Sorpresa empresarial y rechazo de los grupos sindicales
El ministro de Relaciones Sindicales respondi¨® ante la televisi¨®n, a preguntas de varios periodistas, sobre el proyecto de reforma sindical contenido en la reforma constitucional. EL PAIS ha pedido su opini¨®n sobre el tema a representantes de los sindicatos a¨²n no reconocidos que vienen actuando p¨²blicamente en los ¨²ltimos tiempos, as¨ª como a algunos empresarios de Madrid, Barcelona y Bilbao. Estas son las respuestas obtenidas.
Nicol¨¢s Sartorius-(CCOO)?Creo que nunca en nuestro pa¨ªs, ha sido tan nefasta la contradicci¨®n entre las palabras y los hechos. Lo que cuenta es que los movimientos y organizaciones sindicales reales siguen estando fuera de la ley, que a las Comisiones Obreras se les acaba de prohibir una asamblea general que tiene intenci¨®n de realizar acogi¨¦ndose a la reciente Ley de Reuni¨®n. Se aprueba esta ley y el mismo d¨ªa se Construcci¨®n del Sindicato, se construcci¨®n del Sindicato, se proh¨ªbe la asamblea de CCOO y otras reuniones; se habla de legalizar partidos y ah¨ª est¨¢n en la c¨¢rcel exponentes de esos partidos, como S¨¢nchez Montero, Lobato, Romero Mar¨ªn, Santiago Alvarez, Trevijano y Calvo Serer, adem¨¢s de otros muchos.
Lo que queremos es la libertad sindical dentro de las libertades democr¨¢ticas, y que sobre ella los propios trabajadores se organicen como quieran, en uno o en varios sindicatos, aunque nosotros defendemos que sea unitario. No aceptamos que se nos imponga la pluralidad por decreto. El ministro no ha dicho nada sobre las condiciones para acogerse a esta legalidad; si son parecidas a las que barruntan para los partidos pol¨ªticos no creo que las fuerzas sindicales de oposici¨®n se acojan a ella. Y CCOO, ?podr¨¢ actuar libremente? Sin las CCOO no hay libertad sindical. Para el movimiento obrero es m¨¢s importante que se pueda celebrar la asamblea de Comisiones y se suelte a los presos que todos los planes de reforma. Sobran las palabras, necesitamos hechos y ¨¦stos desmienten desgraciadamente las palabras, que por otra parte tampoco son claras.?
Uni¨®n General de Trabajadores (U.G.T.)
La intervenci¨®n de Mart¨ªn Villa en RTV espa?ola no hace sino confirmar las razones por las que la UGT ha venido rechazando su llamada reforma sindical.
Manipulando constante e interesadamente conceptos tales como libertad sindical, autonom¨ªa del sindicato, convenio 87 de la OIT, unidad sindical y otros, Mart¨ªn Villa ha pretendido camuflar la realidad de su reforma. Pero dejando aparte la terminolog¨ªa que ¨¦l ha empleado no podemos olvidar que en su intervenci¨®n se dice textualmente que: ?La organizaci¨®n sindical seguir¨¢ con sus competencias y r¨¦gimen jur¨ªdico?. Esto es exactamente lo que la UGT ha denunciado y denuncia de la pretendida reforma sindical: que es falso afirmar que abogue en la libertad sindical, que no supone la desaparici¨®n de la organizaci¨®n sindical, impuesta a los trabajadores desde el poder.
Es consustancial con el sindicalismo libre que preconiza y practica la UGT el rechazo de cualquier tipo de injerencia o intervenci¨®n del Gobierno o de otras fuerzas -incluso de lo que Mart¨ªn Villa llama la naci¨®n- extra?as a la clase obrera en la estructura, funcionamiento y actuaci¨®n del movimiento sindical. Su intervenci¨®n refleja una clara contradicci¨®n a este respecto, pues, mientras habla de no injerencia en los asuntos sindicales, ¨¦l no cesa de interferir en ¨¦stos, tanto hoy, como en todo el planteamiento de su proyecto de futuro.
En definitiva, Mart¨ªn Villa no ha aportado soluci¨®n alguna a los graves problemas que afectan en estos momentos a nuestra clase trabajadora.
