Brasil se encomienda a Vinicius en su eliminatoria m¨¢s pobre

¡°No da para ser optimista¡±, dice Tost?o. El m¨¢s profundo de los analistas del f¨²tbol brasile?o, el hombre que se puso la camiseta n¨²mero nueve para que Pel¨¦ llevara la diez en la Copa del Mundo de 1970, la m¨¢s hermosa de siempre, Eduardo Gon?alves de Andrade, alias Tost?o, emite una sentencia. El juego de esta selecci¨®n de Brasil no permite abordar con garant¨ªas las eliminatorias que conducen al Mundial de 2026. Los resultados refuerzan su visi¨®n: cinco victorias, cuatro derrotas y dos empates ¡ªapenas 1,5 puntos por jornada¡ª constituye la peor cuenta en la clasificaci¨®n mundialista de la historia de la selecci¨®n m¨¢s exitosa. Un equipo que un d¨ªa se aferr¨® a Pel¨¦, a Garrincha, a Ronaldinho, a Ronaldo o a Neymar, y en la noche del martes al mi¨¦rcoles (1:30 horas, Movistar) se medir¨¢ a Uruguay en Bah¨ªa encomend¨¢ndose a Vinicius J¨²nior.

Igual que en el Real Madrid, en Brasil el ataque bascula en torno a Vinicius. Como hace Ancelotti, el seleccionador Dorival J¨²nior ha asegurado un modelo que suministra al extremo que juega por la izquierda m¨¢s balones que a nadie. Primero, porque ning¨²n atacante dispone de m¨¢s minutos de juego en igualdad de condiciones f¨ªsicas, y segundo porque Vinicius es, seg¨²n Opta, el extremo brasile?o que m¨¢s pelotas recibe por unidad de tiempo: 183 en 460 minutos. Martinelli (76 en 186), Luiz Henrique (69 en 172), Savinho (82 en 205), o Rodrygo (387 en 846 minutos) no gozan de iguales prerrogativas. De momento con escaso efecto, pues Vinicius no suma ni un gol en los siete encuentros de eliminatoria que lleva disputados camino de USA 2026, aunque este detalle no altere el discurso de Dorival. ¡°Vinicius mereci¨® el Bal¨®n de Oro porque ¨¦l ha sido el jugador m¨¢s letal¡±, dice.

Vinicius no est¨¢ solo. Brasil tiene algunos de los mejores defensas del planeta ¡ªGabriel Magalhaes, Marquinhos, Bremer¡ª, tiene interiores so?ados por Guardiola ¡ªPaquet¨¢ o Guimaraes¡ª, y tiene la n¨®mina de atacantes de primer nivel m¨¢s numerosa de Am¨¦rica. Pero juega mal. El empate (1-1) ante Venezuela, el jueves pasado, coloca a la selecci¨®n en el cuarto puesto de la tabla por debajo de Argentina, Uruguay y Colombia, y a un solo punto de Ecuador y Paraguay, quinto y sexto respectivamete, en un formato que clasifica a seis equipos de diez directamente. El margen m¨¢s amplio de siempre. Unas facilidades que preve¨ªan un festival y que no han hecho m¨¢s que exhibir la penuria. Solo en las eliminatorias del Mundial de 2002 se vio a una canarinha tan sufrida. Aquel equipo de Luiz Felipe Scolari era una oda al pelotazo, pero entonces solo se clasificaban cuatro de diez y Brasil concluy¨® la liguilla tercero, con un promedio de goles y puntos superior al que registra actualmente.

¡°Pido a los hinchas que no abandonen a la selecci¨®n brasile?a¡±, reclam¨® Marquinhos este fin de semana. ¡°Los que estamos aqu¨ª nos ponemos esta camiseta con mucho orgullo, fe, esperanza y dignidad¡±. El capit¨¢n enton¨® su plegaria. El prestigioso analista Paulo Vinicius Coelho le replic¨® inmediatamente: ¡°Los hinchas no abandonaron a la selecci¨®n, pero la Confederaci¨®n Brasile?a de F¨²tbol abandon¨® a los hinchas¡±.

Hace dos d¨¦cadas que el juego de Brasil decepciona tanto como la corrupci¨®n en el seno de una federaci¨®n que se gu¨ªa m¨¢s por los principios del comercio que del deporte. Dorival, el l¨ªder del proyecto clasificatorio, nombrado tras el intento fallido de reclutar a Ancelotti, seg¨²n fuentes de la CBF, ha convocado a 25 atacantes en menos de un a?o, y esto no incluye a Lino, el jugador del Atl¨¦tico, uno de los extremos por izquierda m¨¢s regulares de Europa. A Dorival lo asaltan las dudas pero no duda de Vinicius, a pesar de que con ¨¦l Brasil suma cinco puntos de 18 y sin ¨¦l ha ganado 12 de 15.

¡°No daremos espect¨¢culo de un d¨ªa para otro¡±, dice Dorival. ¡°Pero evolucionamos¡±. Uruguay en Fonte Nova lo pondr¨¢ a prueba.