Lewandowski y Szczesny a¨²pan a Polonia
El ariete y el portero niegan a una Arabia Saud¨ª mejor en el juego y blanda en las ¨¢reas
Las ¨¢reas condenaron a Arabia Saud¨ª y encumbraron a Polonia. Nada extra?o si se tiene en cuenta la n¨®mina de los futbolistas de ambas selecciones en Qatar. Al equipo de Renard, que juega muy bien, le falt¨® la punter¨ªa que tuvo ante Argentina mientras que al de Michniewicz, que simplifica el f¨²tbol, le avalaron el ariete Lewandowski y el portero Szczesny. El Pichichi del Bar?a y Bota de Oro con el Bayern de M¨²nich se estren¨® por fin como goleador en un Mundial en su quinto partido -segundo en el actual torneo- despu¨¦s de que totalizara ya 76 tantos con Polonia.
Lewandowski, que hab¨ªa fallado un penalti en la jornada anterior contra M¨¦xico, marc¨® el segundo gol, asisti¨® a Zielinski en el primero y remat¨® tambi¨¦n al poste izquierdo de Al Owais. El portero de los halcones verdes apenas intervino y, sin embargo, encaj¨® dos tantos y dos tiros a los palos, nada que ver con Szczesny, que rechaz¨® un penalti, arm¨® la jugada del 1-0 y neg¨® a los delanteros de Arabia. El meta de la Juve a¨²pa a Polonia al liderato del grupo con cuatro puntos a la espera del partido contra Argentina mientras Arabia Saud¨ª suma 3 y se enfrentar¨¢ a M¨¦xico.
Arabia Saud¨ª trato de dar continuidad desde el inicio al tramo de partido que le permiti¨® remontar en un santiam¨¦n contra Argentina. Aquel video en el que se ve¨ªa a Renard estimular en el descanso a sus futbolistas para que presionaran de manera sincronizada y se olvidaran de sacarse una foto con Messi no era precisamente propaganda sino un plan entrenado que se les hab¨ªa olvidado por la capacidad de intimidaci¨®n del rosarino y la Albiceleste. Jugaron los asi¨¢ticos durante media hora con la misma intensidad, dinamismo y verticalidad para desespero de Polonia.
La selecci¨®n de Michniewicz, demasiada lenta y pesarosa, sin cintura, carg¨® con tres tarjetas seguidas porque sus jugadores no encontraban la pelota ni acertaban a frenar con el f¨²tbol el despliegue de Arabia. Hab¨ªa mucho ritmo y buenas llegadas en el equipo de Renard. El dominio qued¨® reflejado en una larga conducci¨®n muy bien rematada de Kanno que acab¨® con una excelente respuesta de Szczesny. Polonia, muy exigida defensivamente, era m¨¢s f¨ªsica y directa y solo hab¨ªa intimidado a bal¨®n parado a la salida de un c¨®rner que cabece¨® Bielik.
El gol lleg¨® despu¨¦s de un saque de porter¨ªa al que Frankowski y Casch -antes se hab¨ªa jugada la expulsi¨®n- le dieron continuidad hasta conectar con Lewandowski. A falta de remate, el ariete eludi¨® la salida del meta y antes de que la pelota saliera por la l¨ªnea de fondo asisti¨® a Zielinski. A Polonia le hab¨ªa alcanzado con una jugada para marcar mientras Arabia no encontraba la porter¨ªa ni de penalti despu¨¦s de que Bielik derribara a Al Shehri. Szczesny rechaz¨® el lanzamiento desde los once metros de Al Dawsari y envi¨® a c¨®rner el chut posterior de Al-Burayk.
El portero de Polonia no solo tuvo manos sino tambi¨¦n piernas para intervenir m¨¢s tarde a un disparo del Al Dawsari. Arabia Saud¨ª llegaba bien y su volumen de juego era abundante, tan rica en ataque como permeable defensivamente, expuesta a las r¨¢pidas transiciones de Polonia. Lewandowski remat¨® a la madera despu¨¦s de que el palo ya hubiera devuelto un testarazo de Milik. El f¨²tbol simple y directo de Polonia acababa mejor que la variada ofensiva de Arabia, menos efectiva para desespero de la hinchada del Estadio de la Ciudad de la Educaci¨®n de Al Rayyan.
A falta de precisi¨®n en el ¨¢rea contraria, Arabia Saud¨ª se conden¨® en la propia, despu¨¦s de un error de Almalki en el control de un pase que permiti¨® marcar a Lewandowski. Atento a la jugada, el ariete del Bar?a estuvo listo y r¨¢pido para aprovechar el error del rival y marcar su primer gol en una Copa del Mundo. El ariete se qued¨® un buen rato tendido, entre emocionado y liberado, despu¨¦s de acabar con una mala racha in¨¦dita en un artillero contrastado si se repasa su estad¨ªstica en Dortmund, M¨²nich, Barcelona y la propia Polonia.
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