La amnist¨ªa, condici¨®n de la oposici¨®n para colaborar

El que los se?ores Fraga y Areilza, este ¨²ltimo sobre todo, no hayan querido participar en el nuevo Gabinete, presidido por el se?or Su¨¢rez, ha esclarecido a muchos. Algunos recuerdan ahora las ex¨¦gesis exultanles, ?como no se hab¨ªan escuchado en Par¨ªs, ni por boca de la oposici¨®n?, de la necesaria legalizaci¨®n del Partido Comunista de Espa?a, hechas por los representantes del partido fraguista, Reforma Democr¨¢tica, contrarias a las que sobre igual cuesti¨®n prodig¨® el antiguo ministro durante el medio a?o de su mandato al frente del Ministerio de Gobernaci¨®n. ?Esto se explica ahora, dice un comentarista del semanario Par¨ªs-Match: Fraga se sab¨ªa condenado y vino a Par¨ªs a rehacer su imagen de dedem¨®crata, cara al porvenir?. Los hombres ligados al Opus Dei siguen en candelero, como investigadores importantes de la Operaci¨®n-Su¨¢rez. Se recuerdan sobre este particular las declaraciones recientes del se?or L¨®pez Rod¨® reafirmando ?su hostilidad a las reformas muy r¨¢pidas?. Alg¨²n observador, aislado, opina que no hay que descartar el milagro, que consistir¨ªa en lo siguiente: ?Su¨¢rez, a la vista del vac¨ªo que le hacen todos los ministros liberales y otros, como el se?or Silva, podr¨ªa verse forzado a anunciar un programa inmediato de democratizaci¨®n, empezando por pronunciar una amnist¨ªa total e inmediata, as¨ª como el ejercicio de todas las libertades?. A prop¨®sito de la amnist¨ªa creen saber los enviados especiales de la prensa francesa a Madrid, que los se?ores Gil Robles y Ruiz-Gim¨¦nez, han sido invitados a formar parte del Gabinete Su¨¢rez, pero ambos rechazaron al no cumplirse su primera condici¨®n: la amnist¨ªa.