Tres horas libres en el trabajo para ver el partido¡ ?Bienvenidos a Brasil!
Las instituciones y las empresas privadas ponen todo tipo de facilidades para que sus empleados puedan seguir a la selecci¨®n durante el Mundial de f¨²tbol

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En estas tierras el Mundial de f¨²tbol tiene su ritual. Brasil entero se adapta para facilitar que todos, desde los ni?os de jard¨ªn de infancia hasta los cientos de miles de funcionarios p¨²blicos, puedan seguir cada uno de los partidos y animar a la selecci¨®n con entusiasmo. Por algo se considera el pa¨ªs del f¨²tbol y atesora cinco copas, m¨¢s que nadie. El deporte nacional es una de las pocas cosas que siempre ha unido a este gigante tan desigual como clasista. Que la jefatura ponga enormes facilidades a la plantilla para que no se pierda un minuto de juego, aqu¨ª es norma, no excepci¨®n. Todo son facilidades para que ese aficionado que casi todo brasile?o lleva dentro pueda poner sus energ¨ªas en animar a sus futbolistas. Tambi¨¦n ahora, en el Mundial de Qatar. Por eso la hora punta del tr¨¢fico en S?o Paulo ha sido este jueves bastante antes de lo habitual, nadie quer¨ªa llegar tarde al Brasil-Serbia. A esa hora los bares ya estaban llen¨¢ndose de gente con la camiseta amarilla, la que el bolsonarismo ha patrimonizalizado estos ¨²ltimos a?os y muchos quisieran recuperar como s¨ªmbolo nacional.
?talo Oliveira, de 19 a?os, andaba temeroso de perderse la gran cita del f¨²tbol por el trabajo. Y se llev¨® una gran sorpresa cuando el jefe avis¨® al equipo de que tendr¨ªan tres horas de descanso para ver el debut de Brasil en el campeonato. ¡°Fue una sorpresa porque nuestro trabajo no para nunca¡±, explica en el intermedio tras un insulso primer tiempo que acaba de ver junto a m¨¢s de un millar de compa?eros sentados ante dos enormes televisores colocados para la ocasi¨®n en esta nave gigante ubicada en Cajamar, a una hora en coche de S?o Paulo.
Cuando Richarlison mete un gol de ensue?o ¡ªsu segundo tanto¡ª es un delirio. Estallan emocionados, saltan exultantes en las sillas colocadas de manera que casi parece aquello una grada. Suenan las vuvuzelas. ¡°Brasil, Brasil¡±, corean. Muchos han cambiado la camiseta del uniforme de trabajo por la de la selecci¨®n. Alguno se ha pintado el pelo de verde. Est¨¢n entusiasmados. Los suyos arrancan con buen pie y est¨¢n m¨¢s cerca de volver a hacer historia y conquistar la sexta en Qatar.

La farra futbol¨ªstica ocurre al lado de una planta que es realmente at¨ªpico ver parada. Este es uno de los centros de distribuci¨®n de Mercado Libre (un Amazon argentino, el gigante latinoamericano del comercio electr¨®nico). Y no es un d¨ªa cualquiera porque Brasil debuta y porque ma?ana es uno de los d¨ªas m¨¢s importantes de este negocio, el Black Friday. Es por eso que la prensa ha sido invitada. Ver el partido en una compa?¨ªa como esta ayuda a comprender por qu¨¦ las empresas ofrecen semejantes facilidades y por qu¨¦ en algunos pa¨ªses la pasi¨®n por el f¨²tbol est¨¢ tan extendida, aunque para algunos solo sea un amor que resucita cada cuatro a?os.
En esta planta siempre se trabaja en plan hormiguita por turnos para cubrir las 24 horas de los siete d¨ªas de la semana. Es la parte invisible de ese pedido que acabas de hacer en el m¨®vil y se convierte en un paquete que llega a casa. Solo paran el d¨ªa de Navidad, en A?o Nuevo, y ahora, cuando la Canarinha juega en Qatar. ¡°Cuando nos avisaron de que tendr¨ªamos el descanso, en mi equipo empezamos a celebrarlo, a decidir qu¨¦ nos ¨ªbamos a poner y c¨®mo nos ¨ªbamos a maquillar¡±, explica Talita Neves, de 21 a?os. Tanto ella como Oliveira trabajan movi¨¦ndose por el gigantesco almac¨¦n, preparando los pedidos que luego ser¨¢n empaquetados y enviados a sus destinos. Y cuando tienen un problema, acuden a colegas como Lesli Oblesrczuk, de 27 a?os, ¡ª¡±tranquila, lo deletreo¡±¡ª¡±, que les orienta cuando resulta que falta un producto o no est¨¢ donde deber¨ªa. Cuenta que estas fechas son una locura porque tanto el volumen de ventas como los equipos aumentan.
Los brasile?os llegaban deca¨ªdos a esta cita mundialista porque la polarizaci¨®n pol¨ªtica ha envenenado hasta lo m¨¢s sagrado. Y la selecci¨®n y su camiseta se han convertido en los ¨²ltimos tiempos en reflejo de un pa¨ªs dividido m¨¢s que en el s¨ªmbolo de unidad que ha sido durante d¨¦cadas. Son muchos los que conf¨ªan en que el campeonato contribuya a cerrar heridas.
Mercado Libre no es una excepci¨®n. Tres de cada cuatro empresas brasile?as dan permiso a sus empleados para ver los encuentros. El goteo de anuncios ha sido incesante en las ¨²ltimas semanas. Bibliotecas p¨²blicas, escuelas, restaurantes, peque?as tiendas de ropa¡ ?Los bancos! Han ido anunciando a usuarios, padres y clientela en general cu¨¢les van a ser los horarios en los d¨ªas que la selecci¨®n de Brasil juega. A medida que avance el campeonato se va adaptando el calendario. Y se nota que es una costumbre arraigada porque todo el mundo se lo toma con absoluta normalidad. Algo parecido ocurre en Argentina.


