Bryan Gil descompone al Espanyol
El extremo, con un recital expresado en un gol y dos asistencias, engalana el f¨²tbol del Girona para zamparse a un rival an¨¦mico
Irrefrenable, al fin tan virguero como efectivo, pl¨¢stico y talentoso, tambi¨¦n un gusto para la vista, Bryan Gil descorch¨® su mejor f¨²tbol para retorcer al Espanyol. Un ejercicio que dej¨® por los suelos al equipo blanquiazul y que pone en entredicho la continuidad de Manolo Gonz¨¢lez en el banquillo porque el equipo ni corre ni tira, menos juega; y que alumbr¨® al mejor Bryan. As¨ª se lo reconoci¨® el grupo tras el tercer tanto, cuando recibi¨® en el costado, se marc¨® una pared con Miguel y sac¨® un centro medido para que Miovski pusiera la bota y el gol, el tercero del Girona en apenas 20 minutos, un sopapo tras otro para un Espanyol que no las vio venir. Si bien el delantero macedonio festej¨® el tanto con la pelota bajo la zamarra por una paternidad pr¨®xima, los compa?eros optaron por se?alar y abrazar al extremo, que se bast¨® para descoser a un oponente que desprende olor a podredumbre, sin sinton¨ªa entre el banquillo y el plantel, desconectados y an¨¦micos los jugadores despu¨¦s de tres semanas de reposo, cero gotas de juego e intenciones por m¨¢s que los canteranos reclamen en ocasiones lo contrario.
Una hora antes de que comenzara el encuentro, los hinchas del Espanyol, despreocupados por su permanente castigo a la garganta, entraron en el estadio cantando y bien escoltados por las fuerzas de la seguridad -se hab¨ªa declarado el duelo de alto riesgo-, lejos de la gresca porque dos no se pelean si uno no quiere. Hab¨ªa, de hecho, aficionados mezclados en las inmediaciones alrededor de un caf¨¦ y de conversaciones animosas sobre esta rivalidad de nuevo cu?o, toda vez que ambos equipos se han enfrentado en 11 ocasiones, pero que se disputan el segundo escal¨®n en el podio del f¨²tbol catal¨¢n (tras el Bar?a), antes propiedad blanquiazul y ahora de un Girona que se codea con la ¨¦lite europea. Por lo visto en Montilivi, que antes del duelo puso con tino la m¨²sica de Juego de Tronos, eso es cosa del Girona sin discusi¨®n alguna. Y m¨¢s si Bryan Gil, jugador cedido por el Tottenham, destila su mejor f¨²tbol.
Aunque comenz¨® el encuentro con un sobresalto angustioso -un aficionado sufri¨® un percance de salud en el grader¨ªo que requiri¨® la emergencia de los servicios m¨¦dicos-, la pelota pronto volvi¨® a rodar y lo hizo de forma unidireccional hacia la porter¨ªa del Espanyol, pues el Girona arm¨® una contra tan diligente como mort¨ªfera, desde la derecha a la izquierda, de Miovski a un Bryan Gil que defini¨® con la zurda y de chut cruzado a la red. Bienvenidos al show. Eso entendi¨® el Girona, que fabricaba todos los ataques por su costado, el izquierdo, porque no hab¨ªa quien le diera el alto. El ejemplo fue El Hilali, su pareja de baile, timorato ante tal ebullici¨®n, al punto de que no le entraba sino que retrasaba metros hasta que no le quedara otro remedio que afrontarle, temeroso por quedar retratado ante un nuevo quiebro. Y ese siempre llegaba, habilidoso Bryan para insinuar una cosa con la cintura y hacer la contraria con los pies, capaz de descontar rivales como sumar asistencias para Miovski, que al fin se estren¨® en la Liga tras dos caramelos del extremo. Con una parte -m¨¢s bien media hora- bast¨® para que se zampara al rival, ali?ado con el cuarto tanto de Krejci a la salida de un c¨®rner y tras la prolongaci¨®n de Van de Beek.
No vari¨® el guion tras el descanso, con el Girona como ¨²nico due?o del bal¨®n, coto privado y sociedad limitada, f¨²tbol de altos vuelos que a cada encuentro coge color, hasta cierto punto amoldadas ya las muchas piezas nuevas que llegaron en verano. Jugaba desde atr¨¢s con criterio y generando superioridades, triangulaciones que se le indigestaban a un Espanyol que tras un acto de escarnio decidi¨® presionar. Pero ni con esas eran capaces de tutear a un rival que, como Midas, lo que tocaba lo convert¨ªa en oro. O casi, porque Miovski no aprovech¨® por los pelos una asistencia de Asprilla y Van de Beek chut¨® con el tobillo y torcido ante Joan Garc¨ªa. No sucedi¨® lo mismo en la porter¨ªa rival, cuando el Espanyol trenz¨® al fin una buena jugada, paredes que acabaron en las botas de Puado y de ah¨ª a la red, ob¨²s desde fuera del ¨¢rea para maquillar en lo posible la tarde.
Con la rueda de cambios lleg¨® el reposo del guerrero -Bryan Gil y Miovski fueron sustituidos al son de una entregada ovaci¨®n- y tambi¨¦n la tregua, el Girona con el bal¨®n entre las botas, aunque ya sin profundidad, y el Espanyol m¨¢s afilado y preocupado por reducir las diferencias. No lo consigui¨® y tampoco le interes¨® al aficionado blanquiazul, ya de camino a casa. Le falt¨® f¨²tbol y, sobre todo, un Bryan Gil.
GIRONA, 4 ¨C ESPANYOL, 1
Girona: Gazzaniga; Krejci, David López, Blind; Arnau Martínez, Oriol Romeu, Van de Beek (Iván Martín, m. 59), Miguel Gutiérrez (Selvi, m. 81); Asprilla (Tsygankov, m. 59), Miovski (Stuani, m. 71) y Bryan Gil (Danjuma, m. 71).
Espanyol: Joan García; El Hilali, Sergi Gómez (Kumbula, m. 64), Cabrera, Carlos Romero (Bryan Olivan, m. 46); Tejero (Pol Lozano, m. 81), Bauza (Aguado, m. 64), Král; Jofre; Puado y Alejo Véliz (Cardona, m. 64).
Goles: 1-0. M. 4. Bryan Gil. 2-0. M. 16. Miovski. 3-0. M. 21. Miovski. 4-0. M. 27. Krejci. 1-4. M. 55. Puado.
Árbitro: Hernández Hernández. Mostró la cartulina amarilla a Romero. Puado, Jofre. VAR: Del Cerro Grande.
Estadi Montilivi. 12.461 espectadores.
Clasificaci¨®n | PT | PJ | PG | PE | PP |
---|---|---|---|---|---|
5
ATH
|
23 | 14 | 6 | 5 | 3 |
6
OSA
|
22 | 14 | 6 | 4 | 4 |
7
GIR
|
21 | 14 | 6 | 3 | 5 |
8
MLL
|
21 | 14 | 6 | 3 | 5 |
9
BET
|
20 | 14 | 5 | 5 | 4 |
Clasificaci¨®n | PT | PJ | PG | PE | PP |
---|---|---|---|---|---|
16
ALA
|
13 | 14 | 4 | 1 | 9 |
17
LP
|
12 | 14 | 3 | 3 | 8 |
18
VAL
|
10 | 12 | 2 | 4 | 6 |
19
ESP
|
10 | 13 | 3 | 1 | 9 |
20
VAD
|
9 | 14 | 2 | 3 | 9 |
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.