Vinicius: ¡°Esta victoria va para Pel¨¦¡±
El delantero brasile?o se acuerda de O Rei despu¨¦s de abrir el marcador con un gol en el que aguant¨® dos segundos parado en el ¨¢rea y tras dar una asistencia
El primer tiempo de Brasil fue un desahogo colectivo en el que funcion¨® lo que todos deseaban que funcionara. Despu¨¦s de d¨ªas de incertidumbre por su tobillo derecho de mu?eco hinchable, Neymar apareci¨® en el once. Despu¨¦s de una fase de grupos con una punter¨ªa cuestionable, sobre todo contra Camer¨²n, se ajustaron todas las mirillas a un tiempo. Si en los tres primeros partidos necesitaron 57 tiros para tres goles, en los primeros 30 minutos contra Corea marcaron tambi¨¦n tres, pero con solo cinco tiros, seg¨²n las cuentas de Opta. Funcion¨® todo tanto que despu¨¦s de ese tercer gol, de Richarlison, bail¨® hasta Tite, la danza del pombo, que populariz¨® el delantero, y al que prometi¨® ejecutarla si marcaba. ¡°Intento adaptarme a su lenguaje, que es el baile¡±, dijo luego el seleccionador.
La derrota contra Camer¨²n y las noticias sobre el estado de salud de Pel¨¦, la gran leyenda patria y de la historia de los Mundiales, hab¨ªan ensombrecido al t¨¦cnico. El tono comenz¨® a cambiar cuando llegaron al estadio 974 y leyeron un mensaje publicado en la cuenta de Twitter del convaleciente Pel¨¦, acompa?ado de una foto del mito justo antes de su primer Mundial: ¡°En 1958 caminaba por la calle pensando en cumplir la promesa que le hice a mi padre. S¨¦ que hoy muchos hicieron promesas parecidas y tambi¨¦n van a buscar su primera Copa del Mundo¡±.
Em 1958, eu caminhava pelas ruas pensando em cumprir a promessa que fiz ao meu pai. Sei que hoje muitos fizeram promessas parecidas e tamb¨¦m v?o em busca da sua primeira Copa do Mundo.
— Pel¨¦ (@Pele) December 5, 2022
Assistirei ao jogo do hospital e estarei torcendo muito por cada um de voc¨ºs. Boa sorte! ?? pic.twitter.com/3CRI8v6H55
En Brasil todo cuenta, hasta las salpicaduras de un ayudante a Thiago Silva antes de comenzar, o el abrazo que le dio a Alisson el mismo operario, que regres¨® despu¨¦s al banquillo santigu¨¢ndose.
Se puede atribuir al conjuro, si se quiere, pero el gol con el que Vinicius abri¨® el marcador y su cuenta en el Mundial result¨® ins¨®lito. Le lleg¨® un bal¨®n que hab¨ªa mandado Raphinha atravesando el ¨¢rea de lado a lado y que pas¨® bajo Neymar y Richarlison. Y sucedi¨® el prodigio. Control¨® y la pelota bot¨® una vez, y luego otra. Pasaron dos segundos durante los cuales fueron llegando defensas. Y Vinicius segu¨ªa detenido. Hasta que se reunieron delante cinco contrarios, apunt¨® al rinc¨®n de arriba, los burl¨® a todos y se march¨® a celebrar en corro. Despu¨¦s bail¨® con Paquet¨¢, Raphinha y Neymar.
Estaba a punto de llegar tambi¨¦n el momento del 10. Un penalti a Richarlison que pareci¨® dispuesto a ejecutar Raphinha mientras la grada reclamaba al crack: ¡°?Neymar, Neymar!¡±. No hizo falta mucho. El extremo del Barcelona solo proteg¨ªa el punto de penalti. El portero trat¨® de perturbar a Neymar. Se coloc¨® a su derecha, dejando el resto del arco libre, se movi¨® hacia el centro, se agit¨®. Todo mientras el brasile?o se aproximaba con parsimonia a la pelota y acaba deposit¨¢ndola en el lado que le hab¨ªa indicado al principio Kim. Otra vez la pausa extrema, como en el gol de Vinicius. Y despu¨¦s el baile, y un abrazo para Alex Telles, que se lesion¨® y no podr¨¢ jugar m¨¢s en Qatar.
El 10, que se mantuvo en el campo casi todo el encuentro, estaba de vuelta, y bien: ¡°No sent¨ª ning¨²n dolor en el tobillo¡±, cont¨®. Aunque casi m¨¢s llamativa que su culebr¨®n m¨¦dico est¨¢ resultando la explosi¨®n de Vinicius en el gran estrado mundial. El madridista es igual que punzante que siempre a la carrera, pero su galope resulta a¨²n m¨¢s peligroso mezclado con la pausa. Como en el tercer gol de Brasil. Empez¨® avanzando a toda m¨¢quina por su banda izquierda, pero la jugada se aclar¨® cuando se detuvo a apuntar con un globo a la llegada de Paquet¨¢. Despu¨¦s se acord¨® de O Rei: ¡°Que la gente siga bailando hasta el final. Y mandar un fuerte abrazo a Pel¨¦, que necesita fuerzas. Esta victoria va para ¨¦l¡±.
Paulo Bento, el seleccionador de Corea, tem¨ªa que sus futbolistas no pudieran sostener el pulso de los pentacampeones por la fatiga. Pero Brasil atrap¨® el pase a cuartos en los rincones del partido que convirti¨® en remansos, con la seguridad de quien juega con cierto sentido de trascendencia. Al terminar, Neymar, que busca su primera Copa del Mundo, regres¨® a la hierba en chanclas, con una pancarta con el nombre de ¡°?Pel¨¦!¡± al lado de la ic¨®nica fotograf¨ªa de O Rei subido a un compa?ero, con el pu?o en alto, despu¨¦s de ganar su tercer Mundial, en M¨¦xico en 1970. De sus redes sociales sali¨® una respuesta: ¡°Siento una mezcla de alivio y felicidad. Me hicieron muy feliz¡±.
Suscr¨ªbete aqu¨ª a nuestra newsletter especial sobre el Mundial de Qatar
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.