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

El Gobierno federal brasile?o, los estatales, los ayuntamientos¡ emitieron decretos con los horarios y la advertencia de que los funcionarios tienen que recuperar m¨¢s adelante las horas dedicadas a no perderse un minuto de la Copa de f¨²tbol. En las empresas privadas, se negocia. Pero la premisa suele ser la concordia y tener contenta a la plantilla.
Entre los 14.000 empleados de Mercado Libre en Brasil, los que ten¨ªan turno esta tarde han disfrutado del partido, m¨¢s los 45 minutos anteriores y los 45 posteriores. Ya hubo permisos en el anterior Mundial. El s¨¢bado, con motivo del M¨¦xico-Argentina, parar¨¢n sus operaciones en esos dos pa¨ªses. Y el lunes de nuevo en Brasil, por el encuentro contra Suiza. Todo esto no le afecta a la plantilla en Chile porque no logr¨® clasificarse.
Fernanda Cacita, de 36 a?os, es gerente de operaciones, la jefa de Oliveira, Neves y Oblesrczuk. Aficionada del Santos de Neymar y de Pel¨¦, explica los motivos de la empresa para ofrecer a la plantilla este permiso futbol¨ªstico sin que afecte a sus n¨®minas ni tengan que recuperar un minuto. ¡°Es para incentivar su compromiso, van a producir mejor¡±, explica antes del partido. ¡°Si est¨¢n trabajando y pendientes del partido, no estar¨¢n tan atentos a la operaci¨®n. Mejor tener un equipo comprometido que comprometer los pedidos¡±. Se trata de que el mecano que consigue que cada paquete llegue a su direcci¨®n en plazo y sin que falte ninguno de los productos solicitados funcione como la seda. Y para eso este enorme ej¨¦rcito de empleados tiene que operar como un reloj. M¨¢s importante a¨²n ahora, cuando el Mundial ha empezado en pleno Black Friday y acabar¨¢ a las puertas de las Navidades. Por cierto, ni Neves, ni Oliveira ni Oblesrczuk saben si el d¨ªa de la final les toca turno, no lo han mirado.
?Y qu¨¦ ocurre cuando el partido acaba en una decepci¨®n tan gigantesca como la que se llev¨® Argentina en su estreno? Lo tienen previsto, explica la gerente de operaciones de Mercado Libre. Terminado el partido y antes de que los empleados retomen sus tareas, cada jefe tiene una breve sesi¨®n informativa con los suyos como al principio de cada turno. El contenido depende del resultado de la selecci¨®n en el partido. Tienen preparado un briefing para la victoria. Y otro para la derrota.
Los brasile?os han escuchado esta noche el primero. Y con la euforia de este primer triunfo mundialista han vuelto al trabajo porque a medianoche empieza el viernes m¨¢s importantes del a?o para el comercio electr¨®nico mundial.
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