugador que nunca descansa, ni cuando el ¨¢rbitro se?ala el descanso. El brasile?o, el m¨¢s pitado cuando el equipo blanco se baj¨® del autob¨²s una hora y media antes del partido, tiene tiempo para todo. Doblete, una tarjeta con castigo doble, c¨¢nticos ofensivos contra ¨¦l¡ Otro encuentro que dio para otro peque?o desplegable alrededor de su figura. Momento Vinicius, que se apunt¨® el decimoctavo tanto del curso, 12 desde enero y seis en los ¨²ltimos cuatro duelos, ya a dos del sancionado Jude Bellingham. En el 85, relevado por Arda G¨¹ler, Ancelotti lo abraz¨® largamente con una sonrisa y le dedic¨® unas palabras al o¨ªdo (que luego evit¨® desvelar) mientras el tendido le lanzaba la ¨²ltima pitada.
¡°Es un jugador determinante. Eligi¨® y atac¨® muy bien sin bal¨®n. Es en lo que m¨¢s ha mejorado¡±, valor¨® Carlo Ancelotti, que ahora le pide que pise m¨¢s los pasillos centrales. ¡°Intento jugar m¨¢s por dentro para marcar m¨¢s goles. El m¨ªster me da esa libertad¡±, coment¨® el brasile?o. Un nuevo rol que, como admiti¨® Jagoba Arrasate, supone una complicaci¨®n extra para los contrarios. ¡°Ahora no juega tan pegado a la banda y en esas posiciones interiores es m¨¢s dif¨ªcil de defender. Hoy fue un dolor de muelas, no lo voy a ocultar¡±, analiz¨® un entrenador local muy tocado con la endeblez de los suyos.
Pero la sesi¨®n vespertina de Vini tambi¨¦n dej¨® el ruido de todo lo dem¨¢s: la ofensa de la grada, y su roce con los contrarios y el ¨¢rbitro. Ancelotti, sin explayarse mucho, s¨ª desliz¨® un mensaje en esa direcci¨®n. ¡°La presi¨®n que tiene en el ambiente debe controlarla un poco m¨¢s. En esa faceta, puede mejorar y lo har¨¢. Es un chico humilde, serio e inteligente¡±, afirm¨® el italiano. Su colega Arrasate, muy contrariado por la blandura rojilla, no quiso saber nada del asunto y apunt¨® a la prensa. ¡°Somos un equipo honesto y honrado, pero hoy no lo hemos podido frenar. Si hay ruido alrededor de ¨¦l, no es por la gente del f¨²tbol¡±, zanj¨® el t¨¦cnico local sobre un asunto que camina en paralelo a su gran influencia futbol¨ªstica.
La centrifugadora de Vini se concentr¨® en una hora sin tregua. Todo fue muy r¨¢pido. Se la birl¨® al infantil Catena en el 0-1. Poco despu¨¦s del empate, fall¨® un mano a mano ante Sergio Herrera. La zona de grader¨ªo sur, donde se sit¨²an los aficionados m¨¢s radicales, le cant¨® a coro ¡°Vinicius mu¨¦rete¡±. El ¨¢rbitro le sac¨® amarilla (octava del a?o en todas las competiciones) tras varias protestas, se perder¨¢ el partido frente al Athletic y ya no volver¨¢ a jugar con el Madrid hasta la ida de Champions contra el City. La grada (esta vez entera) le grit¨® ¡°tonto, tonto¡±. Cuando iba camino de los vestuarios, en el intermedio, se quej¨® a una c¨¢mara por la tarjeta, lo que llev¨® a Brahim a apartarlo del foco. Y en la celebraci¨®n del 1-4, volvi¨® a encararse con la grada, aunque no tan retador como en Mestalla. Un no parar de goles, ocasiones, pitadas y gritos contra ¨¦l. Pura agitaci¨®n en un d¨ªa en que El Sadar no dej¨® de mostrar su rechazo al racismo a trav¨¦s de mensajes de megafon¨ªa y de una camiseta que llevaron los jugadores de Osasuna a la salida al campo.
¡°Valientes pero fr¨¢giles¡±
En medio del ruido, nadie sac¨® m¨¢s tajada que ¨¦l de una defensa osasunista que fue mantequilla en punto pomada. Arrasate, que no contaba por lesi¨®n con David Garc¨ªa (se qued¨® fuera de la lista de la selecci¨®n), se hab¨ªa forrado con tres centrales, pero de nada le vali¨® con errores tan alevines como el del 0-1. En el 1-2, Carvajal remat¨® solo con el exterior dentro del ¨¢rea. El 1-3 y el 1-4 terminaron de abrir en canal una zaga que iba desnuda. ¡°Fuimos valientes, pero fr¨¢giles¡±, resumi¨® un abatido Arrasate.
En la previa, los dos entrenadores hab¨ªan tomado sus precauciones defensivas. Tambi¨¦n Ancelotti, que sum¨® todos los cent¨ªmetros posibles en el centro de la zaga para protegerse del cuarto equipo de la Liga que m¨¢s centros met¨ªa al ¨¢rea: 21,5 de media por partida y 16,2 solo en acciones de jugada. Releg¨® a Nacho (1,80), que no pasa por sus mejores d¨ªas, y baj¨® a Tchouameni (1,88) para unirlo a R¨¹diger (1,90). Como hab¨ªa dejado caer el italiano en las ¨²ltimas semanas y por mucho que el franc¨¦s haya mostrado su descontento por ejercer de central, el pivote no solo iba a estar en la defensa cuando no hubiera otra opci¨®n. La medida, sin embargo, no le vali¨® para evitar recibir el primer gol del campeonato en un c¨®rner. Despej¨® mal Carvajal, el m¨¢s bajo de la zaga (1,73), y descompens¨® el escudo. Un empate que ocurri¨® tras el 0-1 de Vini y antes de un mano a mano errado por Vini. Son los tiempos de Vinicius.
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