Los quiosqueros madrile?os, amenazados

?Se?or propietario del kiosko: Le comunicamos que a partir del d¨ªa 1 de julio pr¨®ximo, no deben aparecer a la venta en su establecimiento las sucias y pornogr¨¢ficas revistas siguientes?, comienza diciendo una nota que, firmada con las siglas CAM -Campa?a Antipornogr¨¢fica Madrile?a-, han venido recibiendo algunos kiosqueros de Madrid, especialmente en la Puerta del Sol, desde el pasado d¨ªa 23.

Las revistas que, a juicio de CAM, amenazan la integridad f¨ªsica de los kioscos son: Pronto, D¨²o, Interviu, Play Lady, Stop, Personas, Papill¨®n, y Enciclopedia del Erotismo. A ellas se a?aden ?otras m¨¢s, seg¨²n el comunicado, en las que figuran en la portada o en el interior fotograf¨ªas de prostitutas?.La amenaza final habla de que ?caso de no acatar esta advertencia, y pese a que la culpabilidad de usted no es total, procederemos a destruir o incendiar su kiosco?.

??Ah!, ?pero va en serio?? respondieron a EL PA?S algunos de los kiosqueros amenazados. El estupor causado por la nota ha sido seguido por la incredulidad. Sin embargo, los vendedores de prensa en Madrid se encuentran ante una situaci¨®n realmente dif¨ªcil. ?Yo no me meto en si esas revistas son pornogr¨¢ficas o no. Pero si alguien les quiere pedir responsabilidades, que lo hagan directamente a los editores y no a nosotros", han respondido otros. "Nosotros, si no vendemos, no comemos. Y estamos seguros que, despu¨¦s- de estas revistas, si cedemos a la presi¨®n, vendr¨¢n otras, tal vez vetadas, incluso, por otros grupos. Y entonces dejar¨ªamos de vender de todo."

Pero no han sido ¨²nicamente los propietarios de kioscos que han sido amenazados. Tambi¨¦n algunos distribuidores han recibido notas en sentido similar. En una de ellas se hablaba de la posible voladura de su local, si persist¨ªan en la distribuci¨®n de algunas publicaciones. En este caso, las siglas G de CR, se advierte que han de cejar en tal distribuci¨®n, ?si no quiere que le ocurra lo mismo que a La Vaquer¨ªa?.

Denuncias

Todos ellos han presentado ya las oportunas denuncias ante la Direcci¨®n General de Seguridad o en la Comisar¨ªa de Polic¨ªa. que les correspondiera.

Pero todas estas amenazas tienen ya un antecedente, muy reciente. En Santander, hace escasamente una semana, aparecieron pegados en algunos kioscos mensajes dirigidos a sus propietarios, en los que se les hac¨ªan advertencias similares. En este caso, el firmante era la Campa?a Antipornogr¨¢fica en Santander.

Las revistas en cuesti¨®n eran muchas m¨¢s, y en la nota se a?ad¨ªa que los kiosqueros pod¨ªan reunirse, llamar a la polic¨ªa o "hacer lo que quieran. Nosotros tambi¨¦n?

Tanto en el caso de Santander como en el de Madrid, la decisi¨®n que parece imperar es la de seguir vendiendo, si bien en el primero de ellos, se va a tratar de que la exposici¨®n de las revistas amenazadas no sea tan ostentosa como hasta el momento

Los kiosqueros madrile?os, por su parte, tienen pensado recurrir en ayuda en este caso, al ministro de la Gobernaci¨®n y vicepresidente del Gobierno para Asuntos del Interior, Manuel Fraga, as¨ª como al ministro de Informaci¨®n y Turismo. ?Al se?or Fraga, dicen, lo consideramos como parte integrante de nuestro gremio, desde el momento en que le hicimos entrega del primer kiosco de plata, al nombrarle, en los tiempos en que ocupaba la embajada espa?ola en Londres, vendedor honorario de prensa."

Si el problema no encuentra r¨¢pida soluci¨®n, por medio de las suficientes garant¨ªas para la seguridad de los establecimientos que suponen su medio de vida, los kiosqueros tal vez llegaran al cierre temporal, durante dos d¨ªas, de ellos.