Union Sindical Obrera (USO)
?El discurso ha aclarado muy pocas cosas, tal vez porque tampoco se le forz¨® demasiado. Dentro de esta ambig¨¹edad general existe una contradicci¨®n de base cuando afirma que la libertad ser¨¢ un hecho para pasar a defender la legalidad vigente, poco despu¨¦s. Eso s¨®lo puede ser un juego de palabras, porque dentro de la actual legalidad sindical, no es posible la libertad. Es importante se?alar que en ning¨²n momento se toc¨® el tema del patrimonio de los sindicatos y mucho nos tememos que al final eso se va a decidir al margen de los trabajadores, que somos los leg¨ªtimos propietarios. Estamos de acuerdo con la positiva referencia a las organizaciones sindicales aut¨®nomas, pero tambi¨¦n resulta dudoso que se empieza a hablar de autonom¨ªa, despu¨¦s de cuarenta a?os de verticalismo. Ser¨ªa bueno saber a qui¨¦nes va a beneficiar esa autonom¨ªa, si a los que hemos venido funcionando as¨ª durante este tiempo o a los restos del aparato sindical. En ¨²ltima instancia, no es tampoco congruente que un tema como el futuro sindical se plantee entre un miembro del Gobierno, que nada tiene que ver con los trabajadores, y unos periodistas. Los interlocutores v¨¢lidos hubieran sido los sindicalistas. Los trabajadores hemos visto un programa m¨¢s, de Televisi¨®n Espa?ola, pero seguimos donde est¨¢bamos.?
Pere Camps, Comisi¨®n Obrera Catalu?a
En estos momentos en que aparece muy claramente de los actuales sindicatos verticales han sido desbordados por la clase obrera, Mart¨ªn Villa pretende crear la divisi¨®n sindical, lo cual no es sino un medio para intentar conseguir que estemos en desventaja. Continuar¨¢ existiendo un control de los trabajadores, que aparec¨ªa muy claro en la Ley de Bases de 1940, pero que ahora queda m¨¢s disimulado mediante la creaci¨®n del Consejo Econ¨®mico y Social. Se pretende adem¨¢s que los futuros sindicatos sean apol¨ªticos, lo cual es negar una importante arma a los trabajadores.
Creo que no puede haber libertad sindical sin ruptura sindical y la celebraci¨®n de un congreso sindical constituyente. El futuro sindicato lo han de crear los propios obreros de forma directa y sin interferencias.
Respecto al pacto social creo que es irrealizable. Nosotros no lo deseamos en absoluto, tanto para ahora como para el futuro. Lo que s¨ª propiciamos es un pacto pol¨ªtico que defina un marco de libertades c¨ªvicas y nacionales.
Luis Olarra, empresario
?Pienso que el programa expuesto por el se?or Mart¨ªn Villa constituye un paso adelante. Soy de los que creen que la ruptura no nos lleva a ninguna parte y por eso mismo considero importantes sus declaraciones, porque dejan abierto el camino a una evoluci¨®n que puede ser todo lo amplia que se quiera. Dos puntos b¨¢sicos de este programa son, a mi juicio, la independencia de patronos y obreros y la no mediatizaci¨®n del Gobierno en la estructura sindical. El Consejo Econ¨®mico Social, en cierto sentido o los sindicatos actuales, puede tambi¨¦n jugar un importante papel de cara a conseguir el tan necesario pacto social?.
Carles Cuatrecases, Circulo Econom¨ªa Barcelona
En principio el proyecto de reforma sindical me parece que significa un paso adelante hacia la consecuci¨®n de sindicatos libres, tanto de trabajadores como de empresarios, aptos para la defensa de los intereses respectivos y a trav¨¦s de los cuales pueda efectuarse un di¨¢logo entre interlocutores v¨¢lidos y representativos, en orden a cualquier tipo de pacto.
Solamente si los mecanismos de funcionamiento sindical que se intenta crear son objeto de previa discusi¨®n democr¨¢tica por parte de todos los sectores afectados, el resultado responder¨¢ a lo que hoy parece pedir el pa¨ªs, en l¨ªnea con los principios vigentes en la actualidad en el mundo occidental.
Carles Cuatrecases, presidente del C¨ªrculo de Econom¨ªa de Barcelona.
Antoni Forrellat, empresario
Tanto con el proyecto de ley como con sus manifestaciones, Mart¨ªn Villa mostr¨® una actitud de apertura hacia nuevas formas de organizaci¨®n profesional clasista (l¨¦ase sindicatos), m¨¢s de acuerdo con las normas de la organizaci¨®n del trabajo.
Es evidente que se trata de un lenguaje que habr¨ªa sido inconcebible en boca de un ministro hace unos meses. No obstante es dif¨ªcil que este proyecto de ley pueda ser aceptado por las organizaciones m¨¢s o menos clandestinas que existen en la actualidad, o por las que resulten de una consulta m¨¢s abierta y amplia, sobre todo teniendo en cuenta que la reforma surgir¨¢ de una consulta al Congreso Sindical.
?Unidad Herm¨¦tica? y dirigente de la Convergencia Socialista de Catalunya.
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