La diversidad ling¨¹¨ªstica belga puede provocar una crisis pol¨ªtica

La guerra ling¨¹¨ªstica en B¨¦lgica, entre flamencos y valones, puede originar una crisis gubernamental que terminar¨ªa con la actual coalici¨®n en el poder formada por socialcristianos, liberales y un partido federalista de expresi¨®n franc¨®fona.B¨¦lgica cuenta con casi 10 millones de habitantes, divididos en tres comunidades ling¨¹¨ªsticas: los flamencos, de expresi¨®n neerlandesa; los valones, de habla francesa, y los furones, minor¨ªa de habla alemana.

El biling¨¹ismo oficial, entre flamencos y franc¨®fonos, es una regla de oro que se aplica estrictamente a todos los niveles. Desde los partidos pol¨ªticos -excepto los de obediencia federal¨ªsta, minoritarios- que est¨¢n todos divididos en dos alas, hasta el porcentaje de funcionarios en la Administraci¨®n.

Adem¨¢s de las formaciontes pol¨ªticas cl¨¢sicas (socialcristianos, socialistas, liberales y comunistas) en los ¨²ltimos a?os tres partidos con car¨¢cter federal han adquirido particular importancia. Se trata de los flamencos de la Volksunie (Pueblo Unido), los franc¨®fonos del Rassemblement-Wallon (Agrupaci¨®n de los Valones) y el FDF (Frente Democr¨¢tico de los franc¨®fonos bruselenses) cuyo objetivo principal es defender la capital contra la influencia flamenca.

La elecci¨®n de Roger Nols (FDF) como alcalde de uno de los 18 ayuntamientos de la aglomeraci¨®n bruselense -el de Schaerbeek- origin¨® un peque?o cambio en las costumbres administrativas del Ayuntamiepto. Teniendo en cuenta que la poblaci¨®n flamenca de Schaerbeek es de un 20 por 100, Nols decidi¨® reservar solamente unas ventanillas para los flamencos y las dem¨¢s para los franc¨®fonos.

Cuando los miembros de los p¨¢rtidos pol¨ªticos flamencos, particularmente de la Volksunie, descubrieron el hecho, comenzaron una serie de manifestaciones semanales en el terrotorio de Schaerbeek, algunas con car¨¢cter violento, por parte de los flamencos. Finalmente el Gobierno, presidido por el primer ministro Leo Tindemans (socialcristiano flamenco), decidi¨® que Schaerbeek deb¨ªa restablecer la paridad ling¨¹¨ªstica en sus ventanillas del ayuntamiento.

Naturalmente la guerra ling¨¹¨ªstica ha creado un ambiente poco propicio al actual Gobierno. Pero los quebraderos de cabeza para el primer ministro Tindemans no terminan aqu¨ª. El Rassemblement Wallon, gracias al cual el Gobierno tiene una escasa mayor¨ªa parlamentaria, amenaz¨® con quitar la coalici¨®n gubernamental con socialcristi¨¢nos y liberales, si no se resuelven los problemas de la ?Caja de Ahorros?. Un acuerdo en el tema vio la luz el pasado jueves. Pero cabe preguntarse: ?para cu¨¢ndo el pr¨®ximo conflicto lingu¨ªstico? Gazet van Antwerpen, peri¨®dico de Amberes, publicaba el s¨¢bado un informe de su equipo de reporteros, escribiendo que, aun sin letreros, las ventanillas de Schaerbeek segu¨ªan siendo discriminatorias: unas para flamencos y otras para franc¨®fonos.

Gobierno ?a tres?

Los observadores pol¨ªticos no creen que una crisis pol¨ªtica estalle antes del verano. Nunca se ha votado en este pa¨ªs durante los meses estivales. Otra cosa ser¨¢ el oto?o, sobre todo porque el 10 de octubre deben celebrarse elecciones municipales.Con vistas a lo que pueda pasar dentro de unos meses, si hay crisis gubernamental y elecciones generales, los socialistas, flamencos, valones y bruselenses -actualmente en la oposici¨®n, despu¨¦s de haber practicado un Gobierno de coalici¨®n con los socialcristianos- anunciar¨¢n el pr¨®ximo martes un acuerdo comunitario tripartito, propondr¨¢n tres regiones para B¨¦lgica (flamenca, valona y bruselense), dotadas de asambleas elegidas por sufragio universal directo y con ejecutivos responsables ante las mismas.