El derbi de Dani Olmo
La actuaci¨®n del centrocampista, autor de dos goles, result¨® definitiva para el Barcelona, que se vio sorprendentemente superado por el Espanyol en una segunda parte alterada por los cambios de Flick
El derbi fue una cuesti¨®n personal y no de dos equipos opuestos y, sin embargo, familiarizados con Montju?c, terreno de juego hoy del Bar?a y campo del Espanyol desde 1997 hasta 2009. El contencioso se resumi¨® en la figura de Dani Olmo. Hasta que jug¨® Olmo, el Barcelona fue el equipo contundente y fiable de siempre, l¨ªder indiscutible de la Liga. El marcador era de 3-0 cuando Olmo fue sustituido por Ferm¨ªn y el partido vir¨® a favor del Espanyol. No supieron jugar los azulgrana sin Olmo. Apareci¨® por sorpresa un equipo desconocido y desganado, alejado de la porter¨ªa contraria y que no par¨® de hacer concesiones en la propia a un envalentonado Espanyol. Los blanquiazules marcaron el gol del honor y el resultado final dignific¨® su actuaci¨®n cuando la hinchada barcelonista suspiraba por una goleada m¨¢s despu¨¦s de las contadas ante el Sevilla, el Bayern de M¨²nich y el Real Madrid.
El 3-1 no dej¨® satisfechos del todo a los azulgrana ni tampoco a los blanquiazules, ni siquiera a los aficionados neutrales si los hab¨ªa en el estadio ol¨ªmpico, m¨¢s mustio que de costumbre en una tarde desagradable por el aire y sin ganas de celebraciones despu¨¦s de la tragedia de la dana y las im¨¢genes que llegaban de Paiporta. El derbi no fue ajeno al dolor de Valencia y el encuentro hubiera pasado de puntillas si no hubiera aparecido Dani Olmo, mientras Ferran Torres no tuvo ni siquiera ¨¢nimo para acudir a Montju?c. La tristeza fue contagiosa antes, despu¨¦s y durante un encuentro que certific¨® la diferente altura del Bar?a y el Espanyol, que ya suma 27 derbis sin ganar, derrotado desde los tiempos en que Lo Pelat, hoy agente de muchos j¨®venes de La Masia, conquist¨® de blanquiazul el Camp Nou en 2009.
Flick toca muy poco la alineaci¨®n desde la derrota de Pamplona, la ¨²nica en la Liga, segunda si se suma a la de M¨®naco. Los cambios son escasos y sutiles, condicionados por el momento f¨ªsico de los futbolistas que salen de una lesi¨®n como Olmo, que ha calzado como un guante en el equipo de Flick. El regreso del volante fue tan deslumbrante y efectivo como su debut en Vallecas. Olmo sentenci¨® el derbi en media hora con dos goles, uno con un tiro inapelable despu¨¦s de una asistencia preciosa de Lamine con el exterior de su zurda, y el segundo con un remate franco desde el balc¨®n del ¨¢rea, habilitado por Balde. Olmo est¨¢ o llega, siempre se presenta para culminar la jugada, indetectable en el frente de ataque y como tercer centrocampista, autor ya de cinco tantos en cinco partidos que ha disputado de Liga.
La omnipresencia de Olmo, un futbolista con mucha cintura y buen pie, rebaj¨® la luminosidad de Pedri, m¨¢s retrasado en su posici¨®n aunque muy participativo en el juego, y de Lewandowski, que ofici¨® de abridor ante el Espanyol. La pelota sal¨ªa limpia y precisa de las botas de Lamine y de Casad¨®, asentado como mediocentro, excelente en el pase para el desmarque de Raphinha que supuso el 2-0 en medio de los dos tantos de Olmo. El brasile?o atac¨® el espacio y toc¨® el cuero sobre la salida de Joan Garc¨ªa, el portero que m¨¢s para de Europa. Aunque Manolo Gonz¨¢lez mont¨® un trivote en la medular, el Espanyol no supo c¨®mo defender con 10 ni atacar solo con Puado. La l¨ªnea del fuera de juego tan recurrente y resolutiva de los azulgrana acab¨® con las expectativas blanquiazules cuando el VAR anul¨® por mil¨ªmetros un gol de Jofre con 2-0.
La abundancia azulgrana contrastaba con la precariedad blanquiazul por las muchas ausencias que posibilitaron el debut del Bauza. El Bar?a, tan eficaz en la elaboraci¨®n como en la recuperaci¨®n, penaliz¨® las distracciones y los errores individuales del Espanyol. Ya resuelto el partido, la rueda de cambios empez¨® poco despu¨¦s del descanso, y en escena aparecieron De Jong y Ferm¨ªn por Casad¨® y Olmo. La variedad de centrocampistas es tan amplia como interesante mientras que el tr¨ªo de delanteros y la pareja de centrales parecen fijos para Flick.
Las sustituciones, sin embargo, rompieron la fluidez azulgrana y el Espanyol no par¨® de rematar hasta alcanzar el 3-1, marcado por Puado, despu¨¦s de tres goles anulados por fuera de juego despu¨¦s de mediar el VAR. El equipo de Gonz¨¢lez compiti¨® mucho mejor y encontr¨® la espalda de una zaga barcelonista que presentaba la ¨²nica novedad de H¨¦ctor Fort por Kound¨¦. El Espanyol mostr¨® la imagen m¨¢s fl¨¢cida y vulnerable del Bar?a, que no puede parar de atacar si se quiere parecer al Bar?a, al menos al Bar?a de Flick. Los azulgrana no encontraban el hilo del pase, reiterativos en las p¨¦rdidas, y su falta de concentraci¨®n y sincronizaci¨®n en defensa era tan manifiesta como su poca presi¨®n para llegar hasta Garc¨ªa.
La tensi¨®n acab¨® por ser tan baja que contagi¨® a la Grada de Animaci¨®n. El partido se consumi¨® sin que marcaran Lewandowski ni Cheddira. No hubo m¨¢s protagonista que Dani Olmo. El derbi se acab¨® con su sustituci¨®n ante la conformidad de Montju?c.
Clasificaci¨®n | PT | PJ | PG | PE | PP |
---|---|---|---|---|---|
1
BCN
|
33 | 12 | 11 | 0 | 1 |
2
RMA
|
24 | 11 | 7 | 3 | 1 |
3
ATM
|
23 | 12 | 6 | 5 | 1 |
4
VLL
|
21 | 11 | 6 | 3 | 2 |
5
OSA
|
21 | 12 | 6 | 3 | 3 |
Clasificaci¨®n | PT | PJ | PG | PE | PP |
---|---|---|---|---|---|
15
LEG
|
11 | 12 | 2 | 5 | 5 |
16
GET
|
10 | 12 | 1 | 7 | 4 |
17
ESP
|
10 | 12 | 3 | 1 | 8 |
18
LP
|
9 | 12 | 2 | 3 | 7 |
19
VAD
|
8 | 12 | 2 | 2 | 8 |
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.