Antonio Cazorla, el entrenador que perdi¨® el sitio en Arabia Saud¨ª cuando llegaron los millones

La prudencia le impide a Antonio Cazorla (Granada, 58 a?os) asegurar que es el entrenador espa?ol con m¨¢s experiencia en Arabia Saud¨ª; pero, si no es ¨¦l, no anda muy lejos. ¡°Uno de los que m¨¢s, sin duda¡±, apunta. ¡°Han sido siete temporadas desde 2013 en cinco clubes¡±, a?ade. En el Al-Ettifaq, ¨¦l fue el ¨²ltimo t¨¦cnico antes de la llegada al banquillo de Steven Gerrard en el verano de 2023, el momento de la gran explosi¨®n del mercado del f¨²tbol saud¨ª impulsada por el Gobierno local que ha terminado sacando de rueda a este preparador que hab¨ªa ejercido, sobre todo, de asistente. Desde entonces, no ha vuelto.

¡°Mi sensaci¨®n es que si ese mundo no hubiera pegado tanto cambio, seguir¨ªa trabajando all¨ª. De hecho, lo m¨¢s normal es que hubiese continuado como primer entrenador en Al-Ettifaq¡±, asegura Cazorla, uno de esos t¨¦cnicos que hicieron carrera en las carreteras secundarias y, de un plumazo, se ha visto fuera de foco en su principal campo de acci¨®n justo cuando empezaron a llover los millones. ¡°Entrar hoy en su Primera Divisi¨®n es muy complicado para un t¨¦cnico de mi nombre [Jorge Jes¨²s, Stefano Pioli, Laurent Blanc, M¨ªchel y Gerrard son algunos de los que est¨¢n ahora]. Buscan una marca internacional, no solo meritocracia, salvo algo muy puntual de un club que gire el rumbo de forma temporal y se lo acepten. All¨ª todo est¨¢ muy controlado. Conozco otros entrenadores extranjeros que les ha pasado lo mismo. Esta temporada, adem¨¢s, han eliminado dos equipos en las estructuras de los clubes, el de reservas y el ol¨ªmpico, y eso supone menos t¨¦cnicos¡±, explica Cazorla, que reconoce que, despu¨¦s de tantos a?os all¨ª, si tuviera que regresar, el aterrizaje personal le resultar¨ªa tan normal como mudarse a Madrid.

Cazorla fue el ¨²ltimo preparador del Al-Ettifaq antes del fichaje de Steven Gerrard

En el verano de 2023, el de su adi¨®s mientras all¨ª llegaban Benzema y Neymar para acompa?ar a Cristiano Ronaldo, tuvo un par de ofertas, pero su club de entonces, Al-Ettifaq, le pidi¨® que le aguantara un poco porque los dirigentes todav¨ªa no sab¨ªan qu¨¦ iba a pasar con el equipo dentro del gran terremoto que se estaba cociendo en la Liga. ¡°Les di ese margen de tiempo, pese a que era un riesgo, porque estaba a gusto, me conoc¨ªan y hab¨ªamos hecho un final de temporada muy bueno¡±, explica por videollamada desde Palma, su actual residencia. Hasta que entr¨® el man¨¢ de dinero, apareci¨® Gerrard en su lugar y ¨¦l se qued¨® sin sitio: las propuestas hab¨ªan caducado y tuvo que volverse a Espa?a. Luego, reconoce, podr¨ªa haberse buscado un hueco en el organigrama de alguna entidad o en una cantera. ¡°Pero a m¨ª el cuerpo me ped¨ªa entrenar¡±, insiste. ¡°No tengo la ilusi¨®n de meterme en el f¨²tbol formativo, llevo a?os alejado de ¨¦l. Tampoco he querido ser asistente de cualquiera. En el tiempo que lo he sido, el 90% he tenido libertad absoluta y he sido como un primer entrenador¡±, se reivindica este preparador, que arranc¨® su vida en los banquillos en las categor¨ªas inferiores del Mallorca, y luego pas¨® por el Levante y Atl¨¦tico Baleares antes de mirar a Asia.

¡°Yo no les reprocho nada, me siento afortunado de haber pasado por su Liga¡±, cuenta Antonio Cazorla, que mantiene la puerta abierta, aunque admite que ahora ¡°cuesta cerrar acuerdos porque hay mucha gente esperando a ir y existen muchos intereses¡±.

La mala idea de desayunar a las nueve

Adem¨¢s de trabajar en Al-Ettifaq, lo hizo en el Al-Shoulla (en ambos en dos etapas), Al-Raed, Al-Ain y Al-Fateh. Su estreno en 2013, dentro del cuerpo t¨¦cnico de Juan Jos¨¦ Maqueda, se produjo gracias a la experiencia de los dos en Egipto. ¡°En esas fechas, en Arabia Saud¨ª se miraba mucho a ese mercado. Ir directamente desde Espa?a hubiera sido m¨¢s dif¨ªcil¡±, puntualiza. ¡°Cuando llegamos, era una Liga con recursos econ¨®micos, pero mucho menos profesionalizada en instalaciones, organizaci¨®n de los clubes y estadios¡±, detalla. Una entrada en el mundo musulm¨¢n, ya desde el Ittihad de Alejandr¨ªa, que implic¨® una adaptaci¨®n deportiva y social.

Ahora buscan una marca internacional, no solo meritocracia. S¨¦ de otros casos

¡°Me acuerdo de que un d¨ªa que jug¨¢bamos a las 14.30 convocamos al equipo a desayunar a las nueve. El partido fue un desastre. En esos pa¨ªses, la gente se duerme muy tarde, tienen un rezo por la noche, se despiertan y vuelven a la cama. As¨ª que a las nueve ellos ni ten¨ªan apetito ni hab¨ªan dormido las horas. Ese mundo hay que conocerlo. Otra cosa que nos ocurri¨® es que calentaban 20-25 minutos antes de un encuentro, entraban al vestuario, y los jugadores se quitaban toda la ropa y rezaban 10 minutos. ?Entonces para qu¨¦ hab¨ªan calentado? Antes esas normas eran m¨¢s estrictas, sobre todo en Arabia Saud¨ª. Ahora son m¨¢s flexibles, pero siempre es importante que vean que tratas de adaptarte a ellos¡±, relata Antonio Cazorla, cuya familia siempre se ha quedado en Espa?a mientras ¨¦l entrenaba all¨ª.

No existe una gran cultura de la paciencia en ese f¨²tbol ¡ª¡±pierdes dos o tres partidos y puedes estar en la calle¡±, avisa¡ª, pero es el mundo en el que ¨¦l hizo carrera. ¡°Me gustar¨ªa volver siempre que los proyectos sean interesantes¡±, concluye este t¨¦cnico que ha perdido el sitio en Arabia Saud¨ª.