Alcaraz somete a Medvedev y se adue?a de California

All¨¢ que va el magn¨ªfico Carlitos, otra vez trofeo en mano y sonriente, dientes y m¨¢s dientes cuando abre felizmente el buz¨®n y celebra con rabia porque el premio se resist¨ªa desde hace ocho meses: California est¨¢ a sus pies, reluciente su nombre de nuevo en el historial de Indian Wells, testigo de un doblete hist¨®rico que solo siete tenistas firmaron previamente. El ¨²ltimo, un tal Novak Djokovic. S¨ª, son ya dos las cumbres que ha hecho el murciano en el Valle de Coachella, por donde parece no haber pasado el tiempo porque el cierre es el mismo que hace un a?o: un tenista termina aturdido. Enfrente est¨¢ Daniil Medvedev, que al final se deja ir, abrumado en un callej¨®n sin salida. No ve opci¨®n. Otra vez tumbado: 7-6(5) y 6-1, tras 1h 42m. El espa?ol, que no descorchaba el champ¨¢n desde el pelotazo del a?o pasado en Wimbledon, verano y julio entonces, festeja a lo grande porque los ¨²ltimos tiempos no han sido del todo sencillos y la recompensa se resist¨ªa. Voces por ah¨ª, dudas y tambi¨¦n cr¨ªticas. Era una mera cuesti¨®n de tiempo.

Reclamaba paciencia Alcaraz, exponiendo que la l¨ªnea era la buena y que tarde o temprano recoger¨ªa el fruto. Tengan fe, ped¨ªa. No pierdan la confianza. Y de fondo, ruido, las dichosas redes sociales que, cuenta, no se lo ponen f¨¢cil porque al fin y al cabo tiene 20 a?os. No pudo triunfar en Australia ni en Buenos Aires, y despu¨¦s lleg¨® el infortunio de R¨ªo, hace no tanto. All¨ª se da?¨® el tobillo derecho, pero lo ha recuperado a la misma velocidad con la que cubre toda la pista, cent¨ªmetro a cent¨ªmetro, piernas y m¨¢s piernas. Se?or portento. ?Abran paso, abran paso! Un guepardo circula este domingo por el desierto californiano. Y poco (o m¨¢s bien nada) puede hacer Medvedev, que el curso pasado se llev¨® un meneo en la resoluci¨®n y esta vez resiste lo que tarda el espa?ol en sacudirse esos nervios con los que ha saltado a la pista y dar con el tono necesario. Es decir, apenas tres juegos. Nada de una guerra de trincheras; cay¨® en la trampa en Nueva York, as¨ª que recupera la f¨®rmula de ganar metros y morder. Culmina en forma de mon¨®logo.

En este desenlace, la grada californiana presencia un duelo partido absolutamente en dos: ese primer tramo extra?o, en el que el ruso adquiere una renta que termina siendo ficticia, porque no es m¨¢s que la concesi¨®n (3-0) que hace el campe¨®n hasta que aterriza en la final, y el recital posterior. No hay color. As¨ª, jugando de esa forma tan en¨¦rgica, tan disfrutona y tan jer¨¢rquica, detener a Alcaraz es poco menos que una proeza. Lo sabe Medvedev, que acepta la realidad del d¨ªa a rega?adientes y acaba mosque¨¢ndose con el p¨²blico, fruto de la impotencia. Se deshace el de Mosc¨². Sin saque, sus opciones son nulas. Se produce una dimisi¨®n. ¡°Ojal¨¢ un d¨ªa me dejes ganar aqu¨ª¡­¡±, bromea, porque detr¨¢s de esas malas pulgas hay un elogiable competidor. ¡°S¨¦ c¨®mo tengo que jugar¡±, advert¨ªa el murciano el d¨ªa previo. Y ejecuta a la perfecci¨®n. 23 golpes ganadores ¡ª12 m¨¢s que su adversario¡ª y su excelente despliegue lo conducen hacia su quinto t¨ªtulo de un Masters 1000, uno m¨¢s que su preparador, Juan Carlos Ferrero; es, tambi¨¦n, la cifra que solo ¨¦l y Rafael Nadal (9) han conseguido alcanzar antes de cumplir los 21. Ten¨ªa ganas Alcaraz, contrariado porque desde el exterior se le exige que la excepcionalidad se convierta en norma, y recordaba estos d¨ªas de la dificultad.

¡°Han sido meses dif¨ªciles para m¨ª. Mi confianza baj¨® un poco. A veces me cuesta ser yo mismo. Soy un tipo que ve mucho el tel¨¦fono [las redes] y es complicado lidiar con algunos comentarios¡±, admit¨ªa tras batir a Fabian Marozsan. ¡°Han sido unas semanas bastante intensas. Antes de empezar el torneo ten¨ªa muchas dudas, porque ten¨ªa que recuperar el tobillo y hemos tenido que trabajar mucho; el primer entrenamiento fueron 30 minutos sin moverme. No sab¨ªamos si ¨ªbamos a poder jugar, aunque sea a un nivel ¨®ptimo. Ganar este torneo significa mucho para m¨ª. Estoy contento de haberme sobrepuesto a los problemas¡±, transmite en el discurso de coronaci¨®n, con 13 galardones ya en la ¨¦lite ¡ªlos mismos que Nicol¨¢s Almagro, uno por debajo de Alberto Berasategui y Sergi Bruguera¡ª y convertido ya en uno de los distinguidos de Indian Wells. A partir de los noventa, solo Pete Sampras (1994-95), Michael Chang (1996-97), Lleyton Hewitt (2002-03), Roger Federer (2004-06) y Djokovic (2014-16) lograron defender la fortaleza. Ahora tambi¨¦n ¨¦l, de nuevo alas abiertas. En direcci¨®n ya a Miami.

Hay mucho de liberatorio en el aullido de la r¨²brica. Al condicionante de la lesi¨®n se ha a?adido un trazado plagado de trampas. Lo mismo fue acorralado por las abejas que tuvo que hacer frente a la demora por la lluvia en las semifinales. Y sobre todo, el haber perdido por momentos la br¨²jula de su tenis. ¡°Es dif¨ªcil expresarlo con palabras, porque he pasado por unos meses muy complicados. Digamos que en los dos ¨²ltimos me ha costado encontrarme a m¨ª mismo. No disfrutaba en la pista, no era yo mismo, pero he superado todos los problemas. Por eso esto significa mucho para m¨ª. Ha sido muy especial por eso, no porque no hubiera ganado nada desde Wimbledon. Eso no me importa. Se trata de los sentimientos, no de ganar o no. Se trata de disfrutar¡±, se sincera el joven de El Palmar, repuesto en un instante clave del a?o, antes del comienzo de la gira de tierra batida ¡ªel 7 de abril, en Montecarlo¡ª y los posteriores desaf¨ªos en Londres y los Juegos Ol¨ªmpicos de Par¨ªs.

¡°Despu¨¦s de Wimbledon fue un periodo dif¨ªcil. No pod¨ªa encontrar mi estilo, mi juego, pero aun as¨ª disfrut¨¦ en la gira americana [Montreal, Cincinnati y US Open]. En Pek¨ªn y en Shangh¨¢i me fue bastante bien; no jugu¨¦ bien, pero estaba disfrutando. Mi familia, mi equipo y la gente cercana me preguntaban qu¨¦ me pasaba, porque ya no sonre¨ªa tanto en la pista. Me costaba disfrutar¡±, admite Alcaraz, que esta ¨²ltima semana y media ha superado todos los ex¨¢menes: el f¨ªsico, el ten¨ªstico y, por encima de todo, el an¨ªmico. Se desquit¨® ante Auger-Aliassime ¡ªsuperior en el cara a cara general¡ª, Fabian Marozsan ¡ªsu verdugo en Roma el curso pasado¡ª y Alexander Zverev ¡ªeste a?o en Melbourne¡ª; tambi¨¦n ha rendido al formidable Jannik Sinner, que enlazaba 19 triunfos consecutivos y no perd¨ªa desde noviembre; ha vuelto a sortear a Medvedev, casi siempre un quebradero de cabeza; y la mejor de las noticias est¨¢ en esa confianza renovada. Ondea de nuevo la bandera del ¨¦xito: ¡°Si crees en ti mismo, tienes un muy buen equipo a tu alrededor y trabajas duro, puedes conseguirlo todo. Esa es la lecci¨®n m¨¢s valiosa que me llevo de aqu¨ª¡±.

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