En la recta final

Finalizadas ya las elecciones primarias m¨¢s numerosas de la historia de los Estados Unidos, Jimmy Carter se presenta como casi seguro vencedor en la nominaci¨®n para candidato presidencial por el Partido Dem¨®crata. El presidente Ford, en cambio, no ha conseguido obtener en estas elecciones el n¨²mero suficiente de delegados republicanos para hacer frente sin apuros a su rival, Ronald Reagan.Treinta y un Estados y el distrito de Columbia han ido a las urnas en los ¨²ltimos tres meses para seleccionar a los compromisarios que, en las respectivas convenciones nacionales del verano, deber¨¢n elegir a los candidatos presidenciales. La batalla electoral propiamente dicha comenzar¨¢ el 6 de septiembre y concluir¨¢ con las elecciones del 2 de noviembre, de las que saldr¨¢ el nuevo presidente de la naci¨®n.

En los diecinueve Estados que no han celebrado elecciones primarias, los delegados ser¨¢n nombrados en las convenciones de cada partido. Para Carter, ¨¦sto no representa ning¨²n problema en principio, pues cuenta ya con 1.075 delegados de los 1.505 que necesita para obtener la nominaci¨®n, y es m¨¢s que probable que en estos caucus estatales obtenga el resto, aparte de que recibir¨¢ tambi¨¦n los votos de algunos candidatos dem¨®cratas derrotados.

Para el presidente Ford la situaci¨®n es m¨¢s dif¨ªcil. Aunque inici¨® las primarias como virtual triunfador, Ford ha ido perdiendo terreno progresivamente ante Reagan y cuenta con 933 delegados de los 1.130 que ser¨ªan necesarios para ganar en la primera vuelta de la convenci¨®n republicana. Reagan tiene unos 860 delegadosa y podr¨ªa igualar o incluso superar al presidente presidente en las convenciones estatales que restan por celebrarse. Existe, adem¨¢s, un bloque de 203 delegados no comprometidos que podr¨ªa dar el giro decisivo a la pugna por la nominaci¨®n republicana.

El sistema de elecciones primarias comenz¨® en Wisconsin en 1905 y, desde entonces, se ha ido extendiendo por todo el pa¨ªs, hasta haber llegado este a?o a la cifra r¨¦cord de treinta y un Estados. Aunque las primarias no son concluyentes en lo que respecta a la nominaci¨®n de candidatos y, de hecho, pueden presentarse nuevos aspirantes a la Presidencia en la convenci¨®n nacional, s¨ª sirven para calibrar las preferencias de la opini¨®n p¨²blica y hacer m¨¢s directa la elecci¨®n del presidente. En esta ocasi¨®n, pr¨¢cticamente las tres cuartas partes de los compromisarios que acudan a cada convenci¨®n nacional habr¨¢n sido elegidos en las primarias.

Jimmy Carter est¨¢ a un paso de la nominaci¨®n despu¨¦s de sus victorias el martes en Nueva Jersey y Ohio. El peligro que podr¨ªa representar para ¨¦l la aparici¨®n en la escena pol¨ªtica del senador y ex vicepresidente Hubert Humphrey, para combatirle en la convenci¨®n nacional dem¨®crata del pr¨®ximo 12 de julio, parece definitivamente descartado, ya que Humphrey condicion¨® su presentaci¨®n a los resultados que obtuviera Carter.

Por su parte, Gerald Ford debe mover influencias desde ahora hasta la convenci¨®n republicana del 16 de agosto para atraerse a los compromisarios que restan por elegir, m¨¢xime cuando Reagan goza de claras simpat¨ªas en Estados como Nuevo M¨¦xico, Montana y Colorado.