Alcaraz, inspirado otra vez, sigue ganando color
Tras la prometedora victoria ante Korda, el murciano se reafirma contra Aliassime (6-3, 6-3 y 6-1, en 2h 19m) en direcci¨®n a los cuartos, en los que le espera Tsitsipas
Ah¨ª est¨¢ Juan Carlos Ferrero apremiando a su jugador, inst¨¢ndole a que d¨¦ un poquito m¨¢s pese a que vaya ya por delante, set arriba. Cree el t¨¦cnico que el chico puede, e insiste desde el box, una y otra vez: ¡°Un poco m¨¢s de continuidad en la intensidad. ?Todo el rato, t¨ªo!¡±, demanda el preparador en este domingo de viento y fr¨ªo, m¨¢s bien desagradable para la pr¨¢ctica del tenis y precedido del v¨¦rtigo de Swiatek, doble rosco la polaca, y la noche antes del aullido de Novak Djokovic. Se desconoce por d¨®nde saldr¨¢ el serbio, pero llegan las rampas de verdad, este Roland Garros tan abierto empieza a definirse y uno y otro se posicionan; sufridor el n¨²mero uno, emergente el murciano, quien ante Felix Auger-Aliassime hace la del disc¨ªpulo aplicado: oye, atiende y ejerce: de acuerdo, Juanki, all¨¢ que voy, recto de principio a fin. 6-3, 6-3 y 6-1, en 2h 19m. Otra dosis de optimismo. Ya sobrevuela los cuartos.
Redimido dos d¨ªas antes, cuando volvi¨® a destapar el tarro de las esencias y se reencontr¨® consigo mismo con una magn¨ªfica actuaci¨®n ante Sebastian Korda, el de El Palmar mantiene la inercia y disfruta otra vez, el¨¦ctrico de piernas e inspirado en la definici¨®n. Luce de nuevo mu?eca en la dejada, cubre pista a fondo y presiona al canadiense del primer al ¨²ltimo parcial, expansivo y hostigador, evitando que se tuerza lo m¨¢s m¨ªnimo la cosa; se despist¨® en la segunda estaci¨®n y se enderez¨® con virtuosismo en la tercera, que encuentra continuidad en esta cuarta frente a un rival con tanto potencial como desorientaci¨®n, porque Auger-Aliassime, todo dudas, demasiado cohibido en los ¨²ltimos tiempos, no solo no progresa sino que se estanca. Ideal, por tanto, para reforzar la buena din¨¢mica y recargar el tanque de confianza, que no abundaba y hoy d¨ªa est¨¢ a precio de oro en este presente indescifrable.
¡°Si le metes el segundo z¨²mbale, ?eh? ?Z¨²mbale!¡±, le insiste Ferrero, tipo exigente y tenaz, y aqu¨ª, reza el prosaico lema de la tribuna de la Chatrier, la victoria pertenece a los que la pelean, a los que van y van sin parar, a los que la quieren. Ha cambiado el gesto mustio de la llegada a este Roland Garros por ese otro en el que rechinan los dientes, en el que se detecta hambre y en el que la mirada se afila, sin¨®nimo de voluntad. De deseo. Y esto ¨²ltimo mueve el mundo, no es ajeno el tenis. El talento requiere de libido y tambi¨¦n de convicci¨®n. Tiene 21 a?os Alcaraz, y la incertidumbre y los temores son elementos ineludibles en la traves¨ªa, pero el miedo a que pueda resentirse el antebrazo derecho va desapareciendo y su tenis ronaldinhiano y hedon¨ªstico va recuperando el br¨ªo, la chispa y las notas de color, tan diferente y tan pl¨¢stico para el ojo semejante repertorio.
Lo dicen los que saben, lo goza McEnroe, rockero y disfrut¨®n, voz de Eurosport. En medio del terraplanismo actual, un viaje en la monta?a rusa. El espa?ol es algo distinto, fresco, diferente. Y el p¨²blico de Par¨ªs, siempre inquieto, le espera con ansia. ¡°Carlos es un individuo ¨²nico. Es emocionante, el m¨¢s divertido de ver, el m¨¢s atl¨¦tico, tiene m¨¢s juego que nadie que haya visto de su edad¡±, lo elogia el estadounidense; ¡°puede hacer cualquier cosa; de hecho, como puede hacer de todo, a veces intenta lo extraordinario y lo espectacular, en vez de buscar el alto porcentaje, pero creo que a medida que avance su carrera empezar¨¢ a retroceder un poco, porque quiere emocionar al p¨²blico y devolverle lo que cuesta la entrada, y a veces podr¨ªa ganar m¨¢s f¨¢cilmente. Pero me encanta ver jugar a este chico. Es el¨¦ctrico, es incre¨ªble para este deporte¡±.
Carlos having some fun with the Chatrier crowd ??#RolandGarros @carlosalcaraz pic.twitter.com/OouwolfDQi
— Roland-Garros (@rolandgarros) June 2, 2024
Y en medio de este bienvenido progresar, al bueno de Auger-Aliassime le duele la espalda, hace lo que puede ¡ªmasajes en la zona lumbar¡ª y termina inclin¨¢ndose en silencio. Lo intenta, pero es una quimera. Dolor de cabeza al principio, cuando el de El Palmar meti¨® la cabeza en la ¨¦lite, la distancia entre ¨¦l (23 a?os) y Alcaraz es hoy d¨ªa muy grande. Encaja 34 ganadores el canadiense, que se lleva un severo portazo la ¨²nica vez que intenta tirar la puerta; 16 opciones de break se procura el vencedor, que divisa en la escala del martes al griego Stefanos Tsitsipas, adversario superior. No se admite la m¨¢s m¨ªnima relajaci¨®n. ¡°?Que pasen cosas, que pasen!¡±, contin¨²a Ferrero cuando el marcador ya refleja un 5-0 en el ¨²ltimo parcial, y el joven tenista calca el cierre de la ronda previa, volea templada, otro paso adelante. M¨¢s felicidad, que ya tocaba.
¡°Creo que es tu momento¡±, le dice a pie de pista la francesa Marion Bartoli, campeona de Wimbledon en 2013, aquella derecha a dos manos. ¡°He jugado muy concentrado, sin altibajos. Me siento cada vez mejor¡±, responde ¨¦l, que simplifica para explicar el repunte en el juego: ¡°Creo en m¨ª mismo¡±.
Puedes seguir a EL PA?S Deportes en Facebook y X, o apuntarte aqu¨ª para recibir nuestra newsletter semanal.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.