Estados Unidos no puede con Musovic, la meta que lo par¨® todo, y cae eliminada en el Mundial
La portera de Suecia suma hasta 11 paradas durante el partido para desdibujar al equipo norteamericano, apeado por primera vez en su historia antes de semifinales
Hortig se coloc¨® los brazos en jarra y, enfrente de Naeher, le ret¨® con la mirada para alargar el suspense del s¨¦ptimo penalti para Suecia, el que de meterlo le otorgar¨ªa el triunfo y eliminar¨ªa a Estados Unidos, cuatro veces ganadora del Mundial -la mitad del total-, nunca fuera del podio. Un par de pasos y chut a la derecha, donde Naeher puso el guante pero se le dobl¨® la mu?eca, lo suficiente para que la bola fuera a la porter¨ªa. Aunque la norteamericana, de reflejos felinos, la sac¨®. ?O no? Eso protestaba Hurtig, eso reclamaba saber la colegiada. Hasta que el VAR dict¨® sentencia: gol y victoria sueca, castigo para Estados Unidos y gloria para la guardameta Zecira Musovic, un molinillo de brazos que escupi¨® todos los disparos rivales, una gigante con guantes. Por eso todas las compa?eras fueron a abrazarle al acabar la rueda de los lanzamientos desde los 11 metros, llorera incontenible de la verdadera protagonista del encuentro.
Jug¨® Estados Unidos volcada al ataque, arrinconando a Suecia, recordando esa versi¨®n de equipo campe¨®n que no hab¨ªa descorchado todav¨ªa en el Mundial. Pero se top¨® con Musovic, que se desempe?a habitualmente en el Chelsea. Lo intent¨® Trinity Rodman con persistencia, un torbellino por la derecha que romp¨ªa tantas l¨ªneas como caderas. Lo mismo pretendi¨® por el otro costado Sophie Smith, irregular aunque de quiebros el¨¦ctricos. Y tambi¨¦n prob¨® fortuna Horan, que llegaba desde atr¨¢s para sorprender a todos menos a Musovic. Manos aqu¨ª y all¨¢, estiradas para la videoteca -11 realiz¨® durante el duelo- y gritos de confianza, tambi¨¦n palmadas de las compa?eras que observaban ojipl¨¢ticas el show de las manoplas.
Extra?¨® que el t¨¦cnico Vlatko Andonovski sacara del campo a Rodman, la mejor hasta el momento y pusiera a una Williams que, claro, tampoco derrib¨® el muro de Musovic. Nadie pod¨ªa con ella y si algo fallaba, como en ese remate de Horan de cabeza, acud¨ªa el larguero para repeler el esf¨¦rico. Incluso Alex Morgan apareci¨® en los compases finales para conectar un testarazo, para comprobar que la portera sueca de ra¨ªces serbias -sus padres abandonaron el pa¨ªs por la Guerra de los Balcanes en los a?os 90- sacar¨ªa todos los balones. Cosa que se permiti¨® recordarles en la pr¨®rroga. Remate de izquierda de Morgan; zapatazo de Williams; chut de Smith¡ M¨¢s paradas, m¨¢s festejos, m¨¢s abrazos. Por lo que se lleg¨® a la tanda de los penaltis. Fue entonces cuando Musovic repas¨® con el preparador de las guardametas por d¨®nde lanzaban habitualmente las rivales y, de tan concentrados que estaban en la tarea, la portero se perdi¨® el coro de todas las jugadoras suecas, el discurso de uni¨®n. Pero eso a ella no le hac¨ªa falta porque en cada ocasi¨®n que una compa?era acud¨ªa al punto de cal, les entregaba la bola en la mano y les dec¨ªa alguna palabra, las justas para sacarles una sonrisa, para destensarles.
No par¨® penalti alguno Musovic, aliada con los tobillos torcidos de Rapinoe y Smith, tambi¨¦n con el poste en el ¨²ltimo de Ohara. Despu¨¦s actu¨® el VAR y determin¨® que Hurtig hab¨ªa logrado el gol, que la pelota hab¨ªa entrado por mil¨ªmetros pero por completo, que Suecia estaba en cuartos y Estados Unidos en las alcantarillas. Fue entonces cuando todas las jugadoras abrazaron a Musovic, que se puso a llorar sin remisi¨®n. Hab¨ªa sido el basti¨®n sueco, la gigante con guantes. As¨ª que esta arquera graduada en Econom¨ªa, de perfil creativo porque cocina pan de masa madre y tambi¨¦n pinta, con voz en las redes porque se posiciona en contra de la guerra o tira de humor cuando le lanzan comentarios machistas, dentro de unos d¨ªas volver¨¢ a ajustarse los guantes del mismo modo que se llevar¨¢ una bolsa con el botell¨ªn de agua y una toalla blanca a la porter¨ªa, como suele. ¡°Un d¨ªa me convertir¨¦ en la mejor portera del mundo¡±, se?al¨® con 19 a?os, cuando todav¨ªa jugaba en Suecia. No se sabe si lo conseguir¨¢, pero lo que est¨¢ claro es que con ella alcanz¨® para eliminar por primera vez a Estados Unidos antes de una semifinal.
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