La afici¨®n del Valladolid vuelca su enfado en el desaparecido Ronaldo
El presidente pucelano se ausenta en una nueva prueba de la escasez de recursos para el milagro que busca Cocca en el colista de Primera
Mbapp¨¦ se ancla en el c¨¦sped, cruza los brazos sobre el pecho y celebra otros tres tantos en su buchaca, su primer hat-trick desde que juega en el Real Madrid. Cu¨¢nto se envidia la opulencia, futbol¨ªstica y econ¨®mica, en la casa del pobre. El Real Valladolid sucumbe ante un Real Madrid a pocas revoluciones, sin necesidad de apretar salvo cuando la estampida ofensiva huele la sangre del d¨¦bil Pucela, presa ideal para engrosar estad¨ªsticas. La v¨ªctima observa, paralizada, el atropello, sin armas para responder y con su hastiado p¨²blico m¨¢s pendiente del palco que del verde porque el espectador ha asumido que hay lo que hay. Abajo saben que no hay remedio, salvo que arriba se activen y le traigan efectivos a Diego Cocca, contratado para una milagrosa permanencia. El t¨¦cnico ruega en sala de prensa y con sus acciones desde el banquillo que le traigan balas para la escopeta de feria que le han puesto en las manos. De momento, varias salidas, m¨¢s rumores de fugas y cero altas. Mal negocio para ni asustar al l¨ªder m¨¢s que con dos ocasiones iniciales, amago de esperanza para la hinchada al poco rato devuelta a la realidad por el 9 rival, dorsal que otrora luci¨® el hombre m¨¢s mencionado del estadio.
S¨ª, en el adversario de hoy jug¨® anta?o el criticado Ronaldo, presidente invisible del Pucela, a quien su pueblo le canta ¡°?D¨®nde est¨¢ el presidente, el presidente d¨®nde est¨¢?¡±, porque no le ven ni el pelo ni el mando: el brasile?o se ha desentendido de Zorrilla, m¨¢s pendiente de aspirar a la Federaci¨®n de f¨²tbol de su pa¨ªs que de resucitar al colista. El astro del balompi¨¦ se llev¨® varias alusiones mayoritarias y rotundas. ¡°?Ronaldo vete ya!¡±, el m¨¢s coreado; de fondo, ¡°?Fuera de Zorrilla, ya no te quiero¡!¡± y alguna lindeza; ¡°?D¨®nde est¨¢ el dinero¡ el dinero d¨®nde est¨¢?¡±, pues la afici¨®n no comprende por qu¨¦ de las m¨²ltiples ventas de su mandato no quedan remanentes para armar una plantilla digna; el general ¡°?Directiva dimisi¨®n!¡±; el orgulloso ¡°?Pucela somos nosotros!¡± y, de fondo, un cartel diciendo ¡°Directiva y c¨®mplices dimisi¨®n¡±. Muchos aficionados han lucido carteles amarillos y chalecos del mismo color para pedir el adi¨®s de Ronaldo, que reconoce sin ambages su af¨¢n por vender la entidad pero sin noticias.
El Real Madrid paseaba por Pucela con Courtois qued¨¢ndose fr¨ªo en el islote de su ¨¢rea, quiz¨¢ escuchando las consignas de la grada. ¡°?Catoria es un in¨²til, es un in¨²til!¡±, se cant¨®, pues Domingo Catoira, director deportivo del club blanquivioleta, no ha tra¨ªdo a nadie en lo que va de mercado invernal pese a la insistencia de Cocca, necesitado de titulares, suplentes o lo que caiga. S¨ª han salido De la Hoz, Meseguer y Juma Bah, sin reemplazo para sendos centrocampistas y un defensa; tampoco hay lateral izquierdo espec¨ªfico. Esta concatenaci¨®n de ausencias conllevan que el Real Valladolid, meritorio colista, haya tirado de dignidad para tratar de detener las embestidas de ese oponente a distancia sideral tanto en las finanzas como en los rendimientos deportivos. Entre las penurias locales, m¨¢s desgracias para culminar el s¨¢bado: el VAR marc¨® un penalti de Mario Mart¨ªn, canterano blanco, que sali¨® expulsado por doble amarilla. El transatl¨¢ntico franc¨¦s se encarg¨® de anotar el definitivo tercer gol, triplete particular porque las estrellas de este negocio nunca pierden momento para demostrar su hambre y por qu¨¦ valen lo que valen y cobran lo que cobran. Aun a costa de un rival blandengue que mira al sue?o de la permanencia d¨ªa a d¨ªa, semana a semana, m¨¢s como quimera que como objetivo real. Para esa guerra necesitan soldados y luego, cuando se cierre este mercado que en Zorrilla se vive como una subasta. El ¨²nico vallisoletano contento, el ni?o que se llev¨® la camiseta de Courtois. Los aficionados del Real Madrid trataron de levantar los ¨¢nimos hundidos de sus rivales de Valladolid: ¡°Pucela es de Primera, es de Primera¡±. De momento.